15 nov 2006
Incendios e imputaciones
2:43 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (15/11/2006)
Muchos incendios, pocas imputaciones
Río Tercero. En el ámbito de la décima circunscripción judicial, que abarca gran parte de los departamentos de Tercero Arriba y Calamuchita, hay varios casos de incendios forestales que se están investigando, pero casi la totalidad se trata de sucesos accidentales. Sólo un mínimo porcentaje, un 10 por ciento, corresponde a incendios intencionales.
"No hay incendios que queden impunes", graficó una fuente de las fiscalías que actúan en la región, a la vez que acotó que en realidad hay docenas de sumarios policiales que se producen cada fin de semana, por incendios pequeños en los cuales se deben labrar las actuaciones correspondientes y pero que no terminan convirtiéndose en causas judiciales.
Sobre la problemática, el fiscal Marcelo Ramognino explicó que en el último tiempo se han dado en esta jurisdicción judicial pasos muy importantes respecto a la unificación de información, que es tenida en cuenta luego para tomar decisiones desde las dos fiscalías.
Un ejemplo en cuanto a que era necesario unificar criterios, lo constituye un hecho registrado hace un tiempo no muy lejano, cuando se desataba un incendio en la zona serrana: un cuerpo de bomberos realizaba un croquis (a mano) pormenorizado sobre el lugar, mientras que otra división estaba contando con unas pruebas satelitales sobre los avances de los incendios. "Había falta de comunicación entre los operadores", opinó Ramognino. Hoy parecería que se avanza en ese sentido, en un intento de no desperdiciar esfuerzos y concentrar más la información, en procura de esclarecer estos casos.
Ramognino precisó que con la mayor comunicación se pudo concluir que los focos se inician en determinados días, horarios (mediodía), temperatura (elevada), velocidad de vientos (alta) y lugares con acceso relativamente rápido para los lugareños.
Una de las presunciones más relevantes es que en los incendios intencionales estaría involucrada gente con mucha información sobre la zona y que además conocería en detalle hasta las actividades programadas de la Policía o de los bomberos en la zona. Este último detalle no es menor ya que los presuntos responsables podrían saber en qué lugar están trabajando las dotaciones y en qué tiempo podrían acudir a los nuevos focos para poder sofocarlos. Y hasta se especula con que detrás de estas "malas intenciones" podría primar cierto interés económico.
La semana pasada se realizaron varios allanamientos y secuestros de elementos en la zona rural de las sierras. "Los hechos pararon. Me parece que los actores de estos (últimos) hechos (incendios en Calmayo y Soconcho) se dieron cuenta de que no podían actuar con impunidad", describió Ramognino. Los sospechosos de los últimos incendios registrados en esa zona serían de la misma región damnificada.
Es que tendrían información fresca y en forma permanente. Serían conocedores del territorio y estarían ya casi identificados. En ese sentido, una fuente judicial se quejó de que muchas veces el presunto responsable estaría casi individualizado, pero luego los testigos se echan atrás a la hora de dar su testimonio ante los despachos judiciales.
Los fiscales coinciden en rescatar que la única causa grande que llegó a concluirse fue en la que hubo dos muertes y por la que hay siete imputados.
Por otro lado, las divisiones departamentales de la Policía suman varios casos en estado de investigación, de consulta, en trámite, a la espera de pericias o bien las que luego de haber aglutinado un cúmulo importante de pruebas (pero no suficientes) se han archivado hasta tanto aparezcan nuevos elementos.
Reconocimiento
En este marco, tanto el fiscal Sergio Cabutto como su par Ramognino destacaron el trabajo altruista y profesional de los distintos cuerpos de bomberos de la región. Y mencionaron las distintas actividades que se están desarrollando últimamente, poniendo el acento en una mejor comunicación entre las distintas instituciones que intervienen: Policía, fiscalías, bomberos y vecinos del lugar. Hoy, el contacto con los cuerpos de bomberos es directo, según señalaron los fiscales.
Rescataron, además, el trabajo solidario por parte de los propios lugareños quienes intentan sofocar el fuego y hasta se suman a las guardias de cenizas que a veces duran más de dos días seguidos.
