28 dic 2006
Preocupa demora en inauguración
2:23 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Mañana de Córdoba (28/12/2006)
Preocupa a cartoneros demora en inauguración
“La ilusión de comenzar a trabajar en nuestro propio negocio se vio opacada. Tenemos la balanza, los containers, la mercadería acumulada, los uniformes, y el total apoyo de la papelera, pero la Municipalidad no está cumpliendo y eso nos afecta económicamente”, reclamó Pablo Silva, presidente de la cooperativa de carreros Sangre y Sol.
Y es que, en el marco de un acuerdo firmado por esa agrupación de trabajadores, el Movimiento Nacional de Cartoneros y Recicladores (MO.CA.R), una importante empresa papelera y la Dirección de Desarrollo Territorial y Economía Social de la Municipalidad de Córdoba, hoy a las 11 debería haberse inaugurado la primer planta de reciclaje dirigida por cartoneros.
Sin embargo, pese a que la Comuna así lo había anunciado a través de un comunicado colgado en su página web, la apertura de la planta se suspendió por demoras en la habilitación del lugar.
Los trabajadores, algo molestos, señalaron que “la Municipalidad no está cumpliendo con su parte, no pintó el lugar ni tampoco dio la habilitación. La empresa papelera, que asumió un compromiso social, giró dinero para el alquiler del lugar, puso la balanza electrónica, confeccionó los trajes, también está esperando, y nosotros tenemos todo el material acumulado y estamos perdiendo plata”.
“De una manera u otra, nosotros vamos a inaugurar la semana que viene, porque esto nos parece una falta de respeto, hay mucha gente que está esperando trabajar”, indicó Marcelo Iturbe, representante del MO.CA.R en Córdoba.
Más de 120 beneficiarios
Más de 120 familias que se dedican a la recolección, acopio, clasificación y venta de residuos sólidos urbanos en distintos puntos de la ciudad de Córdoba, se verán beneficiadas con la planta de reciclaje que funcionará en barrio San Vicente y que será manejada, en su totalidad, por miembros de la cooperativa de cartoneros “Sangre y Sol”.
Se trata de miles de personas que, durante años, se desempeñaron en condiciones insalubres y bajo situaciones de explotación y dependencia, y que ahora podrán ingresar al circuito formal de trabajo debido a que se encuentran asociados cooperativamente.
Y es que, justamente, uno de los objetivos por los que se conformó la agrupación de cartoneros fue lograr un sistema equitativo de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos, que los reconozca como trabajadores formales de una industria que mueve millones de pesos al año en todo el país.
“Buscamos que todos los cartoneros de la ciudad se organicen en cooperativas, esto permitirá desarrollar las tareas en condiciones optimas y bregar por ingresos más justos. El desafío es pasar de un trabajo informal, a una tarea organizada en la que hay que trabajar coordinadamente”, señaló Iturbe.
Convencidos de que se trata de un negocio que tiende a crecer cada vez más y que, bien organizado, resulta altamente rentable, los cartoneros aseguraron que la semana que viene la planta de acopio situada en la calle French comenzará a funcionar como sea.
Y aunque en un principio el negocio se limitará sólo al acopio y la clasificación, el propósito final es reciclar los materiales.
Para los socios, mejores precios
Valiéndose del mayor poder de negociación sobre los precios de los materiales colectados que les da tener su propia planta de acopio, los miembros de “Sangre y Sol” optaron por comprar el kilo de material a los cartoneros que se acerquen a la planta, a un precio más elevado que el que establece el mercado hoy. Asimismo, se decidió que a las 120 familias socias, que colaboran con un fondo cooperativo, se les pagará más aún. “Por ejemplo, el papel blanco a los no socios se les pagará 0,55 centavos mientras que a los socios a 0,60. El cartón se comprará a los primeros a 0,28 y a los segundos a 0,30 centavos”, indicó Pablo Silva, presidente de la cooperativa Sangre y Sol.
“Desde un comienzo también defendimos las condiciones en las que los trabajadores debían desempeñarse, y por eso, en la planta los compañeros realizarán sus tareas con uniformes adecuados y en un medio que está totalmente habilitado”, señaló Iturbe.
Para muchos trabajadores de la basura, la puesta en marcha de la planta de acopio es una manera de reivindicar el trabajo y funciona como un mecanismo de inclusión.
