4 dic 2006

Contaminante radiactivo

9:44 a.m. | Publicado por Eco Sitio | | Editar entrada
La Mañana de Córdoba (04/12/2006)
Denuncian presencia de contaminante radiactivo

Se trata del polonio 210, uno de los contaminantes que tiene la mina de uranio de Los Gigantes y el “Chichón” de Dioxitek en barrio Alta Córdoba. Es la misma sustancia que se usó para envenenar al ex espía ruso Alexander Litvinenko.
La Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM) denunció que uno de los contaminantes que se encuentra en el depósito subterráneo de Dioxitec SA de barrio Alta Córdoba y en la mina de uranio de Los Gigantes, es el polonio 210. Se trata de una sustancia altamente tóxica que es la que se utilizó para envenenar al ex espía ruso Alexander Litvinenko”.
El titular de FUNAM, Raúl Montenegro, brindó la información y agregó que el polonio 210 está “en todas las minas de uranio de Argentina, y por lo tanto además de Los Gigantes, en Sierra Pintada y Malargüe en Mendoza”.
FUNAM denunció que la mina de uranio de Los Gigantes “tiene más de 4 millones de toneladas de residuos minerales con uranio” y que las lluvias “pueden lavar esas colas de mineral y llevar contaminantes a la cuenca alta del río San Antonio”.
Montenegro indicó que en Los Gigantes “hay 1.000.000 de toneladas de estériles con 59 partes por millón de uranio [ppm], 600.000 toneladas de marginales con 120 ppm de uranio, y 2.400.000 toneladas de cola de mineral con 84 ppm de uranio”. Sostuvo que por tratarse de una mina “la CNEA y sus contratistas concentraron uranio a valores más altos que los hallados en las sierras” y que por lo tanto “además de uranio también hay allí residuos de radio 226, radón 222 y polonio 210”.
Montenegro sostuvo que el polonio 210 “es un derivado de otro material radiactivo natural, el radón 222”. Agregó que es muy peligroso “por tres motivos: porque mantiene su radiactividad por mucho tiempo (vida media de 138,3 días), porque libera partículas alfa con gran contenido de energía, muy dañinas a corta distancia para las células vivas, y porque es químicamente tóxico”.
El ambientalista indicó que la autoridad regulatoria nuclear “encontró valores altos de uranio en el arroyo de la mina en Los Gigantes, e incluso una mayor acidez por culpa de las colas de mineral sin tratar”. Agregó que en los depósitos de residuos de Los Gigantes y Alta Córdoba “hay uranio residual pero también sus derivados, radio 226, radón 222 y polonio 210. Sin embargo nunca se hizo una auditoría independiente para saber qué cantidad hay de cada radioisótopo”.
“En el mundo