9 abr 2009
Defienden las fumigaciones con aviones
11:39 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Río Cuarto (09/04/2009)
Empresas agroaéreas defienden las fumigaciones con aviones
La Cámara que agrupa a las firmas rechazó el proyecto que impulsan dos legisladores para prohibir este sistema de pulverización. Sostienen que la iniciativa conspira contra la economía productiva del país.
La Cámara de Empresas Agroaéreas Cordobesas rechazó el proyecto presentado por dos legisladores provinciales que impulsa la erradicación de las fumigaciones con aviones, y considera que el contenido del mismo lejos está de reflejar la realidad de esta actividad y conspira hasta con la principal producción de la provincia, cual es la soja, a la vez que considera que los productos que se usan para la pulverización están aceptados por organismos de control.
A través de un comunicado, el presidente de dicha institución, Orlando Martínez, señala que la iniciativa de modificatoria presentada por Enrique Asbert y Silvia Rivero plantea una serie de incoherencias y no refleja la realidad.
“Hay una falta total de coherencia con la posición del Gobierno nacional, al que pertenecen, ya que en todos los estrados en los que se presenta -el Gobierno nacional- menciona como fundamental las retenciones a la soja para sostener los recursos fiscales que permiten mantener a los jubilados, distribuir a los pobres, sostener la salud. Y es aquí donde la aviación agrícola pone a disposición de los productores los aviones para mantener los niveles de producción dentro de los márgenes compatibles con la sobrevida y permanencia de dichos productores en el interior del interior y así sostener esos recursos fiscales que estos legisladores parecen desestimar”.
El proyecto de los legisladores del bloque Concertación Plural apunta a prohibir la aplicación aérea de productos químicos o biológicos de uso agropecuario, agregando que “excepcionalmente podrá hacerse aplicación aérea de productos siempre que este método de aplicación resulte el único viable o el de menor impacto negativo para la salud humana y el medio ambiente, en relación con el método de aplicación terrestre”.
Según Martínez, la realización de las fumigaciones asegura un buen rinde de estos .cultivos, y de no hacerse ello los niveles de producción se reducirían sustancialmente. “También es lamentable, que estos legisladores no reconozcan a la provincia de Córdoba, su provincia, como la primera productora de soja del país cuando su gobernador recuerda permanentemente que es una producción regional, dada su superficie implantada desde hace muchos años y donde la tecnología que utiliza permite el desarrollo de los pueblos del interior”. Martínez insiste en que “sin ellas y sin la aplicación aérea sería muy difícil conseguir resultados productivos que permitan tener saldos exportables que mantengan o aumenten la recaudación fiscal vía retenciones para sostener el Estado”.
A su vez, sostienen que en el actual sistema de fumigaciones aéreas no se utilizan banderilleros para la marcación de las franjas pasadas, sino que se cuenta con un sistema de guía por GPS, desde el año 1994 en que se comenzó a comercializar este tipo de equipos para la aviación agrícola.
A su vez, Martínez desmiente que un 40% de los pesticidas que se esparcen terminen en deriva, y aclara que el nivel de control es del 98 por ciento, lo cual impide que éstos lleguen a otros sectores que no sea la zona afectada a la fumigación.
Sobre la toxicidad
Más adelante, Martínez hace referencia a investigaciones internacionales sobre la toxicidad de los productos y de la concentración de ésta en los organismos, desestimando que sea dañino para la salud. Por lo que sostiene que apoyándose en estos trabajos se deduce que “los productos químicos no son tan malos como se los quiere hacer aparecer, no reconociéndoles la potencialidad que encierra para hacer producir a la tierra arable”.
“Desconocer que existen organismos estatales nacionales (SENASA) que evalúan la peligrosidad o inocuidad y autorizan su uso, para contrarrestar enfermedades que ataquen a cualquiera de los cultivos que se desarrollen en la provincia de Córdoba y el país, es desconocer que se rigen por estándares internacionales emitidos por la OMS (Organización Mundial de la Salud), la FAO (Organización Mundial de Alimentación), donde se clasifican para ser usados de acuerdo a los agentes o vectores a tratar”.
Por último, desde la Cámara se invita al diálogo para debatir sobre esta temática que desde hace ya tiempo genera polémica en distintos sectores de la sociedad.
