9 jul 2007
Estiran el uso de las hidroeléctricas
9:00 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Río Cuarto (09/07/2007)
Estiran el uso de las hidroeléctricas dando menos energía a la industria
Las fábricas tuvieron menos disponibilidad durante el fin de semana. Es para ahorrar agua en las centrales hidroeléctricas del sur y utilizarlas a partir de mañana, cuando la demanda suba fuerte
La ola polar estremeció este fin de semana a los industriales de la provincia y el país. Es que la llegada de los copos de nieve, que puso contentos a muchos, llenó de preocupación a los responsables de las fábricas porque el corte de gas y las restricciones totales de electricidad se acercan con la caída de la temperatura.
“Estamos muy preocupados porque además del aumento del consumo domiciliario están a punto de salir de funcionamiento las centrales hidroeléctricas del Sur y con eso perderíamos 2.800 megavatios”, explicó Rodolfo Banchio, responsable del departamento de Energía de la Unión Industrial de Córdoba (UIC).
Además, Cammesa decidió que para este fin de semana, lejos de relajar las entregas, se ajusten más con el objeto de ahorrar para que a partir de mañana, cuando levante la presión de la industria, los hogares y el GNC, la poca agua que aún tienen las centrales hidroeléctricas del Sur sea utilizada para generar.
La sensación de los industriales es que si la ola de frío persiste, ésta puede ser la semana más complicada para el sector desde el punto de vista energético.
El ahorro que se anunció para sábado, domingo y hoy es de 1.200 megavatios, igual que en las jornadas previas. Pero los recortes llegaron más ajustados a las distintas plantas de la región y la provincia. Cuando muchos creían que en estos días podían recuparar el tiempo de producción perdido en la semana, la noticia los sorprendió.
A su vez, las noticias de mayores importaciones de electricidad de Brasil no lograron cambiar el clima en los hombres de negocios. “Hay que sacar una cuenta simple, si se intenta ahorrar 1.200 megavatios desde hace al menos 15 días y Brasil sumará sólo 400, está claro que seguimos en problemas y que no tenemos soluciones de corto plazo pese a incrementar la compra de energía en el exterior”, graficó un industrial de la región ayer a la tarde.
Pero el golpe de gracia se dará si no se revierte la situación en la cuenca del río Limay, donde se concentra gran parte de la generación hidroeléctrica del país. En la Argentina, casi el 52% de la generación es termo (gas, fuel o gasoil); y más del 40% es hidro; 3% es nuclear y el resto responde a importaciones desde Brasil.
Es por eso que la escasez de gas natural y la falta de lluvias en la zona de las represas pusieron más que nunca al sistema energético nacional al borde del colapso.
Como siempre hasta aquí, la lista de recortes está encabezada por la industria y seguida por las estaciones de GNC. En último lugar aparecen los hogares, aun cuando los técnicos del área de Energía de la Nación, al igual que los industriales, insisten en repartir las cargas en todos los sectores. Por ahora, se priorizó el criterio político.
De todos modos, los actores del sector remarcan que el margen es cada vez más reducido para seguir protegiendo a los residenciales del ahorro que viene practicando la industria a la fuerza. Por eso aseguran que ésta puede ser una semana bisagra.
Estiran el uso de las hidroeléctricas dando menos energía a la industria
La ola polar estremeció este fin de semana a los industriales de la provincia y el país. Es que la llegada de los copos de nieve, que puso contentos a muchos, llenó de preocupación a los responsables de las fábricas porque el corte de gas y las restricciones totales de electricidad se acercan con la caída de la temperatura.
“Estamos muy preocupados porque además del aumento del consumo domiciliario están a punto de salir de funcionamiento las centrales hidroeléctricas del Sur y con eso perderíamos 2.800 megavatios”, explicó Rodolfo Banchio, responsable del departamento de Energía de la Unión Industrial de Córdoba (UIC).
