24 feb 2010
El nuevo enterramiento, aún sin autorización
9:04 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (24/02/2010)
El nuevo enterramiento, aún sin autorización
La empresa Crese debe presentar la documentación y estudios ambientales necesarios antes del 12 de marzo / La Provincia y el municipio no se ponen de acuerdo sobre quién debe autorizar su funcionamiento / El 1º de abril comenzará a recibir la basura.
El predio elegido para recibir por 10 meses la basura que se produce en la ciudad de Córdoba y en otras 17 localidades todavía no cuenta con autorización para operar. Ese trámite deberá estar completo antes del 1º de abril, fecha en la que comenzará a funcionar.
Tampoco está claro quién debe autorizar el funcionamiento del predio, ubicado en el extremo sur de la ciudad, a la vera de la ruta nacional 36: si es la Provincia o la Municipalidad de Córdoba.
La que debe cumplimentar con todos los requisitos es la empresa municipal Crese, que operará el enterramiento durante 10 meses.
Por ahora, la empresa cuenta con una autorización provisoria que le otorgó la Comisión de Ambiente de la Municipalidad, por la que se le permite comenzar con las obras necesarias para preparar el terreno.
El próximo 8 de marzo, Crese colocará la membrana geotextil que impermeabilizará la primera fosa, de 200 metros de largo por 80 metros de ancho y una profundidad de 10 metros.
Esa misma semana, la empresa municipal también deberá tener listo toda la documentación necesaria para la autorización definitiva.
En este punto aparece un problema: mientras la Secretaría de Ambiente de la Provincia sostiene que son los encargados de otorgar esa autorización, en el municipio consideran que esa potestad está delegada.
“Acá se presentan proyectos de toda la provincia, incluso de jurisdicciones municipales”, indicó Juan Quaglia, subdirector de Residuos Sólidos Urbanos de la Provincia.
Quaglia agregó que, dadas las condiciones del enterramiento, se deberá presentar un estudio de impacto ambiental. Luego, una comisión técnica interdisciplinaria evalúa el estudio, y decide si autoriza o no el relleno.
Sin embargo, Fernando Cámara, secretario de Ambiente municipal, dijo que es el Gobierno de la ciudad quien da las autorizaciones para el funcionamiento del relleno.
En ese sentido, la Municipalidad ya solicitó a Crese que presente el aviso de proyecto, en lugar del impacto ambiental. Cámara explicó que dado el tiempo que funcionará el relleno (en principio, 10 meses) no es necesario el impacto ambiental.
El funcionario aclaró que en el aviso de proyecto están básicamente los mismos elementos del impacto ambiental, como la mitigación sobre los efectos adversos que pueda producir el enterramiento sanitario en el ambiente.
Una comisión compuesta por las diferentes direcciones de la Municipalidad expide el dictamen por el cual se autoriza el relleno.
Cámara remarcó que toda la documentación será girada a Ambiente de la Provincia para que tenga participación en el proceso.
A contrarreloj. En Crese están trabajando para llegar al 1º de abril con el nuevo predio apto para funcionar. El presidente de la empresa, Eduardo García, informó que se pedirá al directorio la autorización de contratar de manera directa al encargado de realizar el aviso de proyecto.
En ese sentido, García destacó que ya se están solicitando presupuestos para realizar los estudios. El elegido puede ser un organismo público o privado, y será definido la semana próxima.
García remarcó que se podrá cumplir con las obras y trámites necesarios para que el 1º de abril ya esté funcionando correctamente el enterramiento.
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Yo produzco, tú produces, todos producimos basura
Cada vecino produce casi 40 kilos de basura por mes. Hasta abril, eso termina en Bouwer. Después, quedará dentro de la ciudad de Córdoba.
Y son casi 40 kilogramos por persona, por mes, sólo en la ciudad de Córdoba. Es un promedio, algunos vecinos producen más, y otros menos. Son 50 mil toneladas al mes, 650 mil al año.
La cuestión es qué se hace con esa basura, adónde se debe destinar, de qué manera se puede tratar. La clausura del enterramiento de Bouwer marca un hecho importantísimo: después de unos 30 años, la basura que producen todos los vecinos de la Capital quedará dentro de su ejido municipal.
Desde abril, todo lo que se pone en la bolsa que luego recoge el camión naranja de Crese quedará muy cerca, a sólo 11 kilómetros en línea recta desde la plaza San Martín.
El sitio elegido justamente funcionó por casi una década como el destino final de la basura cordobesa, hasta que se habilitó el predio de Bouwer.
