25 nov 2008
Control al acopio de agroquímicos en Río III
1:50 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (25/11/2008)
Más control al acopio de agroquímicos en Río Tercero
Río Tercero. Se han incrementado los controles en los locales autorizados para vender agroquímicos en Río Tercero. Ese impulso es reconocido hasta por los propios comerciantes del rubro. Mientras, los establecimientos inspeccionados –que son los que tienen declarada su actividad– plantean que siempre parece quedar pendiente un avance sobre presuntos depósitos “truchos” que en la zona urbana acopiarían esos productos, con menos medidas de seguridad y fuera del alcance de las inspecciones.
Esa realidad no es exclusiva de Río Tercero: en casi toda la provincia se repite.
Fueron inspectores dependientes de la Secretaría de Agricultura de la Provincia quienes exigieron a los seis locales habilitados para acopiar y vender agroquímicos en esta ciudad, algunas reformas que significan adecuaciones a las normas de seguridad exigibles para mantenerlos en zona urbana. En ese marco, se les establecieron varias etapas para esas mejoras.
En pocas semanas más volverán a realizarse nuevas inspecciones, con el propósito de verificar el avance de las modificaciones.
Desde la Municipalidad local se estima que las inversiones requeridas podrían implicar entre 20 y 30 mil pesos por local.
Estas inspecciones apuntan al cumplimiento de la ley provincial que rige desde hace cuatro años, que además de varias exigencias técnicas obliga a los depósitos de este tipo a instalarse fuera del ejido urbano. Río Cuarto, por ejemplo, ha aprobado recientemente una ordenanza que establece un plazo de cinco años para que las empresas que acopian en zonas pobladas se trasladen a un predio ya determinado por el municipio con ese fin.
El relevamiento. Carlos Siccardi, director de Gestión Ambiental del municipio riotercerense, comentó que estuvo presente en esos procedimientos y que los representantes de la cartera provincial arribaron a esta ciudad convocados por su área.
Detalló que el relevamiento alcanzó a la “ubicación, la estructura, la operación en el depósito y la documentación” que poseían.
Siccardi recordó que hace unas semanas atrás, el municipio había convocado a los locales habilitados para la comercialización de agroquímicos para informarles respecto a esta decisión de aplicar en la ciudad la ley provincial, a la cual el municipio está adherido.
Siccardi detalló que el relevamiento efectuado por la Provincia halló “diferencias en cuanto al cumplimiento” de la ley. De todos modos, desde el punto de vista ambiental reconoció que “no surgió ningún dato alarmante” y describió que “hay algunos bastante bien preparados ya y otros que deben hacer inversiones edilicias y de seguridad, que son posibles”.
Hubo casos que debían adecuar el sistema de matafuegos o de las las aberturas, para adecuarlas a las exigidas para estos acopios. Mencionó que todos tienen pisos impermeables (de cemento) que evitan derrames a la tierra.
Siccardi valoró la buena disposición de los empresarios del rubro para adecuarse a la ley. Y aunque evaluó que hasta ahora lo actuado en este rubro “fue un gran avance”, subrayó que “esto es sólo el inicio”.
El funcionario señaló que otro aspecto de la ley de agroquímicos que el municipio está controlando es el de las fumigaciones de campos pegados a la zona urbana.
Buscar un lugar. Siccardi reconoció que Río Tercero “no tiene aún una zona especial alejada del área urbana donde puedan ir este tipo de empresas”. Ese aspecto podría formar parte de una definición urbanística pendiente.
“El municipio debe decidir en un plazo razonable dónde deberán estar estos depósitos, si es que se les da un plazo para salir del área urbana”, planteó el director de Gestión Ambiental.
Las empresas del rubro plantean que por razones operativas y de costos necesitarían tener en el mismo sitio el área comercial y el depósito, lo que complicaría la chance de alejar los sitios de acopio.
Hoy, para los comerciantes que cumplan los trámites que exige la ley provincial en este rubro, el municipio les entrega una “habilitación provisoria”, hasta que se defina –si algún día se llega a esa decisión– en qué lugar y en qué plazos deberían relocalizar sus depósitos.
En ese marco, y consultado al respecto, el intendente Luis Brouwer de Koning admitió que ese tema sigue pendiente pero que sería abordado el próximo año, para cuando prometió la discusión de un plan de desarrollo urbanístico integral de la ciudad.
