La Voz de San Justo (18/06/2022)
El vertedero regional en el norte de San Justo

Es una materia pendiente que exigirá un arduo trabajo. Pero será imprescindible puesto que no habrá éxito sin la colaboración vecinal y la maduración social que implica tener actitudes responsables dedicadas a la protección del medio ambiente.
La información oficial señala que el próximo 1 de julio comenzará a funcionar, en modo experimental, el vertedero regional que abarca a varias localidades del norte del departamento. A este sitio llegará lo recolectado en esas poblaciones. La planta se ubica a 2 kilómetros al norte de la localidad de Porteña, en un campo de 12 hectáreas que fue adquirido años atrás por los municipios y ya se encontraría condiciones de operar.
Han sido varias las postergaciones de anuncios que daban cuenta de que comenzarían a depositarse los residuos en ese lugar. Por ello, se aguarda con expectativa que en el próximo mes se cumplan los plazos y el vertedero sea una realidad tangible. Se trata de un proyecto que lleva largos años de idas y vueltas. Más de una década duró el sinuoso proceso que culminaría en los días venideros.
En la última reunión del Ente Intermunicipal de Residuos del Noreste Cordobés y la empresa que estará a cargo del procesamiento de la basura se determinaron las últimas obras pendientes en el vertedero (vestuarios y fosas de deposición final de la basura), así como el establecimiento de los nuevos montos fijos que aporta cada municipio. Finalmente, se decidió que en julio ya comenzará a funcionar.
Si finalmente se concreta este anuncio, la región noreste de la provincia podrá exhibir como ejemplo el trabajo mancomunado de los distintos municipios en un tema socioambiental de máxima importancia en los tiempos actuales, puesto que el tratamiento de los residuos sólidos es una tarea trascendente para garantizar la preservación del ambiente y los distintos ecosistemas.
El acuerdo inicial firmado en noviembre de 2010 establecía un programa consensuado con las reparticiones ambientales del gobierno de Córdoba con ejes vinculados no solo al tratamiento de los residuos urbanos sólidos, sino también en materia de forestación, medidas de protección y educación ambiental de la población. Es de esperar que el inicio de los trabajos en el vertedero impulse también las otras facetas necesarias para que se complete el círculo virtuoso.
La educación ambiental es un tema central a la hora de analizar las perspectivas que tendrá el funcionamiento del predio donde se depositarán los residuos urbanos. La separación domiciliaria y clasificación de la basura exige una conciencia ecológica que no siempre ha logrado internalizarse. Es una materia pendiente que exigirá un arduo trabajo. Pero será imprescindible puesto que no habrá éxito sin la colaboración vecinal y la maduración social que implica tener actitudes responsables dedicadas a la protección del medio ambiente.
De ser así, de cumplirse con los estándares que deben manejarse en cualquier problemática ambiental, podrá cumplirse una sentencia que, en 2010, se publicó en esta columna: "El vertedero será parte de la solución y no un problema más". Este es el anhelo de la población de las ocho localidades que volcarán sus residuos en el lugar.
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