14 dic 2009
Demuestran los daños por plaguicidas
3:20 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Río Cuarto (14/12/2009)
Demuestran los daños que sufren las personas expuestas a plaguicidas
Aplicaron un conjunto de técnicas destinadas a evaluar el efecto tóxico sobre el material genético de poblaciones sometidas a estos contaminantes y encontraron lesiones en los cromosomas y el ADN
Investigadores universitarios detectaron alteraciones en los cromosomas, y aumento de micronúcleos y de la cantidad de fragmentos en el ADN, como consecuencia del daño en el material hereditario de quienes manipulan plaguicidas de uso agropuecuario.
El estudio se titula “Biomonitoreo genotóxico de poblaciones humanas y animales silvestres de la Provincia de Córdoba, expuestas a plaguicidas” y entre las conductas de riesgo puntualiza la manipulación de plaguicidas sin medidas de protección (guantes, máscaras, botas, mamelucos), el lavado de la ropa de trabajo con la del resto de la familia, la falta de realización del triple lavado de bidones, la reutilización de los envases, el incumplimiento con los tiempos de retirada (espera desde la aplicación hasta que el alimento pueda ir a consumo humano) y las fumigaciones aéreas en zonas no permitidas.
Delia Aiassa, doctora en Ciencias Biológicas, que se dedica a la genética humana desde hace once años, es la directora de esta investigación, que lleva adelante un grupo de trabajo multidisciplinario del que participan biólogos, veterinarios, abogados y microbiólogos. Y señaló: “El efecto crónico suele ser acumulativo y reflejarse en daño a diversos órganos y sistemas, causando enfermedades en el mediano o largo plazo, en períodos más tardíos de la vida o en la descendencia de los sujetos expuestos.
Los efectos que mejor se conocen son los teratogénicos, mutagénicos y carcinógenos”.
En este marco, justificó: “Es prioritario estudiar el efecto tóxico sobre el material hereditario de todas las sustancias que son liberadas al ambiente, con el fin de cuidar la salud de las poblaciones humanas y del ecosistema. Los efectos biológicos de sustancias tóxicas, como los plaguicidas, se detectan empleando biomarcadores (técnicas de evaluación de daño a nivel de los cromosomas y el ADN) en la sangre de las personas expuestas”. Y agregó: “Para lograr una dimensión más real del impacto ambiental de los plaguicidas, además del estudio de las poblaciones humanas, es necesario poner énfasis en el efecto que pueden provocar sobre especies silvestres vulnerables de las localidades rurales”.
Los investigadores hicieron evaluaciones de genotoxicidad en sangre de personas expuestas a plaguicidas. Se les tomó una muestra de sangre de 5 ml para cultivarla in vitro.
Y, a partir de ahí, estudiaron las aberraciones cromosómicas y evaluaron las rupturas a nivel de los cromosomas y en las cadenas de ADN.
Los resultados obtenidos muestran que el número promedio de aberraciones cromosómicas en el grupo de personas expuestas es de 11,50 por cada 100 células analizadas, mientras que los valores de referencia son de 5,25 por cada 100 células analizadas. Para micronúcleos: 17 por cada 1.000 células analizadas en el grupo expuesto y 7,62 para el grupo de referencia. Y el daño al ADN (cometa), 3.820 unidades arbitrarias para el grupo expuesto y 317,9 para el grupo de referencia.
Además, implementaron encuestas domiciliarias atendiendo las necesidades planteadas en las reuniones con las autoridades de cada localidad, hicieron talleres para articular el saber técnico con el popular y elaboraron materiales educativos.
“En todos los individuos expuestos se observó un aumento en el número de rupturas de cromosomas, micronúcleos y cometas estadísticamente significativo con relación al grupo de referencia -personas no expuestas-”, indican en sus conclusiones. Y agregan: “Los cuestionarios domiciliarios demostraron que existen conductas de riesgo referidas a la utilización de plaguicidas en el ámbito doméstico rural y urbano, y desconocimiento de la legislación vigente en materia de agroquímicos. Estos resultados corroboraron la presunción previa acerca de la necesidad de la educación preventiva de la población en relación a esta problemática”.
“En los talleres participaron estudiantes, docentes, trabajadores rurales e integrantes de sus familias. Las temáticas desarrolladas se consensuaron con las autoridades que solicitaron la realización de estrategias de intervención sobre la problemática de los agroquímicos. La participación de todas las personas, tanto adultos como niños y adolescentes, fue muy activa, demostrando una verdadera preocupación”.
-¿Qué es un biomonitoreo de genotoxicidad?
-Un conjunto de técnicas destinadas a evaluar el efecto tóxico sobre el material genético de poblaciones expuestas a diversos contaminantes ambientales.
-Usted habla de todas las sustancias que son liberadas al ambiente. ¿Cuáles son?
-Desechos industriales, metales pesados provenientes de la minería, metalurgia; residuos domiciliarios o agropecuarios. En el proyecto que llevamos adelante nos dedicamos particularmente a plaguicidas de uso agropecuario y se prevé la incorporación del estudio del efecto sobre la salud humana del consumo crónico de medicamentos.
