23 jul 2012

La triste realidad de las areas protegidas provinciales

Día a Día (23/07/2012)
Más solo que guardaparque de Achala

 
En la Reserva Hídrica hay apenas dos personas para controlar 146 mil hectáreas y un solo vehículo. Además, no tienen puesto de trabajo.
Solito con su alma, en la inmensidad de las sierras grandes, Walter González hace lo que puede para cumplir con su importantísima tarea: cuidar las tierras de la Pampa de Achala. Él se encarga del control de la zona centro de la Reserva Hídrica Provincial. Al norte, sobrepasado por los picos de granito de Los Gigantes, está Carlos Llanes. Al sur, en los dominios del cerro Champaquí, sólo está el Champaquí.
Walter y Carlos son los encargados de vigilar y coordinar acciones de prevención en esta enorme reserva que tiene la provincia. Son 146 mil hectáreas de pajonales de altura, quebradas y cursos de agua. Una camioneta, que se arreglan para compartir, es el único vehículo del que disponen.
¿Un espacio para trabajar? Nunca existió. Los guardaparques no tienen ni puesto, y el que habían conseguido no lo pueden usar porque está prestado a una escuela de la zona. Se trata de un destacamento que en 2011 La Posta del Quenti le cedió en comodato a la Provincia, pero hoy lo usa la escuelita “20 de Julio” porque está en obras.
Walter vive en Achala con toda su familia. Nació en la montaña, por lo que tiene un gran conocimiento de toda esa amplia zona. Hoy, su casa o la camioneta hacen las veces de oficina, y la radio y su teléfono celular son los otros elementos de trabajo con los que cuenta.
Poco control. Solo, más solo que el Guasón en el día del amigo, Walter conlleva tremenda responsabilidad: “Creo que se debería poner más atención en la reserva para que funcionen los planes que se tienen que realizar. Porque más allá de que haya degradación del lugareño, hay otras actividades exteriores que provocan daños, que son de recreación, de diversión, y se están controlando muy poco”.
Por la Ley Provincial de Áreas Naturales, la 6.964, la actividad de los guardaparques está bien delimitada. Se trata de un cuerpo especial de la Provincia que tiene que “atender lo concerniente a la seguridad, vigilancia y control de los elementos naturales, bienes y personas en el ámbito de las áreas naturales, desempeñándose como fuerza pública”.
También “atender aspectos relativos a la conservación y recursos silvestres, y a la administración y el manejo operativo de las reservas”.
“Deberíamos tener más personal para que podamos llevar a cabo nuestro trabajo. Hay muchas actividades que se hacen en la montaña y que están reguladas por ley, pero las normas no funcionan porque no hay control. No hablo de prohibir, porque eso es contraproducente, pero implementar lo que está legislado sería lo ideal”, dice Walter, con la impotencia lógica de querer hacer y no poder.
Los rodeos de los dos guardaparques son descabellados. No hay forma de atravesar las Altas Cumbres de norte a sur en un vehículo, esto sólo se puede hacer de a pie o a caballo. Y como hay una sola camioneta la deben compartir, y para compartirla tienen que dejar la zona que protegen.
“Yo soy el que maneja la camioneta, ya sea por francos o por actividades; si mi compañero la necesita se la tengo que llevar. Para esto tengo que salir de la reserva, manejar hasta la zona de los Los Gigantes; después él me tiene que traer hasta acá y volverse a su sector”, explica Walter.
Entre las travesías “extremas” de los guardaparques está el rodeo que hacen en la zona del Champaquí, un sector que no tiene ningún centinela designado. Por lo general, Walter y Carlos hacen juntos estos controles, y para hacerlos dejan sin protección los sectores norte y centro. Ellos se sienten dos “hormiguitas” en la tremenda inmensidad de las Altas Cumbres cordobesas.
Para cuidar- Áreas Naturales Protegidas de la Provincia: El Caldén, Salinas, Chancaní, Mar Chiquita, La Quebrada, Achala, La Felipa, Cerro Colorado, Monte de las Barrancas, Chaco Árido.

Casi sin presupuesto para cuidar todo
Son 10 las áreas naturales protegidas de la provincia de Córdoba. Para su manejo, el Gobierno tiene un plan de gestión, peso su presupuesto es irrisorio: 50 mil pesos para todo el año, de los que en el primer trimestre no se ejecutó ni un centavo.
El dato surge de la ejecución del presupuesto para la Provincia en el 2012 durante el primer trimestre del año. Día a Día consultó al Ministerio de Agua, Ambiente y Energía por este tema y desde la cartera indicaron que dentro de dos meses se va comenzar a ejecutar un Plan Director de puesta en valor de las áreas naturales con la idea de llegar a la temporada estival con el reacondicionamiento de los sectores, sobre todo en lo que refiere a cartelería y trazado de sendas.
Además, informaron que están trabajando en la reserva Cerro Colorado y La Quebrada e indicaron que van a invertir en la vestimenta y la movilidad de los guardaparques y en nuevos planes de reforestación.
Para saber si esta cantidad de dinero (50 mil pesos para 10 áreas protegidas) y de guardaparques (apenas dos para toda la Pampa de Achala) es la adecuada para gestionar un área protegida, comparamos el caso de la Reserva Hídrica Provincial con la Quebrada del Condorito, que es un Parque Nacional.
El Condorito está dentro de los límites de Achala, tiene una superficie de 37 mil hectáreas y 10 guardaparques que lo custodian día y noche, o sea, cinco veces más personal para control que la reserva provincial, que tiene una superficie casi cuatro veces mayor.
Para este año, el Parque Nacional tiene un presupuesto de 500 mil pesos para el manejo de su territorio y la intendencia que está en Villa Carlos Paz, sin incluir el salario de las más de 30 personas que en total trabajan para el lugar. Vale decir, un presupuesto 10 veces más grande que el que maneja la Provincia de Córdoba para sus 10 reservas naturales.
50.000. Es todo el presupuesto que maneja la Provincia para cuidar las 10 áreas protegidas que hay en Córdoba.

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