13 jul 2009
El fuego avanzó en las sierras
9:25 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (13/07/2009)
Temen que el fuego llegue a zonas pobladas
El principal foco es cerca de Cuesta Blanca y tiene cuatro kilómetros de frente. El cambio de viento puede agravar la situación.
Tiene un frente de unos cuatro kilómetros. A pesar del paso de las horas, no se detiene. Su principal alimento es la vegetación autóctona, reseca por la sequía de hace meses, y las constantes ráfagas de viento. Se trata del incendio que se inició el sábado a la tarde en la base del camino a las Altas Cumbres, en la zona de Cuesta Blanca, a 20 kilómetros de la ciudad de Villa Carlos Paz. Pese al intenso trabajo de los bomberos y de los aviones hidrantes, la pared de fuego sigue activa y avanza sin pausa.
Para peor, para el cierre de esta edición y para la madrugada de hoy se esperaba un cambio en la rotación del viento, lo que generaría un incremento de las llamas y, a la vez, el riesgo de que el fuego se dirija hacia zonas pobladas: Cuesta Blanca, Icho Cruz y San Antonio de Arredondo son algunas de las principales poblaciones en riesgo.
Así lo precisaron a este diario los responsables del Plan Provincial de Manejo del Fuego.
A todo esto, el camino a las Altas Cumbres fue interrumpido al tránsito preventivamente durante algunas horas.
"La situación está complicadísima. El viento y la sequía dificultan nuestro trabajo. Sabemos que el viento va a cambiar y va a generar un incendio de interfase, con lo que se pondrá en riesgo a varias poblaciones", dijo anoche a este diario, Marcelo Colombatti, director del Plan. "Estamos trabajando a full, listos para cualquier emergencia. Y estamos convocando a más bomberos de otros cuarteles para el trabajo", añadió.
Afortunadamente, hasta ahora, el fuego –que es intencional, según las autoridades– no provocó lesionados. Tampoco hay personas evacuadas.
El mismo incendio se expande a Las Jarillas, un paraje donde también hay pobladores.
Más frentes de fuego. Además de este frente, se mantenía activo otro foco de fuego en Estancia San Bernardo, paraje ubicado en inmediaciones del viejo camino a las Altas Cumbres, que va de Copina a Traslasierra, al oeste provincial.
Y hay otro incendio que no pudo ser sofocado por completo en cercanías de la ciudad de La Calera, en proximidades del dique San Roque. Por fortuna, hasta ahora, no había riesgo de que las llamas avanzaran hacia la zona poblada.
Diego Concha, subdirector del Plan Provincial de Manejo del Fuego, indicó que es complicada la labor en esa área, dado que había mucho viento y por la topografía del lugar.
El bombero indicó que hay quebradas pronunciadas en las montañas y que por ello no se puede llegar con autobombas. Sólo se puede combatir las llamas con bomberos munidos de chicotes y mochilas de agua que cargan sobre sus espaldas. "Es muy difícil sobrevolar con el helicóptero", dijo Concha.
Bomberos golpeados. Concha indicó que algunos bomberos que combaten las llamas en la zona de La Calera resultaron "golpeados" por el desprendimiento de piedras.
Ya el sábado se había interrumpido preventivamente el tránsito de automóviles por ese sector, dado el riesgo de la caída de rocas desde lo alto de las montañas, por culpa de las llamas.
Anoche se indicó que este incendio había sido controlado, de todas maneras esa situación podía modificarse dado las fuertes ráfagas de viento.
Para peor, sin lluvias. Lo que complica aun más la situación es que no hay pronósticos de lluvias para el corto plazo. A raíz de la sequía reinante, las pasturas y el bosque serrano se convierten en el alimento ideal para las llamas.
El pronóstico del tiempo difundido ayer daba cuenta de que para las próximas horas se espera clima seco, despejado y frío por la mañana. A su vez se aguarda una disminución del porcentaje de la humedad. Para peor, a partir de mañana podría registrarse un ligero aumento de la temperatura.