Extender los controles. Quienes están en el rubro suelen plantear que en estos relevamientos quedan fuera de control los establecimientos no declarados y hasta los simples garajes, en cualquier barrio, donde aunque en menor cantidad, se puedan acopiar agroquímicos sin mayores medidas de seguridad. Siccardi apeló en ese caso a la participación ciudadana para que se denuncien a esos sitios de acopio de estos productos, sean para su comercialización o para uso de algún productor rural que los almacene en zona urbana sin autorización.
Mientras Siccardi pide denuncias para actuar, algunos comerciantes del rubro plantearon que no parece tarea difícil que el municipio controle con un simple recorridos los sitios ligados a la actividad.
“Nosotros sabemos manejar estos productos; la cuestión más grave está en quienes los guardan en un garaje o en quienes se dedican a otros rubros y no cumplen con las normas vigentes”, plantearon desde un local que está habilitado.
Otro planteo que se deja escuchar es que que se controlan acopios con varios miles de litros, cuando hay en zona urbana fábrica de agroquímicos con millones de litros almacenados. A eso, Siccardi contestó que éstas cuentan “con sistemas de tratamiento de residuos peligrosos y que se las audita la Secretaría de Ambiente de la Nación, la Provincia y el municipio.
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Las empresas piden igualdad de trato
Eduardo Cruz, socio de una empresa que comercializa agroquímicos en Río Tercero, pidió “igualdad ante la ley” en el caso de las exigencias para su acopio y abogó porque se definan varias cuestiones pendientes como la modificación del decreto reglamentario de la ley vigente. Por estos días, recién comienza a analizarse ese punto, para lo cual ya se ha constituido una subcomisión. Uno de los puntos que valorará será la eventual ubicación de los depósitos fuera de la zona urbana.
Gustavo Pagliano, gerente de la firma Buffón, coincidió en que son necesarios estos controles y apuntó que en el depósito de esa empresa están ultimando los detalles para inversiones respecto a la seguridad: nivelación del piso de hormigón hacia una rejilla para casos de derrame, más ventilación, colocación de sensores de humo y de receptáculos para posibles derrames. Pagliano entendió que el depósito de esta firma no debería trasladarse a un sitio más alejado, ya que expuso hoy tiene al vecino más cercano “a 400 metros de distancia”. Detalló que tiempo atrás ya se relocalizó allí, por decisión propia, sacándolo del área urbana central donde estaba. También pidió “igualdad a la hora de aplicar la normativa” para que las exigencias lleguen a todos.
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Más control al acopio de agroquímicos en Río Tercero
Río Tercero. Se han incrementado los controles en los locales autorizados para vender agroquímicos en Río Tercero. Ese impulso es reconocido hasta por los propios comerciantes del rubro. Mientras, los establecimientos inspeccionados –que son los que tienen declarada su actividad– plantean que siempre parece quedar pendiente un avance sobre presuntos depósitos “truchos” que en la zona urbana acopiarían esos productos, con menos medidas de seguridad y fuera del alcance de las inspecciones.
Esa realidad no es exclusiva de Río Tercero: en casi toda la provincia se repite.
Fueron inspectores dependientes de la Secretaría de Agricultura de la Provincia quienes exigieron a los seis locales habilitados para acopiar y vender agroquímicos en esta ciudad, algunas reformas que significan adecuaciones a las normas de seguridad exigibles para mantenerlos en zona urbana. En ese marco, se les establecieron varias etapas para esas mejoras.
En pocas semanas más volverán a realizarse nuevas inspecciones, con el propósito de verificar el avance de las modificaciones.
Desde la Municipalidad local se estima que las inversiones requeridas podrían implicar entre 20 y 30 mil pesos por local.
Estas inspecciones apuntan al cumplimiento de la ley provincial que rige desde hace cuatro años, que además de varias exigencias técnicas obliga a los depósitos de este tipo a instalarse fuera del ejido urbano. Río Cuarto, por ejemplo, ha aprobado recientemente una ordenanza que establece un plazo de cinco años para que las empresas que acopian en zonas pobladas se trasladen a un predio ya determinado por el municipio con ese fin.
El relevamiento. Carlos Siccardi, director de Gestión Ambiental del municipio riotercerense, comentó que estuvo presente en esos procedimientos y que los representantes de la cartera provincial arribaron a esta ciudad convocados por su área.
Detalló que el relevamiento alcanzó a la “ubicación, la estructura, la operación en el depósito y la documentación” que poseían.
Siccardi recordó que hace unas semanas atrás, el municipio había convocado a los locales habilitados para la comercialización de agroquímicos para informarles respecto a esta decisión de aplicar en la ciudad la ley provincial, a la cual el municipio está adherido.
