31 mar 2014
Poca eficiencia de reciclado en Córdoba Capital
8:53 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
Día a Día (31/03/2014)
Basura: cada cordobés recicla sólo 1,8 kilo al año
Basura. Mientras, en promedio, genera 400 kilos de residuos en igual lapso. En 2013, el municipio pudo recuperar 6% más de desechos.
Muy, muy profundo. Así deberá ser el cambio de conducta a asumir por el 1,4 millón de vecinos de la ciudad este año, cuando el municipio generalice –tal como lo viene prometiendo– el servicio de recolección de residuos reciclables o “diferenciada” en la ciudad.
Este cambio –parte del nuevo sistema de higiene urbana que busca aplicar la gestión Mestre– implica hacer que los camiones pasen uno de los seis días semanales que hoy cubren a levantar sólo basura seca de los hogares. Al frentista, le tocará la tarea de sacar correctamente sus residuos: en esa jornada, en la bolsa sólo podrá haber materiales como vidrio, tela, madera, papel y cartón; limpios y secos.
Las estadísticas oficiales de reciclado dan idea de la magnitud del cambio por hacer: durante 2013, los dos centros verdes que opera Crese recibieron 2.577 toneladas de materiales recuperables; un 6,4 por ciento más que las 2.422 que captaron en 2012.
La suba es un dato positivo (resta determinar si sintoniza con un incremento global en la generación de residuos) pero falta mucho: los 2.577.000 kilos anuales recuperados son algo más que el volumen de basura que cada día despacha la ciudad al enterramiento de Piedras Blancas. Si se miran las cantidades desde la perspectiva individual, durante todo 2013 cada habitante de la ciudad recuperó en promedio sólo 1,8 de los 400 kilos de basura que tiró, aproximadamente; cuando lo recuperado podría haber sumado 120 kilos.
Y esto porque, según los datos oficiales, algo más de un tercio de la basura que produce Córdoba es reciclable. Aprovechar eso generaría un enorme beneficio ambiental (de arranque, un tercio menos para enterrar) y económico, con la venta y reúso de los materiales.
¿Y el camión? Si los vecinos están desafiados a cambiar hábitos, en idéntica situación está el municipio a la hora de adecuar la prestación de higiene urbana para permitir la generalización del reciclado. Nominalmente, hoy Lusa y Cotreco cubren el servicio de recolección diferenciada un día a la semana en 190 barrios, pero todo ese circuito que incluye los hogares de miles de cordobeses aportó sólo el 36 por ciento del material recuperado en 2013 (931 toneladas).
A pesar incluso de que esa cifra dio un salto del 15 por ciento respecto del año anterior, siguió siendo mucho mayor lo recolectado por las cooperativas de cartoneros en el Centro: 1.646 toneladas, el 64 por ciento del total reciclado en el año. El resto provino del centro verde ubicado en la zona sur (casi 8 por ciento).
¿Por qué la diferenciada aporta tan poco? Varias causas concurren: la intermitencia que padeció el servicio desde su lanzamiento, en 2009; el cese de las campañas informativas y de concientización sistemáticas y de gran alcance sobre el tema; y las actuales deficiencias con las que Lusa y Cotreco cubren las rutas (recorridos que en muchas ocasiones no se completan). El municipio asegura que este panorama cambiará drásticamente este año, aunque el arranque del nuevo esquema ya sufrió postergaciones.
Para tener idea de la gran oportunidad que nos espera en esta materia, vale sólo recordar el debut que tuvo la recolección diferenciada en agosto de 2009, cuando Crese la lanzó una vez a la semana: sólo en 19 barrios (un décimo de los hoy incluidos), reunió 190 toneladas de residuos en un mes.
Diferenciada. En los sitios de internet de Lusa y Cotreco se puede consultar si un barrio tiene recolección diferenciada.
Crese. Lunes a sábado. En Centre Verde de Crese está en la zona del ex Abasto. Cualquier vecino puede llevar materiales secos.