En la lucha contra el fuego, están trabajando numerosos bomberos voluntarios de distintos cuarteles de la región, quienes cuentan con el apoyo de aviones hidrantes del Plan Provincial de Manejo del Fuego. Paralelamente, el Ejército colabora con soldados voluntarios y con un helicóptero.
La semana pasada tampoco fue fácil para los bomberos, ya que debieron trabajar en las extinciones de varios incendios.
Desde el Gobierno se indicó que todos los bomberos voluntarios son asistidos con comida y provisiones necesarias para el desempeño de sus funciones.
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La Mañana de Córdoba (13/07/2009)
El viento complicó la tarea de 250 bomberos
Hasta el cierre de esta edición, unas 40 dotaciones continuaban trabajando para apagar dos focos de incendio graves en La Calera y las Altas Cumbres. Según estimaciones oficiales, el fuego habría quemado unas 600 hectáreas de pastizales secos. En el operativo colaboraron dos aviones hidrantes y un helicóptero del Plan Nacional de Manejo del Fuego. Bomberos temen que un cambio de rumbo en el viento afecte zonas urbanas.
Unas 40 dotaciones de Bomberos combatían anoche dos focos de incendio graves en las localidades de La Calera y Altas Cumbres, donde personal del Plan Provincial de Manejo del Fuego temía que llegara a afectar la zona urbana.
En esa zona de las sierras cordobesas se registraba anoche la situación más grave.
Allí, 25 dotaciones de Bomberos con unos 150 hombres trabajaban en sofocar un frente de unos 4.000 metros.
“Tenemos información de que en las próximas horas cambiará el rumbo del viento sur, con lo que se encuentra verdaderamente en riesgo la zona urbana”, señaló el titular del Plan Provincial de Manejo del Fuego, Marcelo Colombatti.
Hasta el cierre de esta edición, no se habían registrado heridos graves ni evacuados.
En esa región, el fuego se inició en las zonas de pastizales y un bosque serrano, algo que se agrava con el paso de las horas y la influencia del viento.
En tanto, en La Calera, un frente mil metros de fuego se reavivó en la madrugada de ayer, lo que motivó que continúe cortada durante todo el la Ruta E- 55 que une la localidad con el paredón del dique San Roque.
En el lugar trabajaron durante la jornada 12 dotaciones de Bomberos con más de 80 hombres, 30 voluntarios del Ejército, dos aviones hidrantes y un helicóptero del Plan Nacional de Manejo del Fuego, con lo cual anoche ya estaba prácticamente controlado el foco.
“Hubo mucho viento y la topografía del lugar dificultó mucho acceder para extinguirlo. También fue muy difícil sobrevolar con el helicóptero y sólo se pudo acceder con mochilas de bombas de espalda.”, señaló el asesor de Seguridad Vial de la Provincia, Javier Sosa.
Al cierre de esta edición, la actividad del fuego continuaba sólo en unos 20 metros de frente, pero no se encontraba en riesgo la zona urbana.
Según señalaron desde el Ministerio de Gobierno, la mezcla de viento seco, humedad nula, falta de lluvias y la mano del hombre fueron los desencadenantes de los focos.
“En la mayoría de los casos estamos seguros que se trató de negligencia del hombre y no de la acción de la naturaleza. Si bien es muy pronto para determinar si se trató de una quema deliberada, estamos seguros que allí hay mano del hombre”, señaló Javier Sosa, asesor de Seguridad Vial del Ministerio de Gobierno de Córdoba.
Todos los hombres y mujeres que están trabajando en uno y otro frente son asistidos con comida y las provisiones necesarias para el desempeño de sus funciones.
