22 oct 2011
Crese en la mira de la UCR
10:20 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (22/10/2011)
Tamse y Crese: sombrío diagnóstico radical
Ratificaron que el déficit de ambas firmas está fuera de control y que no son viables sin cirugía mayor. Prevén que hasta marzo el municipio deberá girarles a ambas unos 256 millones para que puedan funcionar.
Asesores económicos del intendente electo de Córdoba, Ramón Mestre (UCR), trazaron un oscuro panorama sobre las empresas Tamse y Crese y advirtieron que hasta marzo próximo la Municipalidad deberá desembolsar por lo menos 256 millones de pesos para cubrir las necesidades financieras de ambas, cuyo estado general definieron como deficitario por donde se lo mire.
El informe corrió por cuenta de Luis Ellese y Alberto Castagno, a quienes semanas atrás Mestre puso justamente a escudriñar los números de Tamse y Crese. También avaló esos informes el actual concejal y viceintendente electo, Marcelo Cossar.
Los técnicos de la UCR ratificaron en todo momento que, tal como están, las empresas son inviables si no se corrigen los problemas estructurales que afrontan. No obstante, no adelantaron cómo harán desde diciembre para revertir esa situación.
En el caso de Tamse, Ellese detalló que en lo que va del año recibió subsidios municipales por 65,5 millones de pesos, con proyección de llegar a 98 millones en el cierre del ejercicio. También apuntó una cifra similar como pasivo de la empresa: unos 96 millones de pesos, de los cuales 33 millones corresponderían a deuda previsional y otros 18 millones a cheques de pago diferido. Se insistió en que ambos ítems representan deuda exigible.
Ellese precisó que debido a la baja estacional en los ingresos que habitualmente registra el transporte hasta marzo, cuando se retoma la actividad general pos vacaciones, Tamse requerirá auxilio municipal por unos 50 millones de pesos.
En el mismo período habría que agregar, según cálculos del mestrismo, unos 206 millones de pesos para cubrir los gastos de Crese. Y si se toma la proyección de sólo esta última empresa hasta abril próximo, los aportes municipales treparían a 301 millones de pesos.
A la ya conocida demanda constante de subsidios por parte de Tamse, Ellese le adicionó un par de datos relevantes a la hora de enfocar las políticas que tendrá Mestre al respecto:
Sumó la novedad de que la empresa afronta unos 1.100 juicios, por un monto de demanda aproximado a los 200 millones de pesos.
“Esto puede deberse a desorganización, descontrol o desmanejo, pero lo cierto es que se transforma en una variable a repensar en el diagnóstico sobre el futuro de la empresa”, evaluó.
Achicó las expectativas respecto a que para encauzar la empresa alcanzaría con una mejor gestión administrativa. Dijo que el gasto actual en personal consume el 75 por ciento de los ingresos, con lo cual, no resultaría suficiente optimizar sólo los demás ítems del gasto general.
Aunque no ahondó en detalles, Ellese dejó sentado con claridad que necesariamente la principal variable a revisar será el personal y su impacto en la planilla de erogaciones.
Por último, expresó lo que a su criterio es una paradoja que refleja el incierto futuro de Tamse. “Sus ingresos son más altos que la inflación, pero lo mismo pasa con los gastos, de modo que el resultado sigue siendo negativo. Mientras más actividad tiene Tamse, más pierde. Suena absurdo, pero le convendría no crecer”, graficó.
Limpieza onerosa. Por el lado de Crese, el diagnóstico radical fue igual de oscuro. Con números provistos por la empresa, Castagno señaló que el costo mensual del servicio no es de 24 millones de pesos, sino de 35 millones de pesos. “A esa cifra –acotó Ellese– habría que agregarle el IVA, que Crese unilateralmente dejó de pagar, con lo cual el costo mensual se iría a 41 millones de pesos”.
Castagno detalló que para diciembre, cuando se concrete el cambio de gobierno, Crese necesitará que Giacomino le gire 128 millones de pesos: 88 millones por el pago de servicios y otros 40 millones para cubrir deuda previsional. Asimismo, proyectó que ya con Mestre en el poder, hasta fines de marzo habrá que desembolsar otros 173 millones de pesos.
El técnico mestrista reiteró su evaluación preliminar, anticipada días atrás por este diario, respecto de que Crese se complica al tener un solo cliente, que encima no le asegura un flujo de fondos estable. “La empresa paga intereses para proveerse y termina comprando con sobreprecios”, graficó.