Siccardi detalló que el relevamiento efectuado por la Provincia halló “diferencias en cuanto al cumplimiento” de la ley. De todos modos, desde el punto de vista ambiental reconoció que “no surgió ningún dato alarmante” y describió que “hay algunos bastante bien preparados ya y otros que deben hacer inversiones edilicias y de seguridad, que son posibles”.
Hubo casos que debían adecuar el sistema de matafuegos o de las las aberturas, para adecuarlas a las exigidas para estos acopios. Mencionó que todos tienen pisos impermeables (de cemento) que evitan derrames a la tierra.
Siccardi valoró la buena disposición de los empresarios del rubro para adecuarse a la ley. Y aunque evaluó que hasta ahora lo actuado en este rubro “fue un gran avance”, subrayó que “esto es sólo el inicio”.
El funcionario señaló que otro aspecto de la ley de agroquímicos que el municipio está controlando es el de las fumigaciones de campos pegados a la zona urbana.
Buscar un lugar. Siccardi reconoció que Río Tercero “no tiene aún una zona especial alejada del área urbana donde puedan ir este tipo de empresas”. Ese aspecto podría formar parte de una definición urbanística pendiente.
“El municipio debe decidir en un plazo razonable dónde deberán estar estos depósitos, si es que se les da un plazo para salir del área urbana”, planteó el director de Gestión Ambiental.
Las empresas del rubro plantean que por razones operativas y de costos necesitarían tener en el mismo sitio el área comercial y el depósito, lo que complicaría la chance de alejar los sitios de acopio.
Hoy, para los comerciantes que cumplan los trámites que exige la ley provincial en este rubro, el municipio les entrega una “habilitación provisoria”, hasta que se defina –si algún día se llega a esa decisión– en qué lugar y en qué plazos deberían relocalizar sus depósitos.
En ese marco, y consultado al respecto, el intendente Luis Brouwer de Koning admitió que ese tema sigue pendiente pero que sería abordado el próximo año, para cuando prometió la discusión de un plan de desarrollo urbanístico integral de la ciudad.
Extender los controles. Quienes están en el rubro suelen plantear que en estos relevamientos quedan fuera de control los establecimientos no declarados y hasta los simples garajes, en cualquier barrio, donde aunque en menor cantidad, se puedan acopiar agroquímicos sin mayores medidas de seguridad. Siccardi apeló en ese caso a la participación ciudadana para que se denuncien a esos sitios de acopio de estos productos, sean para su comercialización o para uso de algún productor rural que los almacene en zona urbana sin autorización.
Mientras Siccardi pide denuncias para actuar, algunos comerciantes del rubro plantearon que no parece tarea difícil que el municipio controle con un simple recorridos los sitios ligados a la actividad.
“Nosotros sabemos manejar estos productos; la cuestión más grave está en quienes los guardan en un garaje o en quienes se dedican a otros rubros y no cumplen con las normas vigentes”, plantearon desde un local que está habilitado.
Otro planteo que se deja escuchar es que que se controlan acopios con varios miles de litros, cuando hay en zona urbana fábrica de agroquímicos con millones de litros almacenados. A eso, Siccardi contestó que éstas cuentan “con sistemas de tratamiento de residuos peligrosos y que se las audita la Secretaría de Ambiente de la Nación, la Provincia y el municipio.
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Las empresas piden igualdad de trato
Eduardo Cruz, socio de una empresa que comercializa agroquímicos en Río Tercero, pidió “igualdad ante la ley” en el caso de las exigencias para su acopio y abogó porque se definan varias cuestiones pendientes como la modificación del decreto reglamentario de la ley vigente. Por estos días, recién comienza a analizarse ese punto, para lo cual ya se ha constituido una subcomisión. Uno de los puntos que valorará será la eventual ubicación de los depósitos fuera de la zona urbana.
Gustavo Pagliano, gerente de la firma Buffón, coincidió en que son necesarios estos controles y apuntó que en el depósito de esa empresa están ultimando los detalles para inversiones respecto a la seguridad: nivelación del piso de hormigón hacia una rejilla para casos de derrame, más ventilación, colocación de sensores de humo y de receptáculos para posibles derrames. Pagliano entendió que el depósito de esta firma no debería trasladarse a un sitio más alejado, ya que expuso hoy tiene al vecino más cercano “a 400 metros de distancia”. Detalló que tiempo atrás ya se relocalizó allí, por decisión propia, sacándolo del área urbana central donde estaba. También pidió “igualdad a la hora de aplicar la normativa” para que las exigencias lleguen a todos.
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