Las llamas afectan sobre todo las pasturas, pero en algunos sectores incluso hay desmoronamientos de rocas. “Hemos tenido bomberos golpeados y por eso está cortada la Ruta E-55 en La Calera, por el riesgo potencial para los automovilistas”, dijeron.
En tanto, personal de Bomberos sofocó anoche otro foco en la zona rural cercana a Alta Gracia en el cruce con Alto Fierros, donde trabajaron unas cinco dotaciones en las inmediaciones del Aeroclub local.
En Santa Rosa de Calamuchita también se inició un foco de incendio, que anoche estaba controlado.
Epoca sensible
En ambos casos, personal del Plan Provincial de Manejo del Fuego se encuentra realizando guardia de cenizas en caso de que se reactive el fuego.
Desde la dependencia provincial recordaron que para esta época del año, “el índice de riesgo es alto por incendios. Estos no empiezan solos, sino que en el 95 por ciento de los casos está la mano del hombre y todos debemos colaborar para detenerlos”, explicó Sosa.
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Día a Día (13/07/2009)
Fuego sin control en las sierras
Anoche, había dos focos muy activos en las Altas Cumbres y en La Calera. El intenso viento y la sequía complicaban la tarea de los bomberos.
En la zona de las Altas Cumbres la acción de los bomberos se vio dificultada por el fuerte viento.
Más 250 bomberos de distintas dotaciones de la provincia combatían anoche cuerpo a cuerpo dos grandes incendios en las Altas Cumbres y la zona rural de La Calera. En diálogo con Día a Día, el director del Plan de Manejo del Fuego, Diego Colombatti, calificó a la situación como “muy grave” debido a los intensos vientos y la profunda sequía de la vegetación, factores que contribuían de manera decisiva en la propagación de ambos focos.
El mayor de los incendios, en las Altas Cumbres, tenía anoche un frente de cuatro mil metros. “Estamos preocupados. Se espera que a la madrugada rote el viento al sur, lo que podría poner en riesgo zonas urbanizadas en Las Jarillas y en cercanías a Icho Cruz”, señaló Colombatti. Para contener el avance del fuego en esas zonas, se habían dispuesto más de 20 autobombas.
Hasta que cayó la noche, también estuvieron trabajando tres aviones hidrantes y un helicóptero. “No creo que se trate de incendios intencionales. Está tan seco todo, que una sola colilla de cigarrillo es capaz de ocasionar estos tremendos incendios”, explicó Colombatti, quien pidió extremar las medidas de prevención contra incendios.
“En las Altas Cumbres, el fuego se reinició en las zonas de pastizales y en un bosque serrano, situación que se agrava con el paso de los días ya que, por ahora, no hay perspectivas de lluvia”, detalló el funcionario.
Ruta cortada. En La Calera, la zona afectada se ubica en la alta montaña, región de abundantes pasturas silvestres, pero alejada de centros poblados. En horas de la tarde, la ruta E-55 estuvo interrumpida desde el paredón del dique San Roque. “Hay mucho viento y la topografía del lugar dificulta mucho acceder hasta el fuego para extinguirlo”, decía ayer por la tarde el subdirector del Plan de Manejo del Fuego, Diego Concha.
Los responsables del Plan de Manejo del Fuego explicaron que la combinación de fuertes vientos y humo hizo muy difícil la tarea de los aviones hidrantes y que sólo pudo acceder con mochilas de bombas de espalda. Las llamas afectaron ayer a las pasturas secas, pero en algunos sectores incluso se registraron desmoronamientos de rocas.
“Hemos tenido bomberos golpeados y por eso está cortada la ruta por el riesgo potencial para los automovilistas”, dijo Concha, al tiempo que indicó que persistirá durante toda la semana el índice de riesgo alto por incendios.
Anoche, desde algunos sectores de Córdoba Capital, se advertía el triste espectáculo de la quema imparable en las laderas de las sierras chicas.
Según el funcionario, se registran en las sierras cordobesas unos 15 incendios por día. Para colmo, no hay expectativas de lluvias.