También cuestionó un desfasaje de prioridades en el gasto, al señalar que la mitad de la flota de la firma es propia, con un altísimo porcentaje de modelos 2010 y 2011, lo que va a contramano –a su criterio– con la pésima situación contable. “No es lógico que se alquilen 12 camionetas para inspección a 13.800 pesos cada una, mientras se dejan de pagar aportes a la Anses”, remarcó.
Expeditivos y anónimos
Luis Ellese y Alberto Castagno destacaron la predisposición que mostraron los directivos de Crese y Tamse para ofrecerles información, aunque dijeron desconocer el grado de veracidad de los datos obtenidos. Castagno mencionó que a las planillas de Crese
las recibió “en mano, pero sin ninguna firma responsable”.
La lupa sobre las dos empresas municipales
Subsidios. Al 18 de agosto pasado las transferencias sumaban 65,5 millones de pesos y la proyección marca que llegarían a 98 millones a fin de año. Hasta marzo y debido a la merma estacional en el corte de boletos, Tamse necesitaría asistencia financiera del municipio
por unos 50 millones de pesos.
Pasivo. La UCR lo estimó en 96 millones de pesos, con dos rubros exigibles: 33 millones de pesos por deuda
previsional y otros 18 millones por la emisión de cheques de pago diferido.
Personal. Es el Talón de Aquiles, que representa el 75 por ciento del gasto. Para el mestrismo, no hay forma de revertir la performance de la empresa sin corregir ese desfasaje.
Juicios. Serían más de 1.100, por un monto global estimado de casi 200 millones de pesos.
Demanda financiera. La UCR trazó una proyección de los fondos municipales que necesitará Crese para funcionar hasta mayo próximo inclusive, y arribó a la cifra de 301 millones de pesos. El desagregado marca: 88 millones hasta fin de año y 40 millones por deudas con el Anses. Y para 2012: enero (41 millones), febrero (37 millones), marzo (33 millones), abril (32 millones), mayo (30 millones).
Canon. El costo mensual real del servicio asciende, según el mestrismo, a 35 millones de pesos, a lo que habría que agregar el IVA que hoy la firma no estaría pagando. Así, el costo definitivo rondaría los 41 millones de pesos al mes.
Vehículos. La mitad de la flota es propia y con altísima proporción de modelos 2010 y 2011. Para la UCR, eso es
un despropósito tratándose de una empresa quebrada, que ni siquiera honra los aportes previsionales de sus
empleados.
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Hoy Día - Edición Electrónica (22/10/2011)
- Para UCR la situación de Tamse y Crese es "preocupante"
Tamse y Crese: sombrío diagnóstico radical
Ratificaron que el déficit de ambas firmas está fuera de control y que no son viables sin cirugía mayor. Prevén que hasta marzo el municipio deberá girarles a ambas unos 256 millones para que puedan funcionar.
Asesores económicos del intendente electo de Córdoba, Ramón Mestre (UCR), trazaron un oscuro panorama sobre las empresas Tamse y Crese y advirtieron que hasta marzo próximo la Municipalidad deberá desembolsar por lo menos 256 millones de pesos para cubrir las necesidades financieras de ambas, cuyo estado general definieron como deficitario por donde se lo mire.
El informe corrió por cuenta de Luis Ellese y Alberto Castagno, a quienes semanas atrás Mestre puso justamente a escudriñar los números de Tamse y Crese. También avaló esos informes el actual concejal y viceintendente electo, Marcelo Cossar.
Los técnicos de la UCR ratificaron en todo momento que, tal como están, las empresas son inviables si no se corrigen los problemas estructurales que afrontan. No obstante, no adelantaron cómo harán desde diciembre para revertir esa situación.
En el caso de Tamse, Ellese detalló que en lo que va del año recibió subsidios municipales por 65,5 millones de pesos, con proyección de llegar a 98 millones en el cierre del ejercicio. También apuntó una cifra similar como pasivo de la empresa: unos 96 millones de pesos, de los cuales 33 millones corresponderían a deuda previsional y otros 18 millones a cheques de pago diferido. Se insistió en que ambos ítems representan deuda exigible.
Ellese precisó que debido a la baja estacional en los ingresos que habitualmente registra el transporte hasta marzo, cuando se retoma la actividad general pos vacaciones, Tamse requerirá auxilio municipal por unos 50 millones de pesos.
En el mismo período habría que agregar, según cálculos del mestrismo, unos 206 millones de pesos para cubrir los gastos de Crese. Y si se toma la proyección de sólo esta última empresa hasta abril próximo, los aportes municipales treparían a 301 millones de pesos.
A la ya conocida demanda constante de subsidios por parte de Tamse, Ellese le adicionó un par de datos relevantes a la hora de enfocar las políticas que tendrá Mestre al respecto:
Sumó la novedad de que la empresa afronta unos 1.100 juicios, por un monto de demanda aproximado a los 200 millones de pesos.