Ver Nota On Line (el link pudo haber cambiado)
Muchos incendios, pocas imputaciones
Río Tercero. En el ámbito de la décima circunscripción judicial, que abarca gran parte de los departamentos de Tercero Arriba y Calamuchita, hay varios casos de incendios forestales que se están investigando, pero casi la totalidad se trata de sucesos accidentales. Sólo un mínimo porcentaje, un 10 por ciento, corresponde a incendios intencionales.
"No hay incendios que queden impunes", graficó una fuente de las fiscalías que actúan en la región, a la vez que acotó que en realidad hay docenas de sumarios policiales que se producen cada fin de semana, por incendios pequeños en los cuales se deben labrar las actuaciones correspondientes y pero que no terminan convirtiéndose en causas judiciales.
Sobre la problemática, el fiscal Marcelo Ramognino explicó que en el último tiempo se han dado en esta jurisdicción judicial pasos muy importantes respecto a la unificación de información, que es tenida en cuenta luego para tomar decisiones desde las dos fiscalías.
Un ejemplo en cuanto a que era necesario unificar criterios, lo constituye un hecho registrado hace un tiempo no muy lejano, cuando se desataba un incendio en la zona serrana: un cuerpo de bomberos realizaba un croquis (a mano) pormenorizado sobre el lugar, mientras que otra división estaba contando con unas pruebas satelitales sobre los avances de los incendios. "Había falta de comunicación entre los operadores", opinó Ramognino. Hoy parecería que se avanza en ese sentido, en un intento de no desperdiciar esfuerzos y concentrar más la información, en procura de esclarecer estos casos.
Ramognino precisó que con la mayor comunicación se pudo concluir que los focos se inician en determinados días, horarios (mediodía), temperatura (elevada), velocidad de vientos (alta) y lugares con acceso relativamente rápido para los lugareños.
Una de las presunciones más relevantes es que en los incendios intencionales estaría involucrada gente con mucha información sobre la zona y que además conocería en detalle hasta las actividades programadas de la Policía o de los bomberos en la zona. Este último detalle no es menor ya que los presuntos responsables podrían saber en qué lugar están trabajando las dotaciones y en qué tiempo podrían acudir a los nuevos focos para poder sofocarlos. Y hasta se especula con que detrás de estas "malas intenciones" podría primar cierto interés económico.
La semana pasada se realizaron varios allanamientos y secuestros de elementos en la zona rural de las sierras. "Los hechos pararon. Me parece que los actores de estos (últimos) hechos (incendios en Calmayo y Soconcho) se dieron cuenta de que no podían actuar con impunidad", describió Ramognino. Los sospechosos de los últimos incendios registrados en esa zona serían de la misma región damnificada.
Es que tendrían información fresca y en forma permanente. Serían conocedores del territorio y estarían ya casi identificados. En ese sentido, una fuente judicial se quejó de que muchas veces el presunto responsable estaría casi individualizado, pero luego los testigos se echan atrás a la hora de dar su testimonio ante los despachos judiciales.
Los fiscales coinciden en rescatar que la única causa grande que llegó a concluirse fue en la que hubo dos muertes y por la que hay siete imputados.
Por otro lado, las divisiones departamentales de la Policía suman varios casos en estado de investigación, de consulta, en trámite, a la espera de pericias o bien las que luego de haber aglutinado un cúmulo importante de pruebas (pero no suficientes) se han archivado hasta tanto aparezcan nuevos elementos.
Reconocimiento
En este marco, tanto el fiscal Sergio Cabutto como su par Ramognino destacaron el trabajo altruista y profesional de los distintos cuerpos de bomberos de la región. Y mencionaron las distintas actividades que se están desarrollando últimamente, poniendo el acento en una mejor comunicación entre las distintas instituciones que intervienen: Policía, fiscalías, bomberos y vecinos del lugar. Hoy, el contacto con los cuerpos de bomberos es directo, según señalaron los fiscales.
Rescataron, además, el trabajo solidario por parte de los propios lugareños quienes intentan sofocar el fuego y hasta se suman a las guardias de cenizas que a veces duran más de dos días seguidos.
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