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Temen que el fuego llegue a zonas pobladas
El principal foco es cerca de Cuesta Blanca y tiene cuatro kilómetros de frente. El cambio de viento puede agravar la situación.
Tiene un frente de unos cuatro kilómetros. A pesar del paso de las horas, no se detiene. Su principal alimento es la vegetación autóctona, reseca por la sequía de hace meses, y las constantes ráfagas de viento. Se trata del incendio que se inició el sábado a la tarde en la base del camino a las Altas Cumbres, en la zona de Cuesta Blanca, a 20 kilómetros de la ciudad de Villa Carlos Paz. Pese al intenso trabajo de los bomberos y de los aviones hidrantes, la pared de fuego sigue activa y avanza sin pausa.
Para peor, para el cierre de esta edición y para la madrugada de hoy se esperaba un cambio en la rotación del viento, lo que generaría un incremento de las llamas y, a la vez, el riesgo de que el fuego se dirija hacia zonas pobladas: Cuesta Blanca, Icho Cruz y San Antonio de Arredondo son algunas de las principales poblaciones en riesgo.
Así lo precisaron a este diario los responsables del Plan Provincial de Manejo del Fuego.
A todo esto, el camino a las Altas Cumbres fue interrumpido al tránsito preventivamente durante algunas horas.
"La situación está complicadísima. El viento y la sequía dificultan nuestro trabajo. Sabemos que el viento va a cambiar y va a generar un incendio de interfase, con lo que se pondrá en riesgo a varias poblaciones", dijo anoche a este diario, Marcelo Colombatti, director del Plan. "Estamos trabajando a full, listos para cualquier emergencia. Y estamos convocando a más bomberos de otros cuarteles para el trabajo", añadió.
Afortunadamente, hasta ahora, el fuego –que es intencional, según las autoridades– no provocó lesionados. Tampoco hay personas evacuadas.
El mismo incendio se expande a Las Jarillas, un paraje donde también hay pobladores.
Más frentes de fuego. Además de este frente, se mantenía activo otro foco de fuego en Estancia San Bernardo, paraje ubicado en inmediaciones del viejo camino a las Altas Cumbres, que va de Copina a Traslasierra, al oeste provincial.
Y hay otro incendio que no pudo ser sofocado por completo en cercanías de la ciudad de La Calera, en proximidades del dique San Roque. Por fortuna, hasta ahora, no había riesgo de que las llamas avanzaran hacia la zona poblada.
Diego Concha, subdirector del Plan Provincial de Manejo del Fuego, indicó que es complicada la labor en esa área, dado que había mucho viento y por la topografía del lugar.
El bombero indicó que hay quebradas pronunciadas en las montañas y que por ello no se puede llegar con autobombas. Sólo se puede combatir las llamas con bomberos munidos de chicotes y mochilas de agua que cargan sobre sus espaldas. "Es muy difícil sobrevolar con el helicóptero", dijo Concha.
Bomberos golpeados. Concha indicó que algunos bomberos que combaten las llamas en la zona de La Calera resultaron "golpeados" por el desprendimiento de piedras.
Ya el sábado se había interrumpido preventivamente el tránsito de automóviles por ese sector, dado el riesgo de la caída de rocas desde lo alto de las montañas, por culpa de las llamas.
Anoche se indicó que este incendio había sido controlado, de todas maneras esa situación podía modificarse dado las fuertes ráfagas de viento.
Para peor, sin lluvias. Lo que complica aun más la situación es que no hay pronósticos de lluvias para el corto plazo. A raíz de la sequía reinante, las pasturas y el bosque serrano se convierten en el alimento ideal para las llamas.
El pronóstico del tiempo difundido ayer daba cuenta de que para las próximas horas se espera clima seco, despejado y frío por la mañana. A su vez se aguarda una disminución del porcentaje de la humedad. Para peor, a partir de mañana podría registrarse un ligero aumento de la temperatura.
