16 jul 2007
Límites de polución
12:44 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Río Cuarto (16/07/2007)
En el Concejo advierten que no están claros los límites de polución
Miguel Besso presentó un proyecto solicitando que los legisladores provinciales fijen una guía sobre los valores mínimos y máximos de contaminación. Pidió además un nuevo análisis de la empresa K-Dial
Luego que más de 20 familias de barrio Alberdi denunciaran una supuesta contaminación en el sector próximo a la empresa K Dial, que habría provocado enfermos de cáncer y patologías respiratorias, surgió nuevamente la duda sobre los niveles de polución aceptables y la contundencia de la normativa sobre medio ambiente vigente en la provincia.
La semana pasada el concejal de Más por Río Cuarto, Miguel Besso, presentó en el Parlamento local un pedido que, de ser aprobado, será remitido a la Unicameral para que se revea la actual legislación, que “carece de una guía sobre los niveles mínimos y máximos de contaminación”.
En su presentación Besso señala que es necesario “solicitar a la Legislatura provincial que se modifique la Ley 5965/58, a los fines de que se incorporen al texto normativo los valores y parámetros internacionales comparados y convenidos para establecer niveles máximos sobre polución, emisión o líquidos que afecten al medio ambiente”.
La resolución, que aún debe ser analizada en sesión, surge tras la respuesta enviada por la Agencia Córdoba Ambiente al reclamo de los vecinos de la empresa K-Dial.
Besso destacó que “el organismo admite en sus conclusiones del 5 de diciembre del 2005, que el valor de ácido acético registrado en la medición realizada por ILA (una entidad privada contratada por la compañía cuestionada) da por debajo del límite de detección del método”.
“Sin embargo –agrega el edil–, la Agencia admite que para dicho parámetro no existe un valor guía en la Ley Nacional 24051 ni en la Ley 5965/58. También la Provincia precisa que con respecto al resultado del análisis realizado en Ceprocor sobre el líquido que se evapora tampoco existe normativa al respecto, por lo que los resultados obtenidos no pueden ser comparados con ningún valor guía”, precisó.
Finalmente, el organismo oficial manifiesta en su resolución que “el tratamiento de esterilización realizado a los residuos generados les quitaría la peligrosidad, por lo que éstos podrían ser tratados como un residuo sólido urbano".
Lo curioso del dictamen que surge desde la Coordinación de Auditorías Ambientales es que su conclusión termina en una definición en potencial, y no algo certero que quite cualquier margen de dudas en el análisis de los afectados.
“No conforman”
Los argumentos de la Agencia Córdoba Ambiente lejos estuvieron de conformar a los vecinos, que insisten con las consecuencias que provoca el tratamiento de líquidos, presuntamente contaminantes, en una zona residencial.
Inicialmente, el concejal radical pidió que la Agencia solicite un nuevo análisis técnico sobre impacto ambiental de la firma K-Dial y consideró que debía realizarlo “un organismo público, universidad o instituto que posea la tecnología adecuada”. La petición nunca fue aceptada.
Ahora, ante el insistente reclamo de los damnificados, surge un nuevo pedido para modificar la normativa que, según analiza Besso, no ofrece certezas sobre cuáles son los valores que determinan si hay o no contaminación.
“Se pudo constatar que existen valores y parámetros de medición para afluentes líquidos, gases u otros tipos de polución que la ley no contempla ni prevé. Estos valores están vinculados a los avances tecnológicos e instrumental adecuado para determinar con eficacia los niveles de contaminación de la empresa”, indicó.
El edil consideró que “el Gobierno de Córdoba, más allá de la legislación nacional en la materia, posee competencia para establecer e incorporar criterios internacionales ya que la base jurisprudencial reconoce la competencia de la Provincia en medio ambiente”.
Besso aseguró que, “aun cuando finalmente se determinara que no hay contaminación generada por K-Dial que afecte las vías respiratorias de los vecinos o provoque casos de cáncer, el solo hecho de emanar un olor nauseabundo que permanece durante casi todo el día a varias cuadras alrededor de la empresa es motivo para su traslado”.
Los vecinos de la empresa ubicada en Entre Ríos 924 advierten que continuarán con los reclamos para lograr la reubicación del edificio donde se realiza el tratado de líquidos, convencidos de que las afecciones de salud que muchos padecen están directamente vinculadas al accionar de la compañía.
