6 ene 2015
La Laguna Azul que volvió a ser pública
9:00 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (06/01/2015)
La Laguna Azul, un clásico que ha vuelto
El pintoresco balneario de La Calera fue reabierto al público esta semana. El acceso estaba cerrado desde hacía ocho años.
La Calera. A partir de este verano, la región de Sierras Chicas recuperó la posibilidad de disfrutar de uno de sus atractivos más singulares a la hora de disfrutar una salida de verano. Más valor adquiere cuando se valora que ese sitio resultó inaccesible al público en los últimos ocho años. Se trata de la Laguna Azul, un balneario de unos 500 metros de largo, que ofrece un encantador espejo de agua transparente, en lo que alguna vez fue una cantera.
Por sus características y fácil ingreso, es un espacio propicio para practicar deportes náuticos sin motor y actividades recreativas. Su cercanía a la ciudad de Córdoba lo había transformado en un balneario de alta convocatoria.
Durante décadas, y hasta el cierre del acceso público en 2007, el sitio se había convertido en un punto de encuentro y recreación de muchos que iban a practicar canotaje y buceo, entre otras actividades, o a pasar una tarde de sol y agua.
Actualmente, el predio (que es de propiedad privada) se utiliza para fiestas y eventos, a cargo de la empresa Felipa, que también tiene la concesión para el cuidado y explotación del balneario y parador, abierto desde las 12 a las 20 de martes a domingos.
Convenio
La empresa firmó un convenio con el municipio de La Calera, la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia y el grupo empresario que posee la titularidad del inmueble, de unas 430 hectáreas en el que está incluida la pequeña y pintoresca laguna. Allí, proyecta desarrollar una urbanización de montaña.
“El objetivo de este emprendimiento es elevar la oferta turística de la zona, que permita organizar eventos de alcance nacional e internacional. En esta primera etapa de nuestro plan de mediano plazo, ofrecemos un parque de aventura serrano para la familia con todas las comodidades y medidas de seguridad”, explicó Constantino Carrara, de la firma concesionaria del predio.
El lugar cuenta con cuatro bañeros y vigilancia durante los horarios habilitados. Se accede por el barrio Dumesnil, en la ruta E-64, entre Saldán y La Calera, y a través de un camino de tierra muy bien consolidado y señalizado.
En la costa de la laguna hay un parador en donde se puede disfrutar de servicios de barra, gastronomía, baños, pequeños mini muelles denominados palapas, música en vivo, y juegos acuáticos como wakeboard , además de otros deportes extremos como rappel, aprovechando los desniveles creados sobre las rocas por la antigua cantera.
En el extenso ambiente natural de montaña también se pueden efectuar cabalgatas, caminatas y mountain bike , en medio de senderos con vistas hacia el valle de Punilla y a la capital cordobesa.
Por otra parte, se habilitará en breve una escuela de verano durante la mañana y otra de buceo, tanto para aficionados como para profesionales.
El acceso es libre y gratuito, excepto el estacionamiento para quienes no sean residentes en La Calera.
El costo por vehículo es de 60 pesos por día, y de 30 para motos y bicicletas.
No se permite el ingreso con bebidas, alimentos, muebles (reposeras, mesas, sombrillas), ni con mascotas.
Cambio de manos
El sector de la laguna fue cerrado al cerrado en 2007, cuando el campo fue adquirido por el grupo desarrollista Irsa Euromayor. Luego Euromayor compró las acciones de Irsa, hasta que el año pasado se vendió la mayoría a un grupo cordobés que continúa con el proyecto de urbanizar el predio de 442 hectáreas, y que incluye las lagunas Azul y Verde. En los últimos años se alquiló un sector para fiestas y eventos privados.
Sobre el río Suquía
Mejoras. El municipio de La Calera promete avanzar en la recuperación y puesta en valor del dique Mal Paso, en barrio Dumesnil, y del trayecto de costanera sobre el río Suquía que es aprovechado por residentes de la zona y familias cordobesas que encuentran reparo a los días de calor. Hasta ahora, son sitios atractivos pero que no han lucido bien mantenidos. El municipio implementó un programa de cuidado de espacios verdes a la vera del río, que resulta una opción gratuita, por ejemplo, para aquellos que no decidan ingresar al predio de la Laguna Azul.