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Demuestran los daños que sufren las personas expuestas a plaguicidas
Aplicaron un conjunto de técnicas destinadas a evaluar el efecto tóxico sobre el material genético de poblaciones sometidas a estos contaminantes y encontraron lesiones en los cromosomas y el ADN
Investigadores universitarios detectaron alteraciones en los cromosomas, y aumento de micronúcleos y de la cantidad de fragmentos en el ADN, como consecuencia del daño en el material hereditario de quienes manipulan plaguicidas de uso agropuecuario.
El estudio se titula “Biomonitoreo genotóxico de poblaciones humanas y animales silvestres de la Provincia de Córdoba, expuestas a plaguicidas” y entre las conductas de riesgo puntualiza la manipulación de plaguicidas sin medidas de protección (guantes, máscaras, botas, mamelucos), el lavado de la ropa de trabajo con la del resto de la familia, la falta de realización del triple lavado de bidones, la reutilización de los envases, el incumplimiento con los tiempos de retirada (espera desde la aplicación hasta que el alimento pueda ir a consumo humano) y las fumigaciones aéreas en zonas no permitidas.
Delia Aiassa, doctora en Ciencias Biológicas, que se dedica a la genética humana desde hace once años, es la directora de esta investigación, que lleva adelante un grupo de trabajo multidisciplinario del que participan biólogos, veterinarios, abogados y microbiólogos. Y señaló: “El efecto crónico suele ser acumulativo y reflejarse en daño a diversos órganos y sistemas, causando enfermedades en el mediano o largo plazo, en períodos más tardíos de la vida o en la descendencia de los sujetos expuestos.
Los efectos que mejor se conocen son los teratogénicos, mutagénicos y carcinógenos”.
En este marco, justificó: “Es prioritario estudiar el efecto tóxico sobre el material hereditario de todas las sustancias que son liberadas al ambiente, con el fin de cuidar la salud de las poblaciones humanas y del ecosistema. Los efectos biológicos de sustancias tóxicas, como los plaguicidas, se detectan empleando biomarcadores (técnicas de evaluación de daño a nivel de los cromosomas y el ADN) en la sangre de las personas expuestas”. Y agregó: “Para lograr una dimensión más real del impacto ambiental de los plaguicidas, además del estudio de las poblaciones humanas, es necesario poner énfasis en el efecto que pueden provocar sobre especies silvestres vulnerables de las localidades rurales”.
Los investigadores hicieron evaluaciones de genotoxicidad en sangre de personas expuestas a plaguicidas. Se les tomó una muestra de sangre de 5 ml para cultivarla in vitro.
Y, a partir de ahí, estudiaron las aberraciones cromosómicas y evaluaron las rupturas a nivel de los cromosomas y en las cadenas de ADN.
Los resultados obtenidos muestran que el número promedio de aberraciones cromosómicas en el grupo de personas expuestas es de 11,50 por cada 100 células analizadas, mientras que los valores de referencia son de 5,25 por cada 100 células analizadas. Para micronúcleos: 17 por cada 1.000 células analizadas en el grupo expuesto y 7,62 para el grupo de referencia. Y el daño al ADN (cometa), 3.820 unidades arbitrarias para el grupo expuesto y 317,9 para el grupo de referencia.
Además, implementaron encuestas domiciliarias atendiendo las necesidades planteadas en las reuniones con las autoridades de cada localidad, hicieron talleres para articular el saber técnico con el popular y elaboraron materiales educativos.
“En todos los individuos expuestos se observó un aumento en el número de rupturas de cromosomas, micronúcleos y cometas estadísticamente significativo con relación al grupo de referencia -personas no expuestas-”, indican en sus conclusiones. Y agregan: “Los cuestionarios domiciliarios demostraron que existen conductas de riesgo referidas a la utilización de plaguicidas en el ámbito doméstico rural y urbano, y desconocimiento de la legislación vigente en materia de agroquímicos. Estos resultados corroboraron la presunción previa acerca de la necesidad de la educación preventiva de la población en relación a esta problemática”.
“En los talleres participaron estudiantes, docentes, trabajadores rurales e integrantes de sus familias. Las temáticas desarrolladas se consensuaron con las autoridades que solicitaron la realización de estrategias de intervención sobre la problemática de los agroquímicos. La participación de todas las personas, tanto adultos como niños y adolescentes, fue muy activa, demostrando una verdadera preocupación”.
-¿Qué es un biomonitoreo de genotoxicidad?
-Un conjunto de técnicas destinadas a evaluar el efecto tóxico sobre el material genético de poblaciones expuestas a diversos contaminantes ambientales.
-Usted habla de todas las sustancias que son liberadas al ambiente. ¿Cuáles son?
-Desechos industriales, metales pesados provenientes de la minería, metalurgia; residuos domiciliarios o agropecuarios. En el proyecto que llevamos adelante nos dedicamos particularmente a plaguicidas de uso agropecuario y se prevé la incorporación del estudio del efecto sobre la salud humana del consumo crónico de medicamentos.
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