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En el Concejo advierten que no están claros los límites de polución
Miguel Besso presentó un proyecto solicitando que los legisladores provinciales fijen una guía sobre los valores mínimos y máximos de contaminación. Pidió además un nuevo análisis de la empresa K-Dial
Luego que más de 20 familias de barrio Alberdi denunciaran una supuesta contaminación en el sector próximo a la empresa K Dial, que habría provocado enfermos de cáncer y patologías respiratorias, surgió nuevamente la duda sobre los niveles de polución aceptables y la contundencia de la normativa sobre medio ambiente vigente en la provincia.
La semana pasada el concejal de Más por Río Cuarto, Miguel Besso, presentó en el Parlamento local un pedido que, de ser aprobado, será remitido a la Unicameral para que se revea la actual legislación, que “carece de una guía sobre los niveles mínimos y máximos de contaminación”.
En su presentación Besso señala que es necesario “solicitar a la Legislatura provincial que se modifique la Ley 5965/58, a los fines de que se incorporen al texto normativo los valores y parámetros internacionales comparados y convenidos para establecer niveles máximos sobre polución, emisión o líquidos que afecten al medio ambiente”.
La resolución, que aún debe ser analizada en sesión, surge tras la respuesta enviada por la Agencia Córdoba Ambiente al reclamo de los vecinos de la empresa K-Dial.
Besso destacó que “el organismo admite en sus conclusiones del 5 de diciembre del 2005, que el valor de ácido acético registrado en la medición realizada por ILA (una entidad privada contratada por la compañía cuestionada) da por debajo del límite de detección del método”.
“Sin embargo –agrega el edil–, la Agencia admite que para dicho parámetro no existe un valor guía en la Ley Nacional 24051 ni en la Ley 5965/58. También la Provincia precisa que con respecto al resultado del análisis realizado en Ceprocor sobre el líquido que se evapora tampoco existe normativa al respecto, por lo que los resultados obtenidos no pueden ser comparados con ningún valor guía”, precisó.
Finalmente, el organismo oficial manifiesta en su resolución que “el tratamiento de esterilización realizado a los residuos generados les quitaría la peligrosidad, por lo que éstos podrían ser tratados como un residuo sólido urbano".
Lo curioso del dictamen que surge desde la Coordinación de Auditorías Ambientales es que su conclusión termina en una definición en potencial, y no algo certero que quite cualquier margen de dudas en el análisis de los afectados.
“No conforman”
Los argumentos de la Agencia Córdoba Ambiente lejos estuvieron de conformar a los vecinos, que insisten con las consecuencias que provoca el tratamiento de líquidos, presuntamente contaminantes, en una zona residencial.
Inicialmente, el concejal radical pidió que la Agencia solicite un nuevo análisis técnico sobre impacto ambiental de la firma K-Dial y consideró que debía realizarlo “un organismo público, universidad o instituto que posea la tecnología adecuada”. La petición nunca fue aceptada.
Ahora, ante el insistente reclamo de los damnificados, surge un nuevo pedido para modificar la normativa que, según analiza Besso, no ofrece certezas sobre cuáles son los valores que determinan si hay o no contaminación.
“Se pudo constatar que existen valores y parámetros de medición para afluentes líquidos, gases u otros tipos de polución que la ley no contempla ni prevé. Estos valores están vinculados a los avances tecnológicos e instrumental adecuado para determinar con eficacia los niveles de contaminación de la empresa”, indicó.
El edil consideró que “el Gobierno de Córdoba, más allá de la legislación nacional en la materia, posee competencia para establecer e incorporar criterios internacionales ya que la base jurisprudencial reconoce la competencia de la Provincia en medio ambiente”.
Besso aseguró que, “aun cuando finalmente se determinara que no hay contaminación generada por K-Dial que afecte las vías respiratorias de los vecinos o provoque casos de cáncer, el solo hecho de emanar un olor nauseabundo que permanece durante casi todo el día a varias cuadras alrededor de la empresa es motivo para su traslado”.
Los vecinos de la empresa ubicada en Entre Ríos 924 advierten que continuarán con los reclamos para lograr la reubicación del edificio donde se realiza el tratado de líquidos, convencidos de que las afecciones de salud que muchos padecen están directamente vinculadas al accionar de la compañía.
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