El Diario de Villa María (12/04/2022)
Dictaron decreto para ponerle freno a los residuos patógenos

“He decidido instruir a la asesoría letrada para arbitrar todos los medios necesarios para la restitución del inmueble que es parte del predio del basural”, dijo Gill. El intendente consideró que es facultad del Ejecutivo rechazar la prórroga solicitada por la empresa instalada en el lugar ubicad
Primero, sirve hacer memoria: el 5 de mayo de 2010 se firmó un acuerdo que ratificó el Concejo Deliberante por la ordenanza 6.206, para que una empresa instale una planta de tratamiento de residuos patógenos. Mediante la ordenanza, se autorizaba a usar el suelo por un tiempo determinado: es decir, el convenio tenía una vigencia determinada y una opción de prórroga.
Ahora, la realidad es otra. Ayer, el intendente Martín Gill habló con un periodista de El Diario y contó que dictó un decreto: el 179. Antes de hablar de la resolución, hay que decir esto: que se analizó una serie de aspectos que se relacionan con lo que será más conveniente para el Centro de Gestión Ambiental y con el objetivo de no traer residuos de otros sitios que estén por fuera del conglomerado que conforma Villa María y Villa Nueva.
Desde el Municipio le habían pedido al representante de la empresa, Carlos Catalano, la restitución del predio. Con la resolución, Gill rechazó el argumento de prórroga solicitado por Catalano, porque entendió que la prórroga “es una facultad del Ejecutivo y no de la empresa”. En este sentido, añadió: “He decidido instruir a la asesoría letrada del Municipio para arbitrar todos los medios necesarios para la restitución del inmueble que es parte del predio del basural y, consecuentemente, no otorgarle el derecho de uso para continuar recibiendo este tipo de material y el inmediato cese de las actividades que desarrolla esta empresa, que es ENRE SA”.
Luego, el mandatario apuntó que se articulará con el gobierno de la Provincia y con autoridades municipales para exigir el saneamiento del predio. “Estamos avanzando en un modelo que es absolutamente diferente, integrado de tratamiento de los residuos, y entendemos que esta actividad no es consecuente con los objetivos que nos hemos planteado”, afirmó.
En este punto, insistió en que su proyecto es el de un “vertedero absolutamente controlado conforme a las normas ambientales” y que, además, sea un espacio que procure “la generación de riqueza a partir de economía circular que surja no solo de tarea del reciclado, sino también el agregado de hablar con las plantas adicionales que se van a construir para que el material reciclado adquiera mayor valor: el caucho, el plástico, la madera, y el orgánico”.
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