7 oct 2006

Más intoxicados con plomo en Bouwer

La Voz del Interior (07/10/2006)
Más intoxicados con plomo en Bouwer

Son dos niños. Ya hay al menos 14 personas con este metal en la sangre. Se lo asocia a una fundición que acaba de cerrar.
Dos nuevos casos de intoxicación con plomo detectados en la comuna de Bouwer, que se suman a los 12 con niveles anormales de este metal en el organismo, según estudios realizados por la comuna en noviembre de 2005.
Los análisis de plomo en sangre a 72 alumnos de la escuela primaria Florentino Bustos de esa localidad develaron niveles preocupantes de este metal pesado en el organismo de dos niños. Uno de ellos, con 25 microgramos por decilitro de sangre, supera en 15 puntos el valor máximo estipulado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El otro alumno alcanzó los nueve microgramos.
Además, está en estudio una joven de 22 años que vivió siete años a 100 metros de una fundición a la que se asocian los otros casos. Padece de hipertiroidismo que le provoca bajo peso y los médicos analizan la vinculación entre esta afección y su larga exposición al plomo.
La fundición cesó sus actividades hace un año y dos meses y levantó sus instalaciones dos meses atrás. No obstante, los efectos de más de dos décadas de contaminación parecen perdurar en los habitantes de la comuna.

Plumbemia
Cabe recordar que la plumbemia (plomo en sangre) es un buen indicador para determinar exposiciones agudas al plomo, pero no crónicas como las que podrían haber experimentado los pobladores de Bouwer. Para ello, se recomienda realizar mediciones en dientes o en huesos donde este metal puede perdurar por más de 20 años y evaluar posibles afecciones pulmonares, neurológicas o hepáticas.
Para Adolfo González, asesor ambiental de la comuna, si bien son pocos los casos que están por encima de los 10 microgramos que estipula la OMS, entiende que esa cifra es para niños que viven en zonas urbanas donde la exposición es mayor. "Para zonas rurales como la de Bouwer, debería ser cero", explicó el especialista.
El estudio fue realizado por la Dirección de Epidemiología de Córdoba a pedido de la comuna y sirvió como muestreo para saber el nivel de exposición de todos los habitantes de Bouwer. El alumno con mayor cantidad de plomo en sangre es hijo de uno de los empleados de la fundición. En este caso, la fuente contaminante sería la ropa de trabajo de su padre.
"Tenemos previsto realizarle estudios en el hígado, pulmones y neurológicos para conocer si la exposición a este metal ha provocado daños en el organismo", indicó Nilda Gayt, especialista en toxicología del hospital de Niños. Al resto de los alumnos, cuya plumbemia varía entre los cuatro y nueve microgramos por decilitro, se les realizará sólo análisis hepáticos.
Los primeros casos fueron publicados por La Voz del Interior el 19 de diciembre de 2005.

El más severo
El caso más severo es el de L., una niña de cuatro años que llegó a tener 64 microgramos por decilitro y que fue internada para un tratamiento de quelación. La familia de L., que también está bajo tratamiento, demandó a la fábrica y a la Agencia Córdoba Ambiente por daño moral y patrimonial.
Cabe recordar que en el 2002 la Agencia realizó una auditoría en la fundición donde detectó 19 irregularidades. Sin embargo, no multó ni cerró sus instalaciones. En el expediente de este organismo figura una medición realizada por la empresa ILA, en setiembre de 2003, según la cual los niveles de plomo emitidos por la chimenea eran 35 veces más altos que lo permitido.
También se realizaron análisis a ocho empleados de la fundición, quienes alcanzaron valores superiores a los 20 microgramos por decilitros que estipula como máximo la OMS.
Recién el 7 de abril de este año, Ambiente le negó a la fundición la inscripción como operador de residuos peligrosos.

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