En la lucha contra el fuego, están trabajando numerosos bomberos voluntarios de distintos cuarteles de la región, quienes cuentan con el apoyo de aviones hidrantes del Plan Provincial de Manejo del Fuego. Paralelamente, el Ejército colabora con soldados voluntarios y con un helicóptero.
La semana pasada tampoco fue fácil para los bomberos, ya que debieron trabajar en las extinciones de varios incendios.
Desde el Gobierno se indicó que todos los bomberos voluntarios son asistidos con comida y provisiones necesarias para el desempeño de sus funciones.
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La Mañana de Córdoba (13/07/2009)
El viento complicó la tarea de 250 bomberos
Hasta el cierre de esta edición, unas 40 dotaciones continuaban trabajando para apagar dos focos de incendio graves en La Calera y las Altas Cumbres. Según estimaciones oficiales, el fuego habría quemado unas 600 hectáreas de pastizales secos. En el operativo colaboraron dos aviones hidrantes y un helicóptero del Plan Nacional de Manejo del Fuego. Bomberos temen que un cambio de rumbo en el viento afecte zonas urbanas.
Unas 40 dotaciones de Bomberos combatían anoche dos focos de incendio graves en las localidades de La Calera y Altas Cumbres, donde personal del Plan Provincial de Manejo del Fuego temía que llegara a afectar la zona urbana.
En esa zona de las sierras cordobesas se registraba anoche la situación más grave.
Allí, 25 dotaciones de Bomberos con unos 150 hombres trabajaban en sofocar un frente de unos 4.000 metros.
“Tenemos información de que en las próximas horas cambiará el rumbo del viento sur, con lo que se encuentra verdaderamente en riesgo la zona urbana”, señaló el titular del Plan Provincial de Manejo del Fuego, Marcelo Colombatti.
Hasta el cierre de esta edición, no se habían registrado heridos graves ni evacuados.
En esa región, el fuego se inició en las zonas de pastizales y un bosque serrano, algo que se agrava con el paso de las horas y la influencia del viento.
En tanto, en La Calera, un frente mil metros de fuego se reavivó en la madrugada de ayer, lo que motivó que continúe cortada durante todo el la Ruta E- 55 que une la localidad con el paredón del dique San Roque.
En el lugar trabajaron durante la jornada 12 dotaciones de Bomberos con más de 80 hombres, 30 voluntarios del Ejército, dos aviones hidrantes y un helicóptero del Plan Nacional de Manejo del Fuego, con lo cual anoche ya estaba prácticamente controlado el foco.
“Hubo mucho viento y la topografía del lugar dificultó mucho acceder para extinguirlo. También fue muy difícil sobrevolar con el helicóptero y sólo se pudo acceder con mochilas de bombas de espalda.”, señaló el asesor de Seguridad Vial de la Provincia, Javier Sosa.
Al cierre de esta edición, la actividad del fuego continuaba sólo en unos 20 metros de frente, pero no se encontraba en riesgo la zona urbana.
Según señalaron desde el Ministerio de Gobierno, la mezcla de viento seco, humedad nula, falta de lluvias y la mano del hombre fueron los desencadenantes de los focos.
“En la mayoría de los casos estamos seguros que se trató de negligencia del hombre y no de la acción de la naturaleza. Si bien es muy pronto para determinar si se trató de una quema deliberada, estamos seguros que allí hay mano del hombre”, señaló Javier Sosa, asesor de Seguridad Vial del Ministerio de Gobierno de Córdoba.
Todos los hombres y mujeres que están trabajando en uno y otro frente son asistidos con comida y las provisiones necesarias para el desempeño de sus funciones.
Las llamas afectan sobre todo las pasturas, pero en algunos sectores incluso hay desmoronamientos de rocas. “Hemos tenido bomberos golpeados y por eso está cortada la Ruta E-55 en La Calera, por el riesgo potencial para los automovilistas”, dijeron.