Antes de tirarse en ese lugar, los residuos se quemaban en dos hornos: uno instalado en barrio Observatorio y otro en Villa Belgrano. Y mucho antes, se tiraba directamente a las márgenes del río Suquía.
Las quejas de los vecinos son entendibles: nadie quiere un enterramiento sanitario cerca de su casa, pero tampoco se puede dejar de generar desechos. Entonces se debería participar en un debate que debe dejar afuera todo lo irracional y centrarse en lo que es realmente importante.
Por ejemplo, conocer qué tan lejos debe estar un enterramiento sanitario de un lugar poblado; saber qué procesos se deben cumplir para que se mitiguen los efectos que la actividad tiene sobre el medio ambiente y exigir que se cumplan; solicitar que se debata, participar y hasta formar parte de los organismos de control.
También se debe discutir la postura que tienen los ciudadanos respecto de la basura; conocer de qué manera se puede reducir, a través del compostaje, la cantidad de residuos que van a parar a la bolsa o cumplir con la separación de materiales en los barrios donde funciona la recolección diferenciada.
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Suman más barrios a la recolección diferenciada
En la segunda quincena de marzo se sumarán más barrios al sistema de recolección diferenciada de la ciudad de Córdoba.
Se trata de barrios de la zona sur, ubicados principalmente en la franja comprendida por la Ciudad Universitaria y la avenida de Circunvalación.
En la actualidad, el sistema está en marcha, desde julio del año pasado, en los barrios Ayacucho, Cofico, Alta Córdoba, Independencia, Patria, General Paz y Juniors.
Los nuevos barrios serán: Jardín, San Fernando, Iponá, Crisol, Villa Revol, Jardín Espinosa, Nueva Córdoba, Tejas del Sur, Ejército Argentino, Los Ceibos, Observatorio, Sarmiento, Maipú, Colón y Rogelio Martínez.
En las zonas en que funciona, un camión recoge una vez por semana los residuos “secos”, es decir la basura inorgánica.
Esos desechos se llevan a la base Mitre, en frente del puente 24 de Septiembre, donde miembros de una cooperativa de cartoneros seleccionan materiales como papel, plástico, vidrio y hojalata.
Esos materiales se venden a empresas que luego los reutilizan.
Por mes, ingresan a la base Mitre unas 200 toneladas de materiales recuperables. Su comercialización produce ingresos cercanos a los 25 mil pesos mensuales, que son repartidos entre los trabajadores.
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El nuevo enterramiento, aún sin autorización
La empresa Crese debe presentar la documentación y estudios ambientales necesarios antes del 12 de marzo / La Provincia y el municipio no se ponen de acuerdo sobre quién debe autorizar su funcionamiento / El 1º de abril comenzará a recibir la basura.
El predio elegido para recibir por 10 meses la basura que se produce en la ciudad de Córdoba y en otras 17 localidades todavía no cuenta con autorización para operar. Ese trámite deberá estar completo antes del 1º de abril, fecha en la que comenzará a funcionar.
Tampoco está claro quién debe autorizar el funcionamiento del predio, ubicado en el extremo sur de la ciudad, a la vera de la ruta nacional 36: si es la Provincia o la Municipalidad de Córdoba.
La que debe cumplimentar con todos los requisitos es la empresa municipal Crese, que operará el enterramiento durante 10 meses.
Por ahora, la empresa cuenta con una autorización provisoria que le otorgó la Comisión de Ambiente de la Municipalidad, por la que se le permite comenzar con las obras necesarias para preparar el terreno.
El próximo 8 de marzo, Crese colocará la membrana geotextil que impermeabilizará la primera fosa, de 200 metros de largo por 80 metros de ancho y una profundidad de 10 metros.
Esa misma semana, la empresa municipal también deberá tener listo toda la documentación necesaria para la autorización definitiva.
En este punto aparece un problema: mientras la Secretaría de Ambiente de la Provincia sostiene que son los encargados de otorgar esa autorización, en el municipio consideran que esa potestad está delegada.
“Acá se presentan proyectos de toda la provincia, incluso de jurisdicciones municipales”, indicó Juan Quaglia, subdirector de Residuos Sólidos Urbanos de la Provincia.
Quaglia agregó que, dadas las condiciones del enterramiento, se deberá presentar un estudio de impacto ambiental. Luego, una comisión técnica interdisciplinaria evalúa el estudio, y decide si autoriza o no el relleno.
Sin embargo, Fernando Cámara, secretario de Ambiente municipal, dijo que es el Gobierno de la ciudad quien da las autorizaciones para el funcionamiento del relleno.
