26 jul 2009
Salsipuedes, dividida por un Dinosaurio
8:14 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
Día a Día (26/07/2009)
Salsipuedes, dividida por un Dinosaurio
Los vecinos están agitados por el comienzo de la obra del megacomplejo inmobiliario de Euclides Bugliotti. La falta de agua en la localidad está en el centro del debate. Para zanjar la polémica, el intendente piensa realizar una encuesta entre los pobladores.
Como ya ha ocurrido con otros emprendimientos del grupo Dinosaurio, el comienzo de las obras del megaproyecto inmobiliario que el empresario cordobés Euclides Bugliotti levantará en Salsipuedes (construirá un hotel, un restaurante y torres de departamentos en un bosque natural de 150 hectáreas) ya está generando amores y odios entre los habitantes del pueblo.
Y mientras los técnicos municipales y provinciales analizan el impacto social y ambiental que generará la obra, y con una guerra de firmas a favor y en contra del proyecto ya desatada en la ciudad, el intendente de Salsipuedes, Sergio Cornejo, evalúa por estas horas hacer una estudio de opinión para saber qué piensa la población de ese tranquilo pueblo de las Sierras Chicas sobre el futuro complejo turístico y habitacional de la factoría Bugliotti.
“El municipio está en medio de dos expresiones muy claras: los que quieren que se realice el proyecto, y los que no. Por eso, no queremos tomar la decisión solos, para lo cual estamos evaluando encargarle a una consultora que realice una encuesta para saber qué quiere el pueblo”, le adelantó Cornejo a Día a Día. Según el jefe comunal, el resultado del estudio no sería vinculante, pero en caso de que la respuesta fuera negativa, lo obligaría a tomar una decisión política que iría más allá de los estudios técnicos que se están llevando adelante para definir la factibilidad del emprendimiento que, en estos momentos, está en la etapa de movimiento de suelo.
No obstante ello, la Municipalidad enviará en los próximos días un proyecto de ordenanza al Concejo Deliberante autorizando una excepción al código urbano local que permita habilitar la construcción del complejo inmobiliario en una localidad donde la mayor edificación no supera los 10 metros de altura. “Bugliotti tiene todo el derecho a desarrollar su emprendimiento, y para ello debemos adecuar la normativa vigente”, explicó el intendente quien insistió en que para radicarse en el pueblo debe presentar todos los estudios técnicos que permitan certificar la viabilidad del emprendimiento. “Hasta que no estén esos estudios, no los dejaremos poner un solo ladrillo”, advirtió.
Entre esos requisitos, figura la factibilidad de aprovisionamiento de agua, el impacto ambiental y de tránsito, y el plan de desagües de efluentes cloacales.
Manos a la obra. El titular de la firma Dinosaurio tiene pensado invertir en Salsipuedes 20 millones de dólares para construir en los próximos dos años y medio un hotel de tres estrellas de 72 habitaciones, un restaurante de lujo, y cuatro torres de 80 departamentos cada una. La plata saldrá de un crédito que le otorgará el Banco de Córdoba al empresario. El lugar elegido es la antigua estancia La Overa, un predio de 150 hectáreas colindantes a la ruta E-53, propiedad que –dicen las malas lenguas– pertenecía a la familia del ex gobernador de Córdoba, Ramón Bautista Mestre.
Los desarrollos inmobiliarios, que también incluyen grandes Salones de Usos Múltiples (SUM), ocuparán unas 28 hectáreas del predio. Según la habilitación que otorgará la Municipalidad, las torres de departamentos tendrán una altura máxima de 20 metros, repartida en seis o siete pisos. Según estimaciones de Bugliotti, sólo para la construcción de los edificios y el hotel, se crearán unos 400 puestos de trabajo directos.
