2 dic 2009

Desmonte, sequía y tormentas...

Diario Democracia de Villa Dolores (02/12/2009)
La madre naturaleza pasó factura





No es desconocido por la gente de la zona, la tala indiscriminada que sufren las regiones destinadas para el cultivo. Desde hace años, poco a poco se fue produciendo un fenómeno deplorable, la deforestación indiscutible de árboles y bosques autóctonos que contribuían al cuidado del suelo y a la protección como pantallas ante ventiscas, que afectan directamente a poblaciones ubicadas en esos lugares. Lo que sucedió en esta localidad, según datos de lugareños, fue el paso de un tornado, anticipado con caída de piedras en seco del tamaño de pelotas de tenis. En solo 7 a 10 minutos de la madrugada de ayer, desbastó todo lo que se cruzaba por su paso. En forma zigzagueante levantó techos, tiro postes de luz, además de lastimar a varias personas. Pero lo peor, es que castigó en general a los que menos tienen, amen de la pérdida del trabajo agrícola. Dentro de este marco catastrófico, nada se puede hacer, comentaba un vecino, «solo había que esperar su paso y los minutos parecían eternos». La naturaleza había pasado su factura, el nulo respeto que le tienen, fue el crepúsculo de su intensidad indescriptible, provocando consecuencias y experiencias que nadie quiere sufrir. Por eso, de vez en cuando, la madre naturaleza, muestra su fortaleza ilimitada, y detrás de ello, el hombre que se considera superior dentro de su miseria, sigue lastimando las entrañas de su suelo.
No bien nos contactamos con esta comunidad, entrevistamos a una vecina que reside frente a la plaza principal, Fabiana Ruiz y nos decía: «De pronto se vino un viento como un tornado y las piedras que caían eran enorme, del tamaño de una pelota de tenis. A las cuatro horas aún se podía apreciar las piedras. Hubo casas que se cayeron y techos que volaron, por lo que todo el pueblo estaba revolucionado. Fue impresionante, entre siete a diez minutos, pero para nosotros fue eterno, ya que semejante piedra nunca había visto en mi vida. La misma se amontonó entre 25 a 30 centímetros contra la pared y todos los vidrios destruídos».
La presidenta comunal María Romero declaraba a DEMOCRACIA: «A las 23.30 comenzó la lluvia con viento fuerte, que duró muy poco, pero fue fatal, ya que cayeron piedras del tamaño de un huevo de gallina. El viento era como una especie de tornado, llevándose chapas de los techos, tirando casas completamente. No quedaron vidrios sanos. Fue un desastre lo que ocurrió. Felizmente no se dio ninguna desgracia personal, pero sí vecinos golpeados por la piedra».
Todo ocurrió en San Vicente y en algunos parajes, destacando la funcionaria que la desforestación provocó que se viera una enorme cantidad de agua en algunas de sus calles, incluso la cancha de fútbol totalmenete cubierta del liquido elemnto, «todo producto de los kilómetros de campos sin ninguna cortina verde».
Finalmente nos informaba que el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia estaba enviando ayuda para los damnificados. Se destacó que fue importante la labor policial y de los bomberos voluntarios de Villa Dolores.
Un agricultor nos manifestaba que la producción que existía, en gran parte se ha perdido.

Ver Noticia On Line

La Voz del Interior - Edición Electrónica (02/12/2009)
- Fuerte temporal en la población de San Vicente
- Tormenta en el paraje El Quebracho
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- Daños materiales en Matorrales
- Lluvia en la Capital

Día a Día (02/12/2009)
- Temporal de agua y granizo en Traslasierra y Calamuchita

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