Un centro bien verde. En septiembre, cuando el municipio lanzó el llamado a licitación para el servicio de higiene urbana, anunció que en enero y antes de que ese proceso se resolviera generalizaría la recolección diferenciada a toda la ciudad.
El debut fue luego corrido para el 1º de marzo, y más tarde postergado hasta abril. Hoy, con la comuna piloteando aún el arranque del nuevo esquema de transporte urbano y las inversiones en el circuito de reciclado sin completar, todavía parece lejana la medida de extender en serio la recolección diferenciada a toda la ciudad.
Igualmente, trascendió desde el municipio que ya se cuenta con un amplio lote ubicado sobre calle Calingasta y próximo a la autopista Córdoba-Rosario (al sureste de la ciudad) donde se montaría un gran centro de reciclado para recibir residuos secos de la ciudad.
Montar una o varias estructuras importantes de este tipo (que recepten y clasifiquen el material) es el necesario paso previo antes de generalizar la recolección diferenciada a toda la ciudad de Córdoba.
Una de las infinitas manera de reusar: haciendo arte. “Más que artista, soy un acumulador”.
Unos 500 juegues rotos y otros elementos puede tener, fácilmente, uno de los murales que hace Silvio Bondolich, alias “Silvio de Plástico”. Sus obras son una explosión de color ante las que grandes y chicos quedan hipnotizados, descubriendo aquel muñequito Playmóvil que no soltaban de chicos o la pila de Rastis que desparramaban en la habitación, mágicamente convertidos en parte de otra escena.
Las piezas combinan, a partir de un cuidado trabajo de encastre y pegado, las grandes pasiones de Silvio: su gusto por recolectar objetos, su sensibilidad artística y su preocupación por contribuir al cuidado del medioambiente.
“Es muy importante reutilizar, evitar que parte de estos objetos terminen en la tierra. Además, muchos de ellos son de culto, porque nos acompañaron de chicos. A mi me gusta prolongarles la vida”, cuenta Silvio desde el pequeño estudio que tiene en su casa. Allí lo rodean sus obras: cuadros-murales de diferentes tamaños, colores y texturas, realizados íntegramente con juguetes que habían sido desechados y otros elementos, en su gran mayoría de plástico.
También hay esculturas, muchas montadas sobre las típicas cabezas de maniquí que sirven para exhibir pelucas, señales directas del oficio del que vive este joven desde hace 16 años, casi desde el momento en que llegó desde su Río Cuarto natal: la peluquería.
El paisaje se completa con cajas y baldes repletos de chiches averiados, agrupados por colores, esperando que Silvio les encuentre la hendija justa en una de sus muchas obras de arte. “Uso los juguetes como pinturas de color, con las que voy dibujando una figura en base a ensambles, como si la obra fuera un Tetris”, dice en referencia al popular juego electrónico de encastre.
Limpieza de mamis. “Más que artista, soy un acumulador”, se define Silvio, avisando que siempre está en busca de materiales para sus cuadros.
“Las contribuyentes más regulares son mis clientas de la peluquería, siempre caen con la bolsita. Sobre todo las mamis cuando hacen la limpieza periódica del cajón de juguetes de sus chicos. Y hay un par de empresas que me donan cosas en temporadas, como Ferniplast y Suma”, enumera el cordobés.
Todos los interesados en acercarle juguetes en desuso están invitados a hacerlo, y quizá puedan reencontrarse con alguna de esas piezas exhibidas en una galería de arte de la ciudad.
Ayudalo. Silvio Bondolich está permanentemente creando arte a partir del reciclado de juguetes viejos. Y por eso necesita de nuestra ayuda para conseguir piezas en desuso que puedan volver a la vida. Por ello, si tenés este tipo de materiales en tu casa para donarle, comunicate con Silvio al su teléfono celular (0351) 152-224325, o a través de su perfil de Facebook: Silvio Bondolich. También podés contactarte con él escribiéndole un e-mail a silviobondolich@hotmail.com.
