4 oct 2009
Ahora las palomas son un "peligro"
9:43 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz de San Justo (04/10/2009)
Las palomas son una plaga que trae enfermedades
En los últimos años nuestra sociedad sufrió muchas trasformaciones, pero probablemente una de las más perturbadoras que estamos viviendo es el cambio de estatus de un animal en nuestra ciudad: la paloma.La paloma ha pasado de alimento a estorbo, de símbolo universal de la paz a molesto problema.
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Día a Día (04/10/2009)
Todo vale en la guerra a la paloma
Hay una invasión de estas aves, principalmente en el centro y en Nueva Córdoba. Cada vez son más los vecinos que buscan alguna salida alternativa para evitar que ensucien o que realicen nidos.
Un grupo de vecinos de barrio Colón se las ingenió con un aguilucho. En un edificio de categoría en General Paz tienen un halcón amaestrado y desde la iglesia de Los Capuchinos hicieron consultas a veterinarios. De ahí en adelante, en Córdoba hay ideas de lo más alocadas para tratar de combatir la plaga de palomas que ensucia fachadas, tapa cañerías y genera enfermedades.
“En mi barrio hay un aguilucho que accidentalmente se le escapó a un vecino, y esa fue la solución para sacarlas. No se las ve más por acá”, contó Melisa, de Colón, quien dijo que esa fue la alternativa para que estas aves no sigan anidando en esa zona de la ciudad.
En General Paz se levanta el edificio Miracielos, una de las torres con más categoría que en la cúspide tiene un halcón peregrino para ahuyentar a las palomas. Esta misma idea se evaluó en la gestión de Luis Juez, cuando desde Ambiente se analizó –entre otras opciones– la posibilidad de soltar estas aves en la plaza San Martín para que disminuyera el número de palomas. Principalmente, porque los edificios antiguos son los más afectados por los nidos y desechos que originan estos animales. Vale un caso como ejemplo: en las remodelaciones de la Capilla Doméstica, los obreros que treparon a sacar la caca de palomas llenaron 35 bolsas de consorcio. En esa oportunidad contaron más de 300 aves anidando en la torre.
La problemática se acentúa en los pisos altos, en los edificios con balcones u ochavas que permiten que estas aves actúen en bandadas. “No apliqué nada aún, pero me pasó de llegar un domingo a casa luego de estar durante todo el día afuera, vi una paloma muy cómoda sobre el ventilador. Con el desastre típico que hacen las palomas, me quedé espantado. La verdad me dan mucho asco”, comentó Hernán, un estudiante universitario de Nueva Córdoba.
Además de sufrir la invasión de ratas y murciélagos, el “barrio de los estudiantes” está plagado de estas aves. Algunos optan por dejarlas anidar en macetas vacías y otros por inventar lo que sea necesario para ahuyentarlas. “Yo puse un líquido, algo semejante a la creolina y, por lo menos, no regresaron más”, contó Virginia, una joven que vive por bulevar Illia. “Sí, hay un producto que se llama No Vuela. Nosotras lo pusimos y es buenísimo. No pisó ni una paloma más. Ese producto se consigue en veterinarias. También probamos con tiritas de plástico largas que vuelen”, agregó María Silvina, que con sus hermanas se las ingeniaron para no tener más de estas aves en el balcón de su departamento por avenida Estrada, también en Nueva Córdoba.
Los que son más arriesgados se animan a usar un rifle de aire comprimido o tirar cuetes al aire. “Un bolón explosivo, de los que rebotan. Lo usé en el departamento y las palomas no volvieron más, pero hay que tener cuidado”, comentó Adrián, otro universitario que vive por Buenos Aires.
Desde la Veterinaria Nueva Córdoba, Mabel contó que “es muy frecuente que estudiantes o gente mayor” que vive en esa zona llegue preocupada en busca de algún producto para espantarlas. “Llegan a preguntar porque se les han llenado los colchones de itas (piojos de las palomas) o porque las quieren sacar de una ventana o un balcón. Hasta de una iglesia nos vinieron a pedir por un ahuyentador de sonidos porque ya no saben como más combatirlas”, comentó la mujer. Entre los productos más vendidos está un líquido repelente de estas aves, que cuesta 25 pesos.
También están los equipos que emiten ultrasonidos y que perturban a las aves molestas, aunque no está demostrado que funcionen más que en un corto plazo.
La otra alternativa son esos productos conocidos como bolón, similar a la pirotecnia, que las ahuyenta.
Se utilizan, además, globos, reflectores (luces potentes), cintas de colores, espantapájaros, réplicas de rapaces o de otros predadores, aunque las aves se acostumbran y dejen de temerles.
Los profesionales en el manejo de aves molestas suelen instalar un método más efectivo y duradero para la protección de edificios, que son las mallas. Difieren en tamaño dependiendo si se trata de palomas o gorriones.
Consejos para zafar de las plumíferas
* Se coloca una malla o red en los lugares adonde se suelen posar las aves.
* Alambres tensados en barandas o salientes para que las palomas, para que no se asienten por la inestabilidad que les provoca ese alambre.
* En techos y cornisas, rotores con alambres cuyas puntas tienen pelotitas: por acción del viento, esas estructuras se mantienen en movimiento y evitan que las aves se posen.
* Instalación de un reflector o luz fuerte apuntando a la zona adonde se posan las palomas. Esto provoca que el ambiente se les convierta en algo desagradable y dejen de frecuentarlo.
* Repelentes en las bases y bordes de los edificios altos.