Inicialmente, se mencionaba la construcción de una cancha de golf en el lugar, iniciativa que luego fue descartada por el propio Bugliotti. En su lugar, se instalará en una de las zonas vírgenes del predio una suerte de enorme pajarera que albergará aves que sean decomisadas en operativos de la Secretaría de Ambiente, organismo con el que Dinosaurio firmó un convenio marco semanas atrás. “El acuerdo permitirá que la fauna que incautemos podamos preservarla en un lugar propicio para ello, hasta que se pueda proceder a su liberación”, dijo Raúl Costa, titular de Ambiente de la Provincia, quien relativizó las críticas de quienes señalan los riesgos de “importar” especies extrañas en un ámbito natural distinto. “Mis técnicos dicen que no habrá ningún problema”, expresó Costa, aunque reconoció que no conoce personalmente La Overa, lugar donde serán traslados los animales.
El predio es un riquísimo reservorio de especies vegetales autóctonas, como espinillos, talas, quebrachos, algarrobos y chañares, además de una fauna animal también diversa, como corzuelas, zorros, corzuelas, serpientes y varios tipos de aves propias de la región, todas especies que podrían ver peligrar su hábitat si el proyecto inmobiliario de Dinosaurio termina teniendo un impacto negativo, tal como lo denuncian algunos vecinos. Hacia el sudoeste, La Overa colinda con el nuevo Camino del Cuadrado (otra zona de enorme riqueza ambiental), que comunica a las Sierras Chicas con el valle de Punilla.
Según Cornejo, el permiso municipal obligará a Bugliotti a preservar intacto entre el 50 y el 60 por ciento del bosque nativo existente.
La guerra del agua. Pero quizás los mayores reparos que despierta la obra de Bugliotti son los relacionados con la demanda de agua que requerirá el emprendimiento, particularmente una vez que esté concluido y en funcionamiento. “Esta es una zona que atraviesa una grave crisis hídrica, y la verdad es que no hay un sólo estudio serio que demuestre que el proyecto de Bugliotti no agravará aún más la situación”, le dijo a Día a Día Diego Gurvich, vecino de la localidad e investigador del Conicet que, junto con otros pobladores de Salsipuedes presentaron días atrás un pedido de informes al Concejo Deliberante –acompañado de la firma de 250 pobladores– para que se rinda cuenta de los estudios de impacto hídrico y ambiental que se hayan realizado o se piensan realizar respecto de la mega obra.
“Bugliotti dice que tiene sus propios pozos de captación de agua, pero lo cierto es que la cuenca hídrica es una sola. Por más que extraiga agua de su propiedad, lo que terminará haciendo es secar el recurso del que se nutre, ya con dificultades, todo el pueblo”, entendió Gurvich.
Según cálculos de la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia, el emprendimiento de Dinosaurio utilizará –funcionando a pleno– unos 400 mil litros de agua por día. Vale decir, casi 150 millones de litros de agua al año. “Hasta ahora, el empresario Bugliotti sólo ha requerido autorización para realizar dos perforaciones y usar el agua de un sólo pozo, con un límite de mil metros cúbicos al año, es decir, unos 2.700 litros por día, lo que equivale al consumo normal de una familia numerosa”, le aseguró a este diario Jorge Masih, titular de la ex Dipas. La información de Masih se contradice con los dichos del propio empresario, quien asegura que ya ha realizado cuatro pozos.
El titular de la cartera responsable de velar por los recursos hídricos de la provincia adelantó que si Bugliotti realiza nuevas perforaciones donde encuentra agua, sólo se le autorizará su uso en la medida que esas extracciones no afecten el caudal de pozos preexistentes que abastecen a la red domiciliaria del pueblo. “Según el Derecho de Aguas, siempre tienen prioridad los pozos más antiguos y en funcionamiento”, explicó.
En ese mismo sentido, los vecinos que ponen reparos sobre el proyecto denuncian desmontes en el predio, lo que ocasionaría la erosión de los suelos y una menor captación del agua de lluvia. Pero según Bugliotti, sólo se ha desmontado la periferia para preparar contrafuegos.
