15 oct 2011

Todo se transforma en el cole Cura Brochero

Día a Día (15/10/2011)
Todo se transforma en el cole Cura Brochero



Los alumnos utilizan bolsas plásticas para hacer artesanías. El proyecto tiene tres años e incluye a los padres de los chicos y al barrio.
Reutilizar. Esa es la premisa que atraviesa la currícula de la escuela Cura Brochero, en barrio Residencial América, para la enseñanza de los alumnos. Pero ellos tampoco se olvidan de reducir y reciclar. Es un cole modelo en la zona, que tiene vocación educativa más allá de las paredes que conforman la institución y que desde hace ya varios años esparce la semilla de la conciencia ambiental en el barrio.
La especialidad del Brochero es juntar bolsas plásticas para sacarlas de circuito tradicional de la basura para evitar que lleguen a depósitos a cielo abierto y utilizarlas como la materia prima para elaborar productos muy útiles en cualquier casa: una cortina para el baño, una bolsa resistente para ir a hacer las compras, bolsos, carteras, carpetas decorativas para mesas, todo lo que la imaginación y la habilidad permita crear con aquello que estamos acostumbrados a desechar.
El contexto de la escuela es muy particular. La mayoría de los chicos que asisten a la institución vivían en el asentamiento Domingo Savio, donde había un basural a cielo abierto.
“Es por esto que desde siempre trabajamos el tema del reciclado con nuestro alumnos. A finales del año pasado se erradicó el asentamiento y se hicieron casas. Siempre apuntamos a la separación de residuos, con los chicos y los padres, y tuvimos buena respuesta”, cuenta la dire del cole, María Isabel Pioletti.
El proyecto del trabajo con bolsas plásticas se inició en 2009. “Nuestra escuela tiene una fuerte vocación ambiental. Tenemos nuestra huerta, que tiene el apoyo del Inta, un invernadero donde hacemos plantas y también pintamos murales con consejos para cuidar el agua y la energía”, asegura María.
Los chicos de todos los grados trabajan dos horas por semana con las bolsas, incluso en la jornada extendida. Esta actividad tiene dos especialidades bien marcadas: están los que cortan las bolsas en tiras, hacen ovillos y después tejen, y están los planchadores, que se encargan de las bolsas más grandes para hacer, por ejemplo, cortinas, uniéndolas con calor y estampándoles diferentes decorados.
Por lo general, son los más chicos los que se encargan de tejer. La técnica es artesanal y todos los alumnos del colegio están involucrados en el proceso. Las seños están siempre con los niños, ayudándolos o dándoles consejos.
Una de las particularidades del proyecto es que no es cerrado sólo para los alumnos. La idea de la institución es compartir el conocimiento con comunidad de la escuela, por eso las docentes dan talleres de tejido con bolsas a las abuelas y las madres de los alumnos.
Además, involucran al barrio en la iniciativa y varios almacenes y vecinos donan sus bolsas. La dire está muy orgullosa de sus alumnos por la dedicación, la constancia y el cariño que le ponen a su trabajo, lo que le valió muchos reconocimientos a la escuela.

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