En ese sentido, la Municipalidad ya solicitó a Crese que presente el aviso de proyecto, en lugar del impacto ambiental. Cámara explicó que dado el tiempo que funcionará el relleno (en principio, 10 meses) no es necesario el impacto ambiental.
El funcionario aclaró que en el aviso de proyecto están básicamente los mismos elementos del impacto ambiental, como la mitigación sobre los efectos adversos que pueda producir el enterramiento sanitario en el ambiente.
Una comisión compuesta por las diferentes direcciones de la Municipalidad expide el dictamen por el cual se autoriza el relleno.
Cámara remarcó que toda la documentación será girada a Ambiente de la Provincia para que tenga participación en el proceso.
A contrarreloj. En Crese están trabajando para llegar al 1º de abril con el nuevo predio apto para funcionar. El presidente de la empresa, Eduardo García, informó que se pedirá al directorio la autorización de contratar de manera directa al encargado de realizar el aviso de proyecto.
En ese sentido, García destacó que ya se están solicitando presupuestos para realizar los estudios. El elegido puede ser un organismo público o privado, y será definido la semana próxima.
García remarcó que se podrá cumplir con las obras y trámites necesarios para que el 1º de abril ya esté funcionando correctamente el enterramiento.
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Yo produzco, tú produces, todos producimos basura
Cada vecino produce casi 40 kilos de basura por mes. Hasta abril, eso termina en Bouwer. Después, quedará dentro de la ciudad de Córdoba.
Y son casi 40 kilogramos por persona, por mes, sólo en la ciudad de Córdoba. Es un promedio, algunos vecinos producen más, y otros menos. Son 50 mil toneladas al mes, 650 mil al año.
La cuestión es qué se hace con esa basura, adónde se debe destinar, de qué manera se puede tratar. La clausura del enterramiento de Bouwer marca un hecho importantísimo: después de unos 30 años, la basura que producen todos los vecinos de la Capital quedará dentro de su ejido municipal.
Desde abril, todo lo que se pone en la bolsa que luego recoge el camión naranja de Crese quedará muy cerca, a sólo 11 kilómetros en línea recta desde la plaza San Martín.
El sitio elegido justamente funcionó por casi una década como el destino final de la basura cordobesa, hasta que se habilitó el predio de Bouwer.
Antes de tirarse en ese lugar, los residuos se quemaban en dos hornos: uno instalado en barrio Observatorio y otro en Villa Belgrano. Y mucho antes, se tiraba directamente a las márgenes del río Suquía.
Las quejas de los vecinos son entendibles: nadie quiere un enterramiento sanitario cerca de su casa, pero tampoco se puede dejar de generar desechos. Entonces se debería participar en un debate que debe dejar afuera todo lo irracional y centrarse en lo que es realmente importante.
Por ejemplo, conocer qué tan lejos debe estar un enterramiento sanitario de un lugar poblado; saber qué procesos se deben cumplir para que se mitiguen los efectos que la actividad tiene sobre el medio ambiente y exigir que se cumplan; solicitar que se debata, participar y hasta formar parte de los organismos de control.
También se debe discutir la postura que tienen los ciudadanos respecto de la basura; conocer de qué manera se puede reducir, a través del compostaje, la cantidad de residuos que van a parar a la bolsa o cumplir con la separación de materiales en los barrios donde funciona la recolección diferenciada.
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Suman más barrios a la recolección diferenciada
En la segunda quincena de marzo se sumarán más barrios al sistema de recolección diferenciada de la ciudad de Córdoba.
Se trata de barrios de la zona sur, ubicados principalmente en la franja comprendida por la Ciudad Universitaria y la avenida de Circunvalación.
En la actualidad, el sistema está en marcha, desde julio del año pasado, en los barrios Ayacucho, Cofico, Alta Córdoba, Independencia, Patria, General Paz y Juniors.
Los nuevos barrios serán: Jardín, San Fernando, Iponá, Crisol, Villa Revol, Jardín Espinosa, Nueva Córdoba, Tejas del Sur, Ejército Argentino, Los Ceibos, Observatorio, Sarmiento, Maipú, Colón y Rogelio Martínez.
En las zonas en que funciona, un camión recoge una vez por semana los residuos “secos”, es decir la basura inorgánica.
Esos desechos se llevan a la base Mitre, en frente del puente 24 de Septiembre, donde miembros de una cooperativa de cartoneros seleccionan materiales como papel, plástico, vidrio y hojalata.
Esos materiales se venden a empresas que luego los reutilizan.
Por mes, ingresan a la base Mitre unas 200 toneladas de materiales recuperables. Su comercialización produce ingresos cercanos a los 25 mil pesos mensuales, que son repartidos entre los trabajadores.
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