Perfil de pueblo. Pero la discusión por la disponibilidad de agua no es la única polémica a propósito de la llegada de Bugliotti y su obra. El perfil de pueblo que quieren sus habitantes para ellos y sus hijos es otro debate, quizás más acallado, que de a poco va ganando las opiniones en los hogares y las calles.
“Si alguien quiere transformar a Salsipuedes en una localidad con un fuerte acento turístico, como un nuevo Carlos Paz, por ejemplo, tenemos que discutirlo entre todos”, advierte Gurvich. “No puede venir alguien e imponérnoslo desde afuera”, protestó en alusión al empresario cordobés. El mismo Cornejo es consciente de esta discusión más de fondo. “Salsipuedes pasó de dos mil habitantes a comienzos de los años ‘90, a tener más de 10 mil residentes permanentes. Ya no es la tranquila villa serrana que supo ser. Tenemos que saber equilibrar las posibilidades de desarrollo que surgen, con el cuidado del miedo ambiente, al tiempo que garantizar la provisión de servicios”, señaló.
“Posiblemente, Salsipuedes pueda tener un perfil mixto, con emprendimientos turísticos e industriales que hagan al progreso económico y generen empleos, pero conservando la calidad de vida propia de una ciudad pequeña que siempre tuvo”, sugirió Cornejo.
Como se ve, el debate está abierto. Y mientras las máquinas comienzan a trabajar, Salsipuedes se ha convertido en un hervidero de opiniones que alaban y denostan con igual intensidad al proyecto de Bugliotti. Todo parece indicar que la película continuará.
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Derechos y obligaciones
Más allá de las particularidades del caso, la polémica desatada en Salsipuedes por la obra de Euclides Bugliotti pone al descubierto un problema que cada día adquiere más relevancia en las pequeñas localidades del Gran Córdoba.
Más allá de las particularidades del caso, la polémica desatada en Salsipuedes por la obra de Euclides Bugliotti pone al descubierto un problema que cada día adquiere más relevancia en las pequeñas localidades del Gran Córdoba. La llegada de grandes emprendimientos inmobiliarios, comerciales o turísticos implica, sin lugar a dudas, un progreso económico a través de la mejora de la infraestructura del lugar y de la generación de puestos de trabajo para poblaciones que, en buena medida, todavía mantienen economías de subsistencia.
Pero al mismo tiempo, la irrupción de estos megadesarrollos colisiona fuertemente con la forma de vida acuñada desde hace décadas por los habitantes del lugar, idiosincrasia que también ha sido adoptada por los nuevos vecinos que escaparon de Córdoba eligiendo un espacio tranquilo y natural para vivir.
Claro está, empresas como Dinosaurio tienen derecho a radicar sus emprendimientos en esas localidades. La ley los ampara y, sobre todo, tienen el dinero para hacerlo. Pero también es cierto que deben considerar que sus desarrollos tienen un impacto que va más allá del progreso económico. En el caso de Salsipuedes, no es gratuito el temor de un importante sector de la comunidad por la eventual degradación del ambiente natural y, particularmente, por el posible colapso de la precaria estructura de servicios públicos que dicho proyecto podría ocasionar.
Por todo ello, los empresarios interesados en desarrollar estos grandes emprendimientos tienen no sólo derechos que ejercer, sino también obligaciones que honrar para con los pobladores del lugar. El progreso económico no puede ser el único argumento válido para justificar la radicación de sus megacomplejos turísticos y comerciales. Hay toda una historia, una cultura, unos valores que respetar, y es justamente eso lo que reclaman los vecinos que quieren ser partícipes del horizonte hacia el que caminan sus localidades.
Además de analizar las factibilidades técnicas de los nuevos desarrollos, los gobiernos locales deberían promover el debate de sus comunidades sobre estas cuestiones más integrales. La encuesta que tiene en mente el intendente de Salsipuedes para zanjar la discusión sobre la llegada de Bugliotti apunta en ese sentido. Y aunque parece un mecanismo algo limitado, no deja de ser un primer paso para habilitar la discusión y la participación social sobre el tema.