“Esto puede deberse a desorganización, descontrol o desmanejo, pero lo cierto es que se transforma en una variable a repensar en el diagnóstico sobre el futuro de la empresa”, evaluó.
Achicó las expectativas respecto a que para encauzar la empresa alcanzaría con una mejor gestión administrativa. Dijo que el gasto actual en personal consume el 75 por ciento de los ingresos, con lo cual, no resultaría suficiente optimizar sólo los demás ítems del gasto general.
Aunque no ahondó en detalles, Ellese dejó sentado con claridad que necesariamente la principal variable a revisar será el personal y su impacto en la planilla de erogaciones.
Por último, expresó lo que a su criterio es una paradoja que refleja el incierto futuro de Tamse. “Sus ingresos son más altos que la inflación, pero lo mismo pasa con los gastos, de modo que el resultado sigue siendo negativo. Mientras más actividad tiene Tamse, más pierde. Suena absurdo, pero le convendría no crecer”, graficó.
Limpieza onerosa. Por el lado de Crese, el diagnóstico radical fue igual de oscuro. Con números provistos por la empresa, Castagno señaló que el costo mensual del servicio no es de 24 millones de pesos, sino de 35 millones de pesos. “A esa cifra –acotó Ellese– habría que agregarle el IVA, que Crese unilateralmente dejó de pagar, con lo cual el costo mensual se iría a 41 millones de pesos”.
Castagno detalló que para diciembre, cuando se concrete el cambio de gobierno, Crese necesitará que Giacomino le gire 128 millones de pesos: 88 millones por el pago de servicios y otros 40 millones para cubrir deuda previsional. Asimismo, proyectó que ya con Mestre en el poder, hasta fines de marzo habrá que desembolsar otros 173 millones de pesos.
El técnico mestrista reiteró su evaluación preliminar, anticipada días atrás por este diario, respecto de que Crese se complica al tener un solo cliente, que encima no le asegura un flujo de fondos estable. “La empresa paga intereses para proveerse y termina comprando con sobreprecios”, graficó.
También cuestionó un desfasaje de prioridades en el gasto, al señalar que la mitad de la flota de la firma es propia, con un altísimo porcentaje de modelos 2010 y 2011, lo que va a contramano –a su criterio– con la pésima situación contable. “No es lógico que se alquilen 12 camionetas para inspección a 13.800 pesos cada una, mientras se dejan de pagar aportes a la Anses”, remarcó.
Expeditivos y anónimos
Luis Ellese y Alberto Castagno destacaron la predisposición que mostraron los directivos de Crese y Tamse para ofrecerles información, aunque dijeron desconocer el grado de veracidad de los datos obtenidos. Castagno mencionó que a las planillas de Crese
las recibió “en mano, pero sin ninguna firma responsable”.
La lupa sobre las dos empresas municipales
Subsidios. Al 18 de agosto pasado las transferencias sumaban 65,5 millones de pesos y la proyección marca que llegarían a 98 millones a fin de año. Hasta marzo y debido a la merma estacional en el corte de boletos, Tamse necesitaría asistencia financiera del municipio
por unos 50 millones de pesos.
Pasivo. La UCR lo estimó en 96 millones de pesos, con dos rubros exigibles: 33 millones de pesos por deuda
previsional y otros 18 millones por la emisión de cheques de pago diferido.
Personal. Es el Talón de Aquiles, que representa el 75 por ciento del gasto. Para el mestrismo, no hay forma de revertir la performance de la empresa sin corregir ese desfasaje.
Juicios. Serían más de 1.100, por un monto global estimado de casi 200 millones de pesos.
Demanda financiera. La UCR trazó una proyección de los fondos municipales que necesitará Crese para funcionar hasta mayo próximo inclusive, y arribó a la cifra de 301 millones de pesos. El desagregado marca: 88 millones hasta fin de año y 40 millones por deudas con el Anses. Y para 2012: enero (41 millones), febrero (37 millones), marzo (33 millones), abril (32 millones), mayo (30 millones).
Canon. El costo mensual real del servicio asciende, según el mestrismo, a 35 millones de pesos, a lo que habría que agregar el IVA que hoy la firma no estaría pagando. Así, el costo definitivo rondaría los 41 millones de pesos al mes.
Vehículos. La mitad de la flota es propia y con altísima proporción de modelos 2010 y 2011. Para la UCR, eso es
un despropósito tratándose de una empresa quebrada, que ni siquiera honra los aportes previsionales de sus
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