24 may 2009

Otro invierno sin agua en Sierras Chicas

Día a Día (24/05/2009)
Otro invierno sin agua en Sierras Chicas



El dique La Quebrada ya está 5,30 metros por debajo del nivel del vertedero, la misma situación que en la crisis de 2004, pero con 2.500 conexiones más que en aquel entonces. Los cortes durante el invierno serían rotativos. E inevitables.
“Estamos sumamente preocupados. La situación que enfrentamos es la misma, o peor, que la del comienzo de la peor crisis hídrica que tuvimos en la zona, en 2004”. El diagnóstico que hacen los responsables de la cooperativas de agua de las principales ciudades de las Sierras Chicas es tremendo, casi catastrófico, al punto que advierten que no quedará otra alternativa que apelar a cortes de agua rotativos en los próximos meses para poder pasar el seco invierno que se avecina.
Es que el dique La Quebrada, la principal fuente de agua cruda de la que se abastecen las localidades de Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza, ya está 5,30 metros por debajo del nivel del vertedero, cuando en años anteriores, al comienzo del invierno, la bajante no superaba los dos metros. “El nivel desde el que parte el dique en el comienzo de la época seca es muy bajo, al igual que en la peor crisis que tuvimos en 2004, cuando llegó a octubre con un registro de 10 metros por debajo del vertedero”, le dijo a Día a Día Marcelo Fassi, titular de la Cooperativa de Agua Potable de Río Ceballos. “El problema es que ahora tenemos 2.500 conexiones más que en aquel entonces, por lo que el consumo regular es mucho mayor, con lo cual podemos llegar a superar la marca de los 10 metros”, pronosticó el directivo.
Raúl Hoya, presidente de la Cooperativa de Agua de Unquillo y Mendiolaza, carga con el mismo pesimismo a cuestas. “El dique baja a razón de dos o tres centímetros por día, en un año en el que el déficit de precipitaciones es de unos 200 milímetros: entre enero y mayo deberían haber caído 514 milímetros de lluvia, y sólo hubo 310”, explicó. “Y para lo que resta del invierno, las precipitaciones esperadas son casi nulas”, lamentó Hoya.
Cortes diarios. Con semejante panorama, los titulares de las entidades responsables de garantizar el servicio de agua potable en las Sierras Chicas ya abren el paraguas, y adelantan que “muy posiblemente” sea necesario echar mano a cortes en el suministro domiciliario de las tres ciudades.
“Hoy todavía no tenemos problemas, pero ya hemos diagramado un cronograma de cortes rotativos para aplicarlo cuando llegue el momento”, aseguró Hoya. Si no llueve en los próximos meses, las interrupciones en el servicio podrían comenzar en agosto o setiembre, cuando –se espera– comenzará a escasear seriamente la disponibilidad de agua en La Quebrada.
“Buscaremos que los cortes se enmarquen en un plan coordinado, dándole aviso a los vecinos. Se harían por barrios o secciones, y de algunas horas por día, con la idea de generar algún ahorro que nos permita pasar el invierno”, señaló Fassi.
En las tres localidades de Sierras Chicas viven 45 mil personas, quienes reciben el servicio a través de 11.500 conexiones domiciliarias.

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