* Pirotecnia para ahuyentarlas a través del estruendo.
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Las palomas son una plaga que trae enfermedades
En los últimos años nuestra sociedad sufrió muchas trasformaciones, pero probablemente una de las más perturbadoras que estamos viviendo es el cambio de estatus de un animal en nuestra ciudad: la paloma.La paloma ha pasado de alimento a estorbo, de símbolo universal de la paz a molesto problema.
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Día a Día (04/10/2009)
Todo vale en la guerra a la paloma
Hay una invasión de estas aves, principalmente en el centro y en Nueva Córdoba. Cada vez son más los vecinos que buscan alguna salida alternativa para evitar que ensucien o que realicen nidos.
Un grupo de vecinos de barrio Colón se las ingenió con un aguilucho. En un edificio de categoría en General Paz tienen un halcón amaestrado y desde la iglesia de Los Capuchinos hicieron consultas a veterinarios. De ahí en adelante, en Córdoba hay ideas de lo más alocadas para tratar de combatir la plaga de palomas que ensucia fachadas, tapa cañerías y genera enfermedades.
“En mi barrio hay un aguilucho que accidentalmente se le escapó a un vecino, y esa fue la solución para sacarlas. No se las ve más por acá”, contó Melisa, de Colón, quien dijo que esa fue la alternativa para que estas aves no sigan anidando en esa zona de la ciudad.
En General Paz se levanta el edificio Miracielos, una de las torres con más categoría que en la cúspide tiene un halcón peregrino para ahuyentar a las palomas. Esta misma idea se evaluó en la gestión de Luis Juez, cuando desde Ambiente se analizó –entre otras opciones– la posibilidad de soltar estas aves en la plaza San Martín para que disminuyera el número de palomas. Principalmente, porque los edificios antiguos son los más afectados por los nidos y desechos que originan estos animales. Vale un caso como ejemplo: en las remodelaciones de la Capilla Doméstica, los obreros que treparon a sacar la caca de palomas llenaron 35 bolsas de consorcio. En esa oportunidad contaron más de 300 aves anidando en la torre.
La problemática se acentúa en los pisos altos, en los edificios con balcones u ochavas que permiten que estas aves actúen en bandadas. “No apliqué nada aún, pero me pasó de llegar un domingo a casa luego de estar durante todo el día afuera, vi una paloma muy cómoda sobre el ventilador. Con el desastre típico que hacen las palomas, me quedé espantado. La verdad me dan mucho asco”, comentó Hernán, un estudiante universitario de Nueva Córdoba.
Además de sufrir la invasión de ratas y murciélagos, el “barrio de los estudiantes” está plagado de estas aves. Algunos optan por dejarlas anidar en macetas vacías y otros por inventar lo que sea necesario para ahuyentarlas. “Yo puse un líquido, algo semejante a la creolina y, por lo menos, no regresaron más”, contó Virginia, una joven que vive por bulevar Illia. “Sí, hay un producto que se llama No Vuela. Nosotras lo pusimos y es buenísimo. No pisó ni una paloma más. Ese producto se consigue en veterinarias. También probamos con tiritas de plástico largas que vuelen”, agregó María Silvina, que con sus hermanas se las ingeniaron para no tener más de estas aves en el balcón de su departamento por avenida Estrada, también en Nueva Córdoba.
Los que son más arriesgados se animan a usar un rifle de aire comprimido o tirar cuetes al aire. “Un bolón explosivo, de los que rebotan. Lo usé en el departamento y las palomas no volvieron más, pero hay que tener cuidado”, comentó Adrián, otro universitario que vive por Buenos Aires.
Desde la Veterinaria Nueva Córdoba, Mabel contó que “es muy frecuente que estudiantes o gente mayor” que vive en esa zona llegue preocupada en busca de algún producto para espantarlas. “Llegan a preguntar porque se les han llenado los colchones de itas (piojos de las palomas) o porque las quieren sacar de una ventana o un balcón. Hasta de una iglesia nos vinieron a pedir por un ahuyentador de sonidos porque ya no saben como más combatirlas”, comentó la mujer. Entre los productos más vendidos está un líquido repelente de estas aves, que cuesta 25 pesos.
También están los equipos que emiten ultrasonidos y que perturban a las aves molestas, aunque no está demostrado que funcionen más que en un corto plazo.
La otra alternativa son esos productos conocidos como bolón, similar a la pirotecnia, que las ahuyenta.
Se utilizan, además, globos, reflectores (luces potentes), cintas de colores, espantapájaros, réplicas de rapaces o de otros predadores, aunque las aves se acostumbran y dejen de temerles.
Los profesionales en el manejo de aves molestas suelen instalar un método más efectivo y duradero para la protección de edificios, que son las mallas. Difieren en tamaño dependiendo si se trata de palomas o gorriones.
Consejos para zafar de las plumíferas
* Se coloca una malla o red en los lugares adonde se suelen posar las aves.
* Alambres tensados en barandas o salientes para que las palomas, para que no se asienten por la inestabilidad que les provoca ese alambre.
* En techos y cornisas, rotores con alambres cuyas puntas tienen pelotitas: por acción del viento, esas estructuras se mantienen en movimiento y evitan que las aves se posen.
* Instalación de un reflector o luz fuerte apuntando a la zona adonde se posan las palomas. Esto provoca que el ambiente se les convierta en algo desagradable y dejen de frecuentarlo.
* Repelentes en las bases y bordes de los edificios altos.
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