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Empresas agroaéreas defienden las fumigaciones con aviones
La Cámara que agrupa a las firmas rechazó el proyecto que impulsan dos legisladores para prohibir este sistema de pulverización. Sostienen que la iniciativa conspira contra la economía productiva del país.
La Cámara de Empresas Agroaéreas Cordobesas rechazó el proyecto presentado por dos legisladores provinciales que impulsa la erradicación de las fumigaciones con aviones, y considera que el contenido del mismo lejos está de reflejar la realidad de esta actividad y conspira hasta con la principal producción de la provincia, cual es la soja, a la vez que considera que los productos que se usan para la pulverización están aceptados por organismos de control.
A través de un comunicado, el presidente de dicha institución, Orlando Martínez, señala que la iniciativa de modificatoria presentada por Enrique Asbert y Silvia Rivero plantea una serie de incoherencias y no refleja la realidad.
“Hay una falta total de coherencia con la posición del Gobierno nacional, al que pertenecen, ya que en todos los estrados en los que se presenta -el Gobierno nacional- menciona como fundamental las retenciones a la soja para sostener los recursos fiscales que permiten mantener a los jubilados, distribuir a los pobres, sostener la salud. Y es aquí donde la aviación agrícola pone a disposición de los productores los aviones para mantener los niveles de producción dentro de los márgenes compatibles con la sobrevida y permanencia de dichos productores en el interior del interior y así sostener esos recursos fiscales que estos legisladores parecen desestimar”.
El proyecto de los legisladores del bloque Concertación Plural apunta a prohibir la aplicación aérea de productos químicos o biológicos de uso agropecuario, agregando que “excepcionalmente podrá hacerse aplicación aérea de productos siempre que este método de aplicación resulte el único viable o el de menor impacto negativo para la salud humana y el medio ambiente, en relación con el método de aplicación terrestre”.
Según Martínez, la realización de las fumigaciones asegura un buen rinde de estos .cultivos, y de no hacerse ello los niveles de producción se reducirían sustancialmente. “También es lamentable, que estos legisladores no reconozcan a la provincia de Córdoba, su provincia, como la primera productora de soja del país cuando su gobernador recuerda permanentemente que es una producción regional, dada su superficie implantada desde hace muchos años y donde la tecnología que utiliza permite el desarrollo de los pueblos del interior”. Martínez insiste en que “sin ellas y sin la aplicación aérea sería muy difícil conseguir resultados productivos que permitan tener saldos exportables que mantengan o aumenten la recaudación fiscal vía retenciones para sostener el Estado”.
A su vez, sostienen que en el actual sistema de fumigaciones aéreas no se utilizan banderilleros para la marcación de las franjas pasadas, sino que se cuenta con un sistema de guía por GPS, desde el año 1994 en que se comenzó a comercializar este tipo de equipos para la aviación agrícola.
A su vez, Martínez desmiente que un 40% de los pesticidas que se esparcen terminen en deriva, y aclara que el nivel de control es del 98 por ciento, lo cual impide que éstos lleguen a otros sectores que no sea la zona afectada a la fumigación.
Sobre la toxicidad
Más adelante, Martínez hace referencia a investigaciones internacionales sobre la toxicidad de los productos y de la concentración de ésta en los organismos, desestimando que sea dañino para la salud. Por lo que sostiene que apoyándose en estos trabajos se deduce que “los productos químicos no son tan malos como se los quiere hacer aparecer, no reconociéndoles la potencialidad que encierra para hacer producir a la tierra arable”.
“Desconocer que existen organismos estatales nacionales (SENASA) que evalúan la peligrosidad o inocuidad y autorizan su uso, para contrarrestar enfermedades que ataquen a cualquiera de los cultivos que se desarrollen en la provincia de Córdoba y el país, es desconocer que se rigen por estándares internacionales emitidos por la OMS (Organización Mundial de la Salud), la FAO (Organización Mundial de Alimentación), donde se clasifican para ser usados de acuerdo a los agentes o vectores a tratar”.
Por último, desde la Cámara se invita al diálogo para debatir sobre esta temática que desde hace ya tiempo genera polémica en distintos sectores de la sociedad.
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