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Bugliotti: Tengo el apoyo del pueblo
Euclides Bugliotti está acostumbrado a que sus emprendimientos generen polémica. Quizás por ello, no le sorprendió el llamado de Día a Día para consultarlo por la polvareda que ha levantado en Salsipuedes su proyecto inmobiliario en la vieja estancia La Overa.
Euclides Bugliotti está acostumbrado a que sus emprendimientos generen polémica. Quizás por ello, no le sorprendió el llamado de Día a Día para consultarlo por la polvareda que ha levantado en Salsipuedes su proyecto inmobiliario en la vieja estancia La Overa.
–¿Está al tanto de la polémica que ha despertado en Salsipuedes la llegada de su proyecto?
–Claro que sí. Está dividida la mano en el pueblo. Hay gente a favor y otra en contra. Pero hay poca información. La gente común no sabe qué pasa. Creen que sacando agua de mi pozo, el pueblo se va a quedar sin agua. Y eso no va a pasar.
–Hay vecinos que aseguran que eso va a pasar por más que tome agua de su propiedad.
–Mire, hicimos cuatro pozos con autorización de la Dipas. Y tenemos agua suficiente para nuestro emprendimiento, y hasta nos va a sobrar. Y mis pozos no afectan la cuenca de Salsipuedes. Eso dicen mis geólogos. Nuestros pozos sacan agua a 120 metros, y los del pueblo están a 20 metros.
–¿Se compromete a eso?
–Me comprometo a no pedirle agua a Salsipuedes que no sea de mi cuenca. No pido que me den agua. Pero no hay que molestar al desarrollo. Para el pueblo, mi emprendimiento será muy novedoso.
–También se lo critica por los desmontes...
–El predio tiene mucho monte, es cierto. Pero estamos conservando casi todo el bosque autóctono. Sólo estamos haciendo contrafuegos, permitidos por ley. Y abriendo caminos para alambrar la zona. Del bosque no se va a tocar ni un árbol.
–Piensa hacer una reserva con aves, ¿no tendrá un fuerte impacto en el ecosistema local?
–Si hay aves exóticas, estarán en jaulas. El resto de los pájaros que lleve la Secretaría de Ambiente estarán libres. Además, no dejaremos cazar en todo el predio, y tendremos guardaparques.
–¿Piensa tener una laguna?
–Lo que vamos a hacer es una especie de pozo para los líquidos cloacales de todo el complejo, a los que trataremos con una cámara de ozono, y con ello regaremos todo el predio.
–¿Qué le dice a la gente del pueblo, sobre todo a la que en contra de su proyecto?
–Que no se asuste. La idea es tomar toda gente de Salsipuedes para que trabaje en el hotel. Ya tenemos más de 400 personas del lugar anotadas para la construcción del complejo. Además, tenemos mucho apoyo. Ya se han juntado unas mil firmas apoyando el proyecto. El comercio del pueblo está de acuerdo en su totalidad. Y hasta hay intendentes de la región que también nos apoyan.
–¿Y el de Salsipuedes?
–El intendente de Salsipuedes no emite sonido. Lo que pasa es que no quiere tener un enfrentamiento con el pueblo. Que haya apenas 100 personas en contra, en un pueblo de 11 mil habitantes, no es nada. En el Dino de la ruta 20 pasó lo mismo, y hoy está casi todo el mundo conforme. Ahora, si sigue la resistencia en Salsipuedes, estoy dispuesto a levantar el proyecto y llevármelo a otro lado. Ya gasté 400 mil pesos en estudios, y me siguen poniendo trabas. Yo no puedo seguir gastando plata para nada.
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Salsipuedes, dividida por un Dinosaurio
Los vecinos están agitados por el comienzo de la obra del megacomplejo inmobiliario de Euclides Bugliotti. La falta de agua en la localidad está en el centro del debate. Para zanjar la polémica, el intendente piensa realizar una encuesta entre los pobladores.