Ver Nota On Line (el link pudo haber cambiado)
Preocupa a cartoneros demora en inauguración
“La ilusión de comenzar a trabajar en nuestro propio negocio se vio opacada. Tenemos la balanza, los containers, la mercadería acumulada, los uniformes, y el total apoyo de la papelera, pero la Municipalidad no está cumpliendo y eso nos afecta económicamente”, reclamó Pablo Silva, presidente de la cooperativa de carreros Sangre y Sol.
Y es que, en el marco de un acuerdo firmado por esa agrupación de trabajadores, el Movimiento Nacional de Cartoneros y Recicladores (MO.CA.R), una importante empresa papelera y la Dirección de Desarrollo Territorial y Economía Social de la Municipalidad de Córdoba, hoy a las 11 debería haberse inaugurado la primer planta de reciclaje dirigida por cartoneros.
Sin embargo, pese a que la Comuna así lo había anunciado a través de un comunicado colgado en su página web, la apertura de la planta se suspendió por demoras en la habilitación del lugar.
Los trabajadores, algo molestos, señalaron que “la Municipalidad no está cumpliendo con su parte, no pintó el lugar ni tampoco dio la habilitación. La empresa papelera, que asumió un compromiso social, giró dinero para el alquiler del lugar, puso la balanza electrónica, confeccionó los trajes, también está esperando, y nosotros tenemos todo el material acumulado y estamos perdiendo plata”.
“De una manera u otra, nosotros vamos a inaugurar la semana que viene, porque esto nos parece una falta de respeto, hay mucha gente que está esperando trabajar”, indicó Marcelo Iturbe, representante del MO.CA.R en Córdoba.
Más de 120 beneficiarios
Más de 120 familias que se dedican a la recolección, acopio, clasificación y venta de residuos sólidos urbanos en distintos puntos de la ciudad de Córdoba, se verán beneficiadas con la planta de reciclaje que funcionará en barrio San Vicente y que será manejada, en su totalidad, por miembros de la cooperativa de cartoneros “Sangre y Sol”.
Se trata de miles de personas que, durante años, se desempeñaron en condiciones insalubres y bajo situaciones de explotación y dependencia, y que ahora podrán ingresar al circuito formal de trabajo debido a que se encuentran asociados cooperativamente.
Y es que, justamente, uno de los objetivos por los que se conformó la agrupación de cartoneros fue lograr un sistema equitativo de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos, que los reconozca como trabajadores formales de una industria que mueve millones de pesos al año en todo el país.
“Buscamos que todos los cartoneros de la ciudad se organicen en cooperativas, esto permitirá desarrollar las tareas en condiciones optimas y bregar por ingresos más justos. El desafío es pasar de un trabajo informal, a una tarea organizada en la que hay que trabajar coordinadamente”, señaló Iturbe.
Convencidos de que se trata de un negocio que tiende a crecer cada vez más y que, bien organizado, resulta altamente rentable, los cartoneros aseguraron que la semana que viene la planta de acopio situada en la calle French comenzará a funcionar como sea.
Y aunque en un principio el negocio se limitará sólo al acopio y la clasificación, el propósito final es reciclar los materiales.
Para los socios, mejores precios
Valiéndose del mayor poder de negociación sobre los precios de los materiales colectados que les da tener su propia planta de acopio, los miembros de “Sangre y Sol” optaron por comprar el kilo de material a los cartoneros que se acerquen a la planta, a un precio más elevado que el que establece el mercado hoy. Asimismo, se decidió que a las 120 familias socias, que colaboran con un fondo cooperativo, se les pagará más aún. “Por ejemplo, el papel blanco a los no socios se les pagará 0,55 centavos mientras que a los socios a 0,60. El cartón se comprará a los primeros a 0,28 y a los segundos a 0,30 centavos”, indicó Pablo Silva, presidente de la cooperativa Sangre y Sol.
“Desde un comienzo también defendimos las condiciones en las que los trabajadores debían desempeñarse, y por eso, en la planta los compañeros realizarán sus tareas con uniformes adecuados y en un medio que está totalmente habilitado”, señaló Iturbe.
Para muchos trabajadores de la basura, la puesta en marcha de la planta de acopio es una manera de reivindicar el trabajo y funciona como un mecanismo de inclusión.
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