21 dic 2014

Las cloacas de Córdoba debordadas, récord de rebalses



Día a Día (21/12/2014)
Más de 13 mil desbordes de cloacas en el año

2014 fue récord en desbordes. Los empleados de la Dirección de Redes de la Muni temen un 2015 peor y propusieron una limpieza de caños para mejorar el sistema. Los trabajos comenzarían en marzo.
Cierra 2014 con un récord triste para la ciudad y la salud de los vecinos: este año los trabajadores de la Dirección de Redes de la Muni tuvieron que intervenir 13.800 veces en cámaras y caños del sistema de cloacas por desbordes de aguas negras, superándose así las estadísticas de los últimos cuatro años.
En 2011, se registraron 10.600 desbordes, por lo que el corte actual equivale a un 30 por ciento más de casos que en ese año, lo que traducido en criollo es: hay más caca en la calle.
El dato proviene de un monitoreo de intervenciones que realizan los trabajadores de la Dirección de Redes de la Muni. Oscar Basáez, delegado de los municipales, aseguró que la situación no va a mejorar durante el año que viene, por el contrario, sostiene que va a ser mucho peor, por lo que diagramaron un esquema de trabajo preventivo para poder disminuir significativamente la cantidad de desbordes dentro de dos años.
Según explica Basáez, el 35 por ciento del material que circula por las cañerías de cloacas son sedimentos producto del mal uso que hacen los vecinos de la red. El delegado afirma que las obras de mantenimiento en el sistema son nulas, y por la acumulación de esos desperdicios –que nada tienen que ver con las excreciones humanas– la situación va empeorando año tras año.

Plan de trabajo
Según un plan de acción de los trabajadores de Redes, limpiar las conexiones de la red de cloacas disminuiría la cantidad de desbordes. El plan ya fue presentado al Ejecutivo, que aceptó la propuesta, por lo que el esquema preventivo de desbordes comenzaría a funcionar en marzo.
“Hoy estamos trabajando contra el problema producido y la idea es modificar eso para, con personal de planta, implementar un sistema preventivo. Tenemos una red colapsada por falta de inversión. A eso hay que sumarle el crecimiento del desarrollo inmobiliario, lo que produce una alta demanda”, explicó Alberto Giménez, secretario General de la Muni.
La propuesta de los trabajadores municipales fue armar un equipo de feriantes que se dediquen a tareas de limpieza y mantenimiento de redes durante las 48 horas del fin de semana, lo que implica tener cuadrillas con camionetas, camiones volcadores, desobstructores hidráulicos y personal cumpliendo turnos de 12 horas.
“Para el resto de los días de la semana armaríamos cuatro equipos con turnos de seis horas cada uno, con lo que cubriríamos la demanda de los reclamos”, explicó el delegado.
Según Giménez, el nuevo esquema de trabajo va a insumir un gasto mayor en afectación de personal, por lo que “se están haciendo los cálculos de inversión necesarios para poder poner en marcha el plan preventivo y las guardias rotativas permanentes”.

Achicar la espera
En la situación actual, la solución a un reclamo por desborde cloacal demanda entre 24 y 36 horas por la cantidad de inconvenientes que se presentan por día: un promedio de 37.
Con el nuevo esquema, los empleados de Redes esperan bajar el tiempo de soluciones a los reclamos a ocho horas pasados los primeros seis meses del trabajo de limpieza, a seis después del año y a tres cuando se hayan liberado de sedimentos los casi nueve mil kilómetros de caños que tienen las cloacas.
“Para poner un ejemplo: la red de Alta Córdoba tiene 70 años y nunca se hizo una limpieza integral de todas las cámaras y caños, ¿en qué estado puede estar eso? Lo mismo ocurre en otros sectores, en donde por 40 años no se ha metido mano, más allá de las intervenciones puntuales por desbordes. Es lógico que las cloacas de la ciudad estén colapsadas”, asegura Basáez.

La ordenanza de cloacas
Gran parte de estos problemas están ligados a las conexiones clandestinas de desagües pluviales que se realizan a la red, sobre todo de edificios y viviendas particulares. Para poder controlar esta situación, los trabajadores proponen crear una ordenanza específica sobre cloacas en donde se estipule cuál es el uso correcto que los vecinos deben hacer del sistema y las penalidades que deberían enfrentar si se intervienen caños clandestinamente.
Para Basáez, el castigo es clave para terminar con las conexiones clandestinas: “El uso de la red de cloacas, como la autorización de conexiones, está especificado en la ordenanza tarifaria, muy por encima, lo que deja muchísimas zonas grises de las que se aprovechan los mismos de siempre, particularmente los desarrollistas, por eso es muy importante trabajar un marco normativo que permita mejorar el sistema y castigar a quienes lo dañan”.
Así, la ordenanza de cloacas será uno de los primeros temas que el Ejecutivo querrá poner en discusión en el Concejo Deliberante durante las primeras sesiones del año que viene, a partir de marzo.
“Estamos trabajando en este proyecto de ordenanza, lo tenemos muy avanzado para que sea tratado en el inicio de sesiones. Con todo este paquete, más las obras de ampliación de la red que se hacen y la anunciada ampliación de la planta de tratamiento de líquidos cloacales de Bajo Grande esperamos mejorar todo el sistema”, aseguró el secretario General de la Muni.

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