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La Laguna Azul, un clásico que ha vuelto
El pintoresco balneario de La Calera fue reabierto al público esta semana. El acceso estaba cerrado desde hacía ocho años.
La Calera. A partir de este verano, la región de Sierras Chicas recuperó la posibilidad de disfrutar de uno de sus atractivos más singulares a la hora de disfrutar una salida de verano. Más valor adquiere cuando se valora que ese sitio resultó inaccesible al público en los últimos ocho años. Se trata de la Laguna Azul, un balneario de unos 500 metros de largo, que ofrece un encantador espejo de agua transparente, en lo que alguna vez fue una cantera.
Por sus características y fácil ingreso, es un espacio propicio para practicar deportes náuticos sin motor y actividades recreativas. Su cercanía a la ciudad de Córdoba lo había transformado en un balneario de alta convocatoria.
Durante décadas, y hasta el cierre del acceso público en 2007, el sitio se había convertido en un punto de encuentro y recreación de muchos que iban a practicar canotaje y buceo, entre otras actividades, o a pasar una tarde de sol y agua.
Actualmente, el predio (que es de propiedad privada) se utiliza para fiestas y eventos, a cargo de la empresa Felipa, que también tiene la concesión para el cuidado y explotación del balneario y parador, abierto desde las 12 a las 20 de martes a domingos.
Convenio
La empresa firmó un convenio con el municipio de La Calera, la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia y el grupo empresario que posee la titularidad del inmueble, de unas 430 hectáreas en el que está incluida la pequeña y pintoresca laguna. Allí, proyecta desarrollar una urbanización de montaña.
“El objetivo de este emprendimiento es elevar la oferta turística de la zona, que permita organizar eventos de alcance nacional e internacional. En esta primera etapa de nuestro plan de mediano plazo, ofrecemos un parque de aventura serrano para la familia con todas las comodidades y medidas de seguridad”, explicó Constantino Carrara, de la firma concesionaria del predio.
El lugar cuenta con cuatro bañeros y vigilancia durante los horarios habilitados. Se accede por el barrio Dumesnil, en la ruta E-64, entre Saldán y La Calera, y a través de un camino de tierra muy bien consolidado y señalizado.
En la costa de la laguna hay un parador en donde se puede disfrutar de servicios de barra, gastronomía, baños, pequeños mini muelles denominados palapas, música en vivo, y juegos acuáticos como wakeboard , además de otros deportes extremos como rappel, aprovechando los desniveles creados sobre las rocas por la antigua cantera.
En el extenso ambiente natural de montaña también se pueden efectuar cabalgatas, caminatas y mountain bike , en medio de senderos con vistas hacia el valle de Punilla y a la capital cordobesa.
Por otra parte, se habilitará en breve una escuela de verano durante la mañana y otra de buceo, tanto para aficionados como para profesionales.
El acceso es libre y gratuito, excepto el estacionamiento para quienes no sean residentes en La Calera.
El costo por vehículo es de 60 pesos por día, y de 30 para motos y bicicletas.
No se permite el ingreso con bebidas, alimentos, muebles (reposeras, mesas, sombrillas), ni con mascotas.
Cambio de manos
El sector de la laguna fue cerrado al cerrado en 2007, cuando el campo fue adquirido por el grupo desarrollista Irsa Euromayor. Luego Euromayor compró las acciones de Irsa, hasta que el año pasado se vendió la mayoría a un grupo cordobés que continúa con el proyecto de urbanizar el predio de 442 hectáreas, y que incluye las lagunas Azul y Verde. En los últimos años se alquiló un sector para fiestas y eventos privados.
Sobre el río Suquía
Mejoras. El municipio de La Calera promete avanzar en la recuperación y puesta en valor del dique Mal Paso, en barrio Dumesnil, y del trayecto de costanera sobre el río Suquía que es aprovechado por residentes de la zona y familias cordobesas que encuentran reparo a los días de calor. Hasta ahora, son sitios atractivos pero que no han lucido bien mantenidos. El municipio implementó un programa de cuidado de espacios verdes a la vera del río, que resulta una opción gratuita, por ejemplo, para aquellos que no decidan ingresar al predio de la Laguna Azul.
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