Además, Cammesa decidió que para este fin de semana, lejos de relajar las entregas, se ajusten más con el objeto de ahorrar para que a partir de mañana, cuando levante la presión de la industria, los hogares y el GNC, la poca agua que aún tienen las centrales hidroeléctricas del Sur sea utilizada para generar.
La sensación de los industriales es que si la ola de frío persiste, ésta puede ser la semana más complicada para el sector desde el punto de vista energético.
El ahorro que se anunció para sábado, domingo y hoy es de 1.200 megavatios, igual que en las jornadas previas. Pero los recortes llegaron más ajustados a las distintas plantas de la región y la provincia. Cuando muchos creían que en estos días podían recuparar el tiempo de producción perdido en la semana, la noticia los sorprendió.
A su vez, las noticias de mayores importaciones de electricidad de Brasil no lograron cambiar el clima en los hombres de negocios. “Hay que sacar una cuenta simple, si se intenta ahorrar 1.200 megavatios desde hace al menos 15 días y Brasil sumará sólo 400, está claro que seguimos en problemas y que no tenemos soluciones de corto plazo pese a incrementar la compra de energía en el exterior”, graficó un industrial de la región ayer a la tarde.
Pero el golpe de gracia se dará si no se revierte la situación en la cuenca del río Limay, donde se concentra gran parte de la generación hidroeléctrica del país. En la Argentina, casi el 52% de la generación es termo (gas, fuel o gasoil); y más del 40% es hidro; 3% es nuclear y el resto responde a importaciones desde Brasil.
Es por eso que la escasez de gas natural y la falta de lluvias en la zona de las represas pusieron más que nunca al sistema energético nacional al borde del colapso.
Como siempre hasta aquí, la lista de recortes está encabezada por la industria y seguida por las estaciones de GNC. En último lugar aparecen los hogares, aun cuando los técnicos del área de Energía de la Nación, al igual que los industriales, insisten en repartir las cargas en todos los sectores. Por ahora, se priorizó el criterio político.
De todos modos, los actores del sector remarcan que el margen es cada vez más reducido para seguir protegiendo a los residenciales del ahorro que viene practicando la industria a la fuerza. Por eso aseguran que ésta puede ser una semana bisagra.
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Estiran el uso de las hidroeléctricas dando menos energía a la industria
Las fábricas tuvieron menos disponibilidad durante el fin de semana. Es para ahorrar agua en las centrales hidroeléctricas del sur y utilizarlas a partir de mañana, cuando la demanda suba fuerte
La ola polar estremeció este fin de semana a los industriales de la provincia y el país. Es que la llegada de los copos de nieve, que puso contentos a muchos, llenó de preocupación a los responsables de las fábricas porque el corte de gas y las restricciones totales de electricidad se acercan con la caída de la temperatura.
“Estamos muy preocupados porque además del aumento del consumo domiciliario están a punto de salir de funcionamiento las centrales hidroeléctricas del Sur y con eso perderíamos 2.800 megavatios”, explicó Rodolfo Banchio, responsable del departamento de Energía de la Unión Industrial de Córdoba (UIC).
Además, Cammesa decidió que para este fin de semana, lejos de relajar las entregas, se ajusten más con el objeto de ahorrar para que a partir de mañana, cuando levante la presión de la industria, los hogares y el GNC, la poca agua que aún tienen las centrales hidroeléctricas del Sur sea utilizada para generar.
La sensación de los industriales es que si la ola de frío persiste, ésta puede ser la semana más complicada para el sector desde el punto de vista energético.
El ahorro que se anunció para sábado, domingo y hoy es de 1.200 megavatios, igual que en las jornadas previas. Pero los recortes llegaron más ajustados a las distintas plantas de la región y la provincia. Cuando muchos creían que en estos días podían recuparar el tiempo de producción perdido en la semana, la noticia los sorprendió.
A su vez, las noticias de mayores importaciones de electricidad de Brasil no lograron cambiar el clima en los hombres de negocios. “Hay que sacar una cuenta simple, si se intenta ahorrar 1.200 megavatios desde hace al menos 15 días y Brasil sumará sólo 400, está claro que seguimos en problemas y que no tenemos soluciones de corto plazo pese a incrementar la compra de energía en el exterior”, graficó un industrial de la región ayer a la tarde.