En tanto, personal de Bomberos sofocó anoche otro foco en la zona rural cercana a Alta Gracia en el cruce con Alto Fierros, donde trabajaron unas cinco dotaciones en las inmediaciones del Aeroclub local.
En Santa Rosa de Calamuchita también se inició un foco de incendio, que anoche estaba controlado.
Epoca sensible
En ambos casos, personal del Plan Provincial de Manejo del Fuego se encuentra realizando guardia de cenizas en caso de que se reactive el fuego.
Desde la dependencia provincial recordaron que para esta época del año, “el índice de riesgo es alto por incendios. Estos no empiezan solos, sino que en el 95 por ciento de los casos está la mano del hombre y todos debemos colaborar para detenerlos”, explicó Sosa.
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Día a Día (13/07/2009)
Fuego sin control en las sierras
Anoche, había dos focos muy activos en las Altas Cumbres y en La Calera. El intenso viento y la sequía complicaban la tarea de los bomberos.
En la zona de las Altas Cumbres la acción de los bomberos se vio dificultada por el fuerte viento.
Más 250 bomberos de distintas dotaciones de la provincia combatían anoche cuerpo a cuerpo dos grandes incendios en las Altas Cumbres y la zona rural de La Calera. En diálogo con Día a Día, el director del Plan de Manejo del Fuego, Diego Colombatti, calificó a la situación como “muy grave” debido a los intensos vientos y la profunda sequía de la vegetación, factores que contribuían de manera decisiva en la propagación de ambos focos.
El mayor de los incendios, en las Altas Cumbres, tenía anoche un frente de cuatro mil metros. “Estamos preocupados. Se espera que a la madrugada rote el viento al sur, lo que podría poner en riesgo zonas urbanizadas en Las Jarillas y en cercanías a Icho Cruz”, señaló Colombatti. Para contener el avance del fuego en esas zonas, se habían dispuesto más de 20 autobombas.
Hasta que cayó la noche, también estuvieron trabajando tres aviones hidrantes y un helicóptero. “No creo que se trate de incendios intencionales. Está tan seco todo, que una sola colilla de cigarrillo es capaz de ocasionar estos tremendos incendios”, explicó Colombatti, quien pidió extremar las medidas de prevención contra incendios.
“En las Altas Cumbres, el fuego se reinició en las zonas de pastizales y en un bosque serrano, situación que se agrava con el paso de los días ya que, por ahora, no hay perspectivas de lluvia”, detalló el funcionario.
Ruta cortada. En La Calera, la zona afectada se ubica en la alta montaña, región de abundantes pasturas silvestres, pero alejada de centros poblados. En horas de la tarde, la ruta E-55 estuvo interrumpida desde el paredón del dique San Roque. “Hay mucho viento y la topografía del lugar dificulta mucho acceder hasta el fuego para extinguirlo”, decía ayer por la tarde el subdirector del Plan de Manejo del Fuego, Diego Concha.
Los responsables del Plan de Manejo del Fuego explicaron que la combinación de fuertes vientos y humo hizo muy difícil la tarea de los aviones hidrantes y que sólo pudo acceder con mochilas de bombas de espalda. Las llamas afectaron ayer a las pasturas secas, pero en algunos sectores incluso se registraron desmoronamientos de rocas.
“Hemos tenido bomberos golpeados y por eso está cortada la ruta por el riesgo potencial para los automovilistas”, dijo Concha, al tiempo que indicó que persistirá durante toda la semana el índice de riesgo alto por incendios.
Anoche, desde algunos sectores de Córdoba Capital, se advertía el triste espectáculo de la quema imparable en las laderas de las sierras chicas.
Según el funcionario, se registran en las sierras cordobesas unos 15 incendios por día. Para colmo, no hay expectativas de lluvias.
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