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Basura: cada cordobés recicla sólo 1,8 kilo al año
Basura. Mientras, en promedio, genera 400 kilos de residuos en igual lapso. En 2013, el municipio pudo recuperar 6% más de desechos.
Muy, muy profundo. Así deberá ser el cambio de conducta a asumir por el 1,4 millón de vecinos de la ciudad este año, cuando el municipio generalice –tal como lo viene prometiendo– el servicio de recolección de residuos reciclables o “diferenciada” en la ciudad.
Este cambio –parte del nuevo sistema de higiene urbana que busca aplicar la gestión Mestre– implica hacer que los camiones pasen uno de los seis días semanales que hoy cubren a levantar sólo basura seca de los hogares. Al frentista, le tocará la tarea de sacar correctamente sus residuos: en esa jornada, en la bolsa sólo podrá haber materiales como vidrio, tela, madera, papel y cartón; limpios y secos.
Las estadísticas oficiales de reciclado dan idea de la magnitud del cambio por hacer: durante 2013, los dos centros verdes que opera Crese recibieron 2.577 toneladas de materiales recuperables; un 6,4 por ciento más que las 2.422 que captaron en 2012.
La suba es un dato positivo (resta determinar si sintoniza con un incremento global en la generación de residuos) pero falta mucho: los 2.577.000 kilos anuales recuperados son algo más que el volumen de basura que cada día despacha la ciudad al enterramiento de Piedras Blancas. Si se miran las cantidades desde la perspectiva individual, durante todo 2013 cada habitante de la ciudad recuperó en promedio sólo 1,8 de los 400 kilos de basura que tiró, aproximadamente; cuando lo recuperado podría haber sumado 120 kilos.
Y esto porque, según los datos oficiales, algo más de un tercio de la basura que produce Córdoba es reciclable. Aprovechar eso generaría un enorme beneficio ambiental (de arranque, un tercio menos para enterrar) y económico, con la venta y reúso de los materiales.
¿Y el camión? Si los vecinos están desafiados a cambiar hábitos, en idéntica situación está el municipio a la hora de adecuar la prestación de higiene urbana para permitir la generalización del reciclado. Nominalmente, hoy Lusa y Cotreco cubren el servicio de recolección diferenciada un día a la semana en 190 barrios, pero todo ese circuito que incluye los hogares de miles de cordobeses aportó sólo el 36 por ciento del material recuperado en 2013 (931 toneladas).
A pesar incluso de que esa cifra dio un salto del 15 por ciento respecto del año anterior, siguió siendo mucho mayor lo recolectado por las cooperativas de cartoneros en el Centro: 1.646 toneladas, el 64 por ciento del total reciclado en el año. El resto provino del centro verde ubicado en la zona sur (casi 8 por ciento).
¿Por qué la diferenciada aporta tan poco? Varias causas concurren: la intermitencia que padeció el servicio desde su lanzamiento, en 2009; el cese de las campañas informativas y de concientización sistemáticas y de gran alcance sobre el tema; y las actuales deficiencias con las que Lusa y Cotreco cubren las rutas (recorridos que en muchas ocasiones no se completan). El municipio asegura que este panorama cambiará drásticamente este año, aunque el arranque del nuevo esquema ya sufrió postergaciones.
Para tener idea de la gran oportunidad que nos espera en esta materia, vale sólo recordar el debut que tuvo la recolección diferenciada en agosto de 2009, cuando Crese la lanzó una vez a la semana: sólo en 19 barrios (un décimo de los hoy incluidos), reunió 190 toneladas de residuos en un mes.
Diferenciada. En los sitios de internet de Lusa y Cotreco se puede consultar si un barrio tiene recolección diferenciada.
Crese. Lunes a sábado. En Centre Verde de Crese está en la zona del ex Abasto. Cualquier vecino puede llevar materiales secos.