Como ya ha ocurrido con otros emprendimientos del grupo Dinosaurio, el comienzo de las obras del megaproyecto inmobiliario que el empresario cordobés Euclides Bugliotti levantará en Salsipuedes (construirá un hotel, un restaurante y torres de departamentos en un bosque natural de 150 hectáreas) ya está generando amores y odios entre los habitantes del pueblo.
Y mientras los técnicos municipales y provinciales analizan el impacto social y ambiental que generará la obra, y con una guerra de firmas a favor y en contra del proyecto ya desatada en la ciudad, el intendente de Salsipuedes, Sergio Cornejo, evalúa por estas horas hacer una estudio de opinión para saber qué piensa la población de ese tranquilo pueblo de las Sierras Chicas sobre el futuro complejo turístico y habitacional de la factoría Bugliotti.
“El municipio está en medio de dos expresiones muy claras: los que quieren que se realice el proyecto, y los que no. Por eso, no queremos tomar la decisión solos, para lo cual estamos evaluando encargarle a una consultora que realice una encuesta para saber qué quiere el pueblo”, le adelantó Cornejo a Día a Día. Según el jefe comunal, el resultado del estudio no sería vinculante, pero en caso de que la respuesta fuera negativa, lo obligaría a tomar una decisión política que iría más allá de los estudios técnicos que se están llevando adelante para definir la factibilidad del emprendimiento que, en estos momentos, está en la etapa de movimiento de suelo.
No obstante ello, la Municipalidad enviará en los próximos días un proyecto de ordenanza al Concejo Deliberante autorizando una excepción al código urbano local que permita habilitar la construcción del complejo inmobiliario en una localidad donde la mayor edificación no supera los 10 metros de altura. “Bugliotti tiene todo el derecho a desarrollar su emprendimiento, y para ello debemos adecuar la normativa vigente”, explicó el intendente quien insistió en que para radicarse en el pueblo debe presentar todos los estudios técnicos que permitan certificar la viabilidad del emprendimiento. “Hasta que no estén esos estudios, no los dejaremos poner un solo ladrillo”, advirtió.
Entre esos requisitos, figura la factibilidad de aprovisionamiento de agua, el impacto ambiental y de tránsito, y el plan de desagües de efluentes cloacales.
Manos a la obra. El titular de la firma Dinosaurio tiene pensado invertir en Salsipuedes 20 millones de dólares para construir en los próximos dos años y medio un hotel de tres estrellas de 72 habitaciones, un restaurante de lujo, y cuatro torres de 80 departamentos cada una. La plata saldrá de un crédito que le otorgará el Banco de Córdoba al empresario. El lugar elegido es la antigua estancia La Overa, un predio de 150 hectáreas colindantes a la ruta E-53, propiedad que –dicen las malas lenguas– pertenecía a la familia del ex gobernador de Córdoba, Ramón Bautista Mestre.
Los desarrollos inmobiliarios, que también incluyen grandes Salones de Usos Múltiples (SUM), ocuparán unas 28 hectáreas del predio. Según la habilitación que otorgará la Municipalidad, las torres de departamentos tendrán una altura máxima de 20 metros, repartida en seis o siete pisos. Según estimaciones de Bugliotti, sólo para la construcción de los edificios y el hotel, se crearán unos 400 puestos de trabajo directos.
Inicialmente, se mencionaba la construcción de una cancha de golf en el lugar, iniciativa que luego fue descartada por el propio Bugliotti. En su lugar, se instalará en una de las zonas vírgenes del predio una suerte de enorme pajarera que albergará aves que sean decomisadas en operativos de la Secretaría de Ambiente, organismo con el que Dinosaurio firmó un convenio marco semanas atrás. “El acuerdo permitirá que la fauna que incautemos podamos preservarla en un lugar propicio para ello, hasta que se pueda proceder a su liberación”, dijo Raúl Costa, titular de Ambiente de la Provincia, quien relativizó las críticas de quienes señalan los riesgos de “importar” especies extrañas en un ámbito natural distinto. “Mis técnicos dicen que no habrá ningún problema”, expresó Costa, aunque reconoció que no conoce personalmente La Overa, lugar donde serán traslados los animales.
