11 oct 2014

Importante estudio de la UNRC sobre agroquímicos



La Voz del Interior (11/10/2014)
Estudio cordobés advierte sobre graves peligros de plaguicidas

Científicos de la UNRC concluyeron en que el glifosato y otras variantes pueden generar daños genéticos y otros efectos en ciertos casos. Hicieron muestreos en el interior.
Río Cuarto. Investigadores de la Universidad Nacional de Río Cuarto aseguran haber constatado “un daño genético aumentado” en personas expuestas a agroquímicos en la provincia de Córdoba, lo que conlleva mayor riesgo de padecer cáncer, abortos espontáneos y nacimientos con malformaciones.
El Grupo de Genética y Mutagénesis Ambiental (Gema), de la UNRC, está integrado por 21 profesionales de diferentes disciplinas y es dirigido por Delia Aiassa y Fernando Mañas. Lleva ocho años de estudios sobre la frecuencia de daño genético en grupos humanos expuestos a agentes ambientales, con ocho publicaciones en revistas científicas internacionales y más de media docena en el país.
Sus estudios corresponden a personas que trabajan como aplicadores o viven a menos de mil metros de zonas con fumigaciones, en diferentes localidades como Marcos Juárez, Río Cuarto, Oncativo, Las Vertientes y Alcira Gigena.
Recientemente trascendió su trabajo publicado en la revista científica Toxicología Ambiental y Farmacología , de Holanda, referido al efecto genotóxico del glifosato en células de ratones y humanos.
Días después de conocerse el estudio, el jefe de Gabinete nacional, Jorge Capitanich, fue consultado al respecto y señaló que de esos temas se ocuparía el Ministerio de Salud, aunque dejó sentado que “cada localidad y provincia debe tener una regulación para impedir la afectación a zonas urbanas”.
Los investigadores de Río Cuarto opinaron que “para terminar con la discusión sobre el impacto de los plaguicidas sobre centros urbanos, habría que tomar muestras de suelo, agua, aire, sangre y orina de las personas que viven cerca de las zonas fumigadas y, después de determinar si están llegando plaguicidas, discutir si los niveles que tienen pueden estar relacionados al daño genético, abortos, cáncer y todo lo que se viene denunciando”.

Efectos
El Grupo Gema sostiene que “una gran cantidad de plaguicidas tienen efecto genotóxico; esto es, pueden provocar algún tipo de modificación en la información genética y si el daño en el material genético se induce en células germinales y las células que las originan, puede generar un aumento en la ocurrencia de enfermedades genéticas, monogénicas, cromosómicas y multifactoriales, en generaciones futuras”.
“Respecto al glifosato lo que hicimos fue comprobar que puede producir un daño en el material genético, y que también el Ampa, metabolito del glifosato cuando cae al suelo, es genotóxico”, precisó Mañas.
Aiassa explicó que se analizaron más de 230 casos de personas expuestas a plaguicidas y en comparación con individuos sin exposición, se probó un “daño genético aumentado”.
“Encontramos a nivel genético en los aplicadores o gente expuesta, un aumento del 50 por ciento en el nivel de rupturas cromosómicas”, resumieron los especialistas.
Gema destacó que la detección precoz del daño genético permite tomar las medidas necesarias para disminuir o suprimir la exposición al agente deletéreo y en algunos casos en siete u ocho meses el daño puede revertirse.
Se advirtió que, principalmente en los aplicadores, se genera un daño tan grande que el cuerpo no lo alcanza a reparar, aunque algunos están más expuestos que otros al daño genético.
“No es lo mismo el que aplica con mochila que el que lo hace desde un mosquito con cabina presurizada y filtro”, admitió Mañas.
o es un dato menor que Córdoba esté por encima de la media en casos de cáncer”, agregó Aiassa.

Síntomas de alerta
Quiénes. Los investigadores del grupo Gema de la UNRC entrevistaron y realizaron ensayos de aberraciones cromosómicas (AC), micronúcleos (CBMN), y cometa en sangre a 150 personas (expuestas laboralmente y ambientalmente, y no expuestos) y a 75 niños de 4 a 14 años de localidades de Córdoba con actividad agrícola.
Edad. La edad promedio de adultos del grupo expuesto laboralmente varía entre 18 y 62 años. Los plaguicidas más usados son glifosato, cipermetrina, 2-4D, endosulfán, atrazina, clorpirifós.
Exposición. Fue significativa la diferencia de resultados entre los niños expuestos a menos de 300 metros con respecto a un grupo de niños no expuestos. Consideraron que deberían hacerse relevamientos por localidades.
Cuidado. Advirtieron que en los centros de salud no suelen asociar ciertos síntomas con las actividades laborales, y en los trabajadores tampoco suele haber conciencia de los riesgos.

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