Pero el golpe de gracia se dará si no se revierte la situación en la cuenca del río Limay, donde se concentra gran parte de la generación hidroeléctrica del país. En la Argentina, casi el 52% de la generación es termo (gas, fuel o gasoil); y más del 40% es hidro; 3% es nuclear y el resto responde a importaciones desde Brasil.
Es por eso que la escasez de gas natural y la falta de lluvias en la zona de las represas pusieron más que nunca al sistema energético nacional al borde del colapso.
Como siempre hasta aquí, la lista de recortes está encabezada por la industria y seguida por las estaciones de GNC. En último lugar aparecen los hogares, aun cuando los técnicos del área de Energía de la Nación, al igual que los industriales, insisten en repartir las cargas en todos los sectores. Por ahora, se priorizó el criterio político.
De todos modos, los actores del sector remarcan que el margen es cada vez más reducido para seguir protegiendo a los residenciales del ahorro que viene practicando la industria a la fuerza. Por eso aseguran que ésta puede ser una semana bisagra.
Estiran el uso de las hidroeléctricas dando menos energía a la industria
La ola polar estremeció este fin de semana a los industriales de la provincia y el país. Es que la llegada de los copos de nieve, que puso contentos a muchos, llenó de preocupación a los responsables de las fábricas porque el corte de gas y las restricciones totales de electricidad se acercan con la caída de la temperatura.
“Estamos muy preocupados porque además del aumento del consumo domiciliario están a punto de salir de funcionamiento las centrales hidroeléctricas del Sur y con eso perderíamos 2.800 megavatios”, explicó Rodolfo Banchio, responsable del departamento de Energía de la Unión Industrial de Córdoba (UIC).
Además, Cammesa decidió que para este fin de semana, lejos de relajar las entregas, se ajusten más con el objeto de ahorrar para que a partir de mañana, cuando levante la presión de la industria, los hogares y el GNC, la poca agua que aún tienen las centrales hidroeléctricas del Sur sea utilizada para generar.
La sensación de los industriales es que si la ola de frío persiste, ésta puede ser la semana más complicada para el sector desde el punto de vista energético.
El ahorro que se anunció para sábado, domingo y hoy es de 1.200 megavatios, igual que en las jornadas previas. Pero los recortes llegaron más ajustados a las distintas plantas de la región y la provincia. Cuando muchos creían que en estos días podían recuparar el tiempo de producción perdido en la semana, la noticia los sorprendió.
A su vez, las noticias de mayores importaciones de electricidad de Brasil no lograron cambiar el clima en los hombres de negocios. “Hay que sacar una cuenta simple, si se intenta ahorrar 1.200 megavatios desde hace al menos 15 días y Brasil sumará sólo 400, está claro que seguimos en problemas y que no tenemos soluciones de corto plazo pese a incrementar la compra de energía en el exterior”, graficó un industrial de la región ayer a la tarde.
Pero el golpe de gracia se dará si no se revierte la situación en la cuenca del río Limay, donde se concentra gran parte de la generación hidroeléctrica del país. En la Argentina, casi el 52% de la generación es termo (gas, fuel o gasoil); y más del 40% es hidro; 3% es nuclear y el resto responde a importaciones desde Brasil.
Es por eso que la escasez de gas natural y la falta de lluvias en la zona de las represas pusieron más que nunca al sistema energético nacional al borde del colapso.
Como siempre hasta aquí, la lista de recortes está encabezada por la industria y seguida por las estaciones de GNC. En último lugar aparecen los hogares, aun cuando los técnicos del área de Energía de la Nación, al igual que los industriales, insisten en repartir las cargas en todos los sectores. Por ahora, se priorizó el criterio político.
De todos modos, los actores del sector remarcan que el margen es cada vez más reducido para seguir protegiendo a los residenciales del ahorro que viene practicando la industria a la fuerza. Por eso aseguran que ésta puede ser una semana bisagra.
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