22 dic 2006

Salud descarta un virus

La Voz del Interior (22/12/2006)
Salud descarta un virus mortal en la reserva de monos carayá

La clausuraron. Buscan precisar qué tipo de herpes mató a dos primates en abril.
Tío Mayú. El centro de rehabilitación de monos carayá ubicado sobre la ruta E- 66, en el límite de los departamentos Colón-Punilla y a 11 kilómetros de La Cumbre, atraviesa su momento más crítico desde que comenzara sus actividades, 13 años atrás.
El lugar, atractivo turístico de habitual acceso al público a 1.400 metros de altura, fue clausurado el 14 de diciembre por la Agencia Córdoba Ambiente, luego de la muerte, en abril pasado y aún no aclarada científica y oficialmente, de dos de los 86 monos que alberga la reserva.
La posibilidad de que la causa de la muerte haya sido un virus mortal para el hombre, el herpes viral B, motivó la consulta de este diario a Gabriel Peretta, secretario de Atención de las Personas del Ministerio de Salud de la Provincia. Si un mono infectado con este virus muerde a una persona, las consecuencias pueden ser mortales.
"Nosotros dimos instrucciones para impedir el contacto de los animales con las personas, tanto visitantes como sus cuidadores. Lo hicimos en forma preventiva, pues no tenemos indicios y descartamos que se trate de un virus mortal para el ser humano: Córdoba Ambiente y Senasa recogerán muestras de sangre de los animales y harán los análisis pertinentes", enfatizó el funcionario.
Según Peretta, existen unas 35 clases de herpes virus y el viral B es mortal para el hombre, transmitiéndose por mordeduras o manipulación de tejidos en laboratorio. Es estudiado desde 1960 y, de 20 contagios registrados en el mundo, sólo hubo tres sobrevivientes: el virus se incuba en el ser humano en un período de tres a 27 días.
Por su parte, el presidente de la Agencia Córdoba Ambiente, Horaldo Senn, en diálogo con este diario, puntualizó: "El 26 de abril hicimos una inspección al centro de rehabilitación y le exigimos la documentación faltante en un plazo de 15 días. Nunca cumplieron. El pasado 14 de este mes lo clausuramos, indicándoles que no podía ser público en estas condiciones. En relación al supuesto virus que mató los animales, Senasa evalúa que no es mortal; me informaron que uno murió por traumatismo de cráneo y el otro por infección pulmonar".
Tanto Peretta como Senn coincidieron que nadie había ordenado una cuarentena a los moradores del lugar.
Hoy por hoy, el único centro de rehabilitación del mono carayá está en peligro. La falta de ingresos por las entradas turísticas, desde la clausura el 14 de este mes, pone en riesgo la subsistencia de los 84 ejemplares que quedan en la reserva.
Por otra parte, la inexistencia en 10 meses de un informe científico determinante sobre la muerte de dos primates en abril de este año es preocupante. Miles de personas concurren anualmente al lugar y aún se ignoran las causas que mataron a los dos ejemplares, mas allá que se evalúe no se trataría de un virus mortal para el hombre.

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