El predio es un riquísimo reservorio de especies vegetales autóctonas, como espinillos, talas, quebrachos, algarrobos y chañares, además de una fauna animal también diversa, como corzuelas, zorros, corzuelas, serpientes y varios tipos de aves propias de la región, todas especies que podrían ver peligrar su hábitat si el proyecto inmobiliario de Dinosaurio termina teniendo un impacto negativo, tal como lo denuncian algunos vecinos. Hacia el sudoeste, La Overa colinda con el nuevo Camino del Cuadrado (otra zona de enorme riqueza ambiental), que comunica a las Sierras Chicas con el valle de Punilla.
Según Cornejo, el permiso municipal obligará a Bugliotti a preservar intacto entre el 50 y el 60 por ciento del bosque nativo existente.
La guerra del agua. Pero quizás los mayores reparos que despierta la obra de Bugliotti son los relacionados con la demanda de agua que requerirá el emprendimiento, particularmente una vez que esté concluido y en funcionamiento. “Esta es una zona que atraviesa una grave crisis hídrica, y la verdad es que no hay un sólo estudio serio que demuestre que el proyecto de Bugliotti no agravará aún más la situación”, le dijo a Día a Día Diego Gurvich, vecino de la localidad e investigador del Conicet que, junto con otros pobladores de Salsipuedes presentaron días atrás un pedido de informes al Concejo Deliberante –acompañado de la firma de 250 pobladores– para que se rinda cuenta de los estudios de impacto hídrico y ambiental que se hayan realizado o se piensan realizar respecto de la mega obra.
“Bugliotti dice que tiene sus propios pozos de captación de agua, pero lo cierto es que la cuenca hídrica es una sola. Por más que extraiga agua de su propiedad, lo que terminará haciendo es secar el recurso del que se nutre, ya con dificultades, todo el pueblo”, entendió Gurvich.
Según cálculos de la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia, el emprendimiento de Dinosaurio utilizará –funcionando a pleno– unos 400 mil litros de agua por día. Vale decir, casi 150 millones de litros de agua al año. “Hasta ahora, el empresario Bugliotti sólo ha requerido autorización para realizar dos perforaciones y usar el agua de un sólo pozo, con un límite de mil metros cúbicos al año, es decir, unos 2.700 litros por día, lo que equivale al consumo normal de una familia numerosa”, le aseguró a este diario Jorge Masih, titular de la ex Dipas. La información de Masih se contradice con los dichos del propio empresario, quien asegura que ya ha realizado cuatro pozos.
El titular de la cartera responsable de velar por los recursos hídricos de la provincia adelantó que si Bugliotti realiza nuevas perforaciones donde encuentra agua, sólo se le autorizará su uso en la medida que esas extracciones no afecten el caudal de pozos preexistentes que abastecen a la red domiciliaria del pueblo. “Según el Derecho de Aguas, siempre tienen prioridad los pozos más antiguos y en funcionamiento”, explicó.
En ese mismo sentido, los vecinos que ponen reparos sobre el proyecto denuncian desmontes en el predio, lo que ocasionaría la erosión de los suelos y una menor captación del agua de lluvia. Pero según Bugliotti, sólo se ha desmontado la periferia para preparar contrafuegos.
Perfil de pueblo. Pero la discusión por la disponibilidad de agua no es la única polémica a propósito de la llegada de Bugliotti y su obra. El perfil de pueblo que quieren sus habitantes para ellos y sus hijos es otro debate, quizás más acallado, que de a poco va ganando las opiniones en los hogares y las calles.