Un centro bien verde. En septiembre, cuando el municipio lanzó el llamado a licitación para el servicio de higiene urbana, anunció que en enero y antes de que ese proceso se resolviera generalizaría la recolección diferenciada a toda la ciudad.
El debut fue luego corrido para el 1º de marzo, y más tarde postergado hasta abril. Hoy, con la comuna piloteando aún el arranque del nuevo esquema de transporte urbano y las inversiones en el circuito de reciclado sin completar, todavía parece lejana la medida de extender en serio la recolección diferenciada a toda la ciudad.
Igualmente, trascendió desde el municipio que ya se cuenta con un amplio lote ubicado sobre calle Calingasta y próximo a la autopista Córdoba-Rosario (al sureste de la ciudad) donde se montaría un gran centro de reciclado para recibir residuos secos de la ciudad.
Montar una o varias estructuras importantes de este tipo (que recepten y clasifiquen el material) es el necesario paso previo antes de generalizar la recolección diferenciada a toda la ciudad de Córdoba.
Una de las infinitas manera de reusar: haciendo arte. “Más que artista, soy un acumulador”.
Unos 500 juegues rotos y otros elementos puede tener, fácilmente, uno de los murales que hace Silvio Bondolich, alias “Silvio de Plástico”. Sus obras son una explosión de color ante las que grandes y chicos quedan hipnotizados, descubriendo aquel muñequito Playmóvil que no soltaban de chicos o la pila de Rastis que desparramaban en la habitación, mágicamente convertidos en parte de otra escena.
Las piezas combinan, a partir de un cuidado trabajo de encastre y pegado, las grandes pasiones de Silvio: su gusto por recolectar objetos, su sensibilidad artística y su preocupación por contribuir al cuidado del medioambiente.
“Es muy importante reutilizar, evitar que parte de estos objetos terminen en la tierra. Además, muchos de ellos son de culto, porque nos acompañaron de chicos. A mi me gusta prolongarles la vida”, cuenta Silvio desde el pequeño estudio que tiene en su casa. Allí lo rodean sus obras: cuadros-murales de diferentes tamaños, colores y texturas, realizados íntegramente con juguetes que habían sido desechados y otros elementos, en su gran mayoría de plástico.
También hay esculturas, muchas montadas sobre las típicas cabezas de maniquí que sirven para exhibir pelucas, señales directas del oficio del que vive este joven desde hace 16 años, casi desde el momento en que llegó desde su Río Cuarto natal: la peluquería.
El paisaje se completa con cajas y baldes repletos de chiches averiados, agrupados por colores, esperando que Silvio les encuentre la hendija justa en una de sus muchas obras de arte. “Uso los juguetes como pinturas de color, con las que voy dibujando una figura en base a ensambles, como si la obra fuera un Tetris”, dice en referencia al popular juego electrónico de encastre.
Limpieza de mamis. “Más que artista, soy un acumulador”, se define Silvio, avisando que siempre está en busca de materiales para sus cuadros.
“Las contribuyentes más regulares son mis clientas de la peluquería, siempre caen con la bolsita. Sobre todo las mamis cuando hacen la limpieza periódica del cajón de juguetes de sus chicos. Y hay un par de empresas que me donan cosas en temporadas, como Ferniplast y Suma”, enumera el cordobés.
Todos los interesados en acercarle juguetes en desuso están invitados a hacerlo, y quizá puedan reencontrarse con alguna de esas piezas exhibidas en una galería de arte de la ciudad.
Ayudalo. Silvio Bondolich está permanentemente creando arte a partir del reciclado de juguetes viejos. Y por eso necesita de nuestra ayuda para conseguir piezas en desuso que puedan volver a la vida. Por ello, si tenés este tipo de materiales en tu casa para donarle, comunicate con Silvio al su teléfono celular (0351) 152-224325, o a través de su perfil de Facebook: Silvio Bondolich. También podés contactarte con él escribiéndole un e-mail a silviobondolich@hotmail.com.
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