“Si alguien quiere transformar a Salsipuedes en una localidad con un fuerte acento turístico, como un nuevo Carlos Paz, por ejemplo, tenemos que discutirlo entre todos”, advierte Gurvich. “No puede venir alguien e imponérnoslo desde afuera”, protestó en alusión al empresario cordobés. El mismo Cornejo es consciente de esta discusión más de fondo. “Salsipuedes pasó de dos mil habitantes a comienzos de los años ‘90, a tener más de 10 mil residentes permanentes. Ya no es la tranquila villa serrana que supo ser. Tenemos que saber equilibrar las posibilidades de desarrollo que surgen, con el cuidado del miedo ambiente, al tiempo que garantizar la provisión de servicios”, señaló.
“Posiblemente, Salsipuedes pueda tener un perfil mixto, con emprendimientos turísticos e industriales que hagan al progreso económico y generen empleos, pero conservando la calidad de vida propia de una ciudad pequeña que siempre tuvo”, sugirió Cornejo.
Como se ve, el debate está abierto. Y mientras las máquinas comienzan a trabajar, Salsipuedes se ha convertido en un hervidero de opiniones que alaban y denostan con igual intensidad al proyecto de Bugliotti. Todo parece indicar que la película continuará.
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Derechos y obligaciones
Más allá de las particularidades del caso, la polémica desatada en Salsipuedes por la obra de Euclides Bugliotti pone al descubierto un problema que cada día adquiere más relevancia en las pequeñas localidades del Gran Córdoba.
Más allá de las particularidades del caso, la polémica desatada en Salsipuedes por la obra de Euclides Bugliotti pone al descubierto un problema que cada día adquiere más relevancia en las pequeñas localidades del Gran Córdoba. La llegada de grandes emprendimientos inmobiliarios, comerciales o turísticos implica, sin lugar a dudas, un progreso económico a través de la mejora de la infraestructura del lugar y de la generación de puestos de trabajo para poblaciones que, en buena medida, todavía mantienen economías de subsistencia.
Pero al mismo tiempo, la irrupción de estos megadesarrollos colisiona fuertemente con la forma de vida acuñada desde hace décadas por los habitantes del lugar, idiosincrasia que también ha sido adoptada por los nuevos vecinos que escaparon de Córdoba eligiendo un espacio tranquilo y natural para vivir.
Claro está, empresas como Dinosaurio tienen derecho a radicar sus emprendimientos en esas localidades. La ley los ampara y, sobre todo, tienen el dinero para hacerlo. Pero también es cierto que deben considerar que sus desarrollos tienen un impacto que va más allá del progreso económico. En el caso de Salsipuedes, no es gratuito el temor de un importante sector de la comunidad por la eventual degradación del ambiente natural y, particularmente, por el posible colapso de la precaria estructura de servicios públicos que dicho proyecto podría ocasionar.
Por todo ello, los empresarios interesados en desarrollar estos grandes emprendimientos tienen no sólo derechos que ejercer, sino también obligaciones que honrar para con los pobladores del lugar. El progreso económico no puede ser el único argumento válido para justificar la radicación de sus megacomplejos turísticos y comerciales. Hay toda una historia, una cultura, unos valores que respetar, y es justamente eso lo que reclaman los vecinos que quieren ser partícipes del horizonte hacia el que caminan sus localidades.
Además de analizar las factibilidades técnicas de los nuevos desarrollos, los gobiernos locales deberían promover el debate de sus comunidades sobre estas cuestiones más integrales. La encuesta que tiene en mente el intendente de Salsipuedes para zanjar la discusión sobre la llegada de Bugliotti apunta en ese sentido. Y aunque parece un mecanismo algo limitado, no deja de ser un primer paso para habilitar la discusión y la participación social sobre el tema.
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Bugliotti: Tengo el apoyo del pueblo
Euclides Bugliotti está acostumbrado a que sus emprendimientos generen polémica. Quizás por ello, no le sorprendió el llamado de Día a Día para consultarlo por la polvareda que ha levantado en Salsipuedes su proyecto inmobiliario en la vieja estancia La Overa.
Euclides Bugliotti está acostumbrado a que sus emprendimientos generen polémica. Quizás por ello, no le sorprendió el llamado de Día a Día para consultarlo por la polvareda que ha levantado en Salsipuedes su proyecto inmobiliario en la vieja estancia La Overa.
–¿Está al tanto de la polémica que ha despertado en Salsipuedes la llegada de su proyecto?
–Claro que sí. Está dividida la mano en el pueblo. Hay gente a favor y otra en contra. Pero hay poca información. La gente común no sabe qué pasa. Creen que sacando agua de mi pozo, el pueblo se va a quedar sin agua. Y eso no va a pasar.
–Hay vecinos que aseguran que eso va a pasar por más que tome agua de su propiedad.
–Mire, hicimos cuatro pozos con autorización de la Dipas. Y tenemos agua suficiente para nuestro emprendimiento, y hasta nos va a sobrar. Y mis pozos no afectan la cuenca de Salsipuedes. Eso dicen mis geólogos. Nuestros pozos sacan agua a 120 metros, y los del pueblo están a 20 metros.
–¿Se compromete a eso?
–Me comprometo a no pedirle agua a Salsipuedes que no sea de mi cuenca. No pido que me den agua. Pero no hay que molestar al desarrollo. Para el pueblo, mi emprendimiento será muy novedoso.
–También se lo critica por los desmontes...
–El predio tiene mucho monte, es cierto. Pero estamos conservando casi todo el bosque autóctono. Sólo estamos haciendo contrafuegos, permitidos por ley. Y abriendo caminos para alambrar la zona. Del bosque no se va a tocar ni un árbol.
–Piensa hacer una reserva con aves, ¿no tendrá un fuerte impacto en el ecosistema local?
–Si hay aves exóticas, estarán en jaulas. El resto de los pájaros que lleve la Secretaría de Ambiente estarán libres. Además, no dejaremos cazar en todo el predio, y tendremos guardaparques.
–¿Piensa tener una laguna?
–Lo que vamos a hacer es una especie de pozo para los líquidos cloacales de todo el complejo, a los que trataremos con una cámara de ozono, y con ello regaremos todo el predio.
–¿Qué le dice a la gente del pueblo, sobre todo a la que en contra de su proyecto?
–Que no se asuste. La idea es tomar toda gente de Salsipuedes para que trabaje en el hotel. Ya tenemos más de 400 personas del lugar anotadas para la construcción del complejo. Además, tenemos mucho apoyo. Ya se han juntado unas mil firmas apoyando el proyecto. El comercio del pueblo está de acuerdo en su totalidad. Y hasta hay intendentes de la región que también nos apoyan.
–¿Y el de Salsipuedes?
–El intendente de Salsipuedes no emite sonido. Lo que pasa es que no quiere tener un enfrentamiento con el pueblo. Que haya apenas 100 personas en contra, en un pueblo de 11 mil habitantes, no es nada. En el Dino de la ruta 20 pasó lo mismo, y hoy está casi todo el mundo conforme. Ahora, si sigue la resistencia en Salsipuedes, estoy dispuesto a levantar el proyecto y llevármelo a otro lado. Ya gasté 400 mil pesos en estudios, y me siguen poniendo trabas. Yo no puedo seguir gastando plata para nada.
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bueno por un lado el proyecto si se logra hacer... generaria mucha fuente de trabajo y por otro lado ya dejaria de ser ese hermoso lugar que es salsipuedes, es desir ya no tendria la paz que hoy tiene. bueno eso es lo que yo desde mi humilde lugar opino.yo soy una enamorada de salsipuedes y hace poco hemos comprado un terrenito en villa de sol. pero desgraciadamente cuando me llegue a la muni para pedir el agua ademas de pedirme el plano de la futura casita y varias cositas mas ademas de plata, beno me dijeron que estavan paradas las obras de el agua!!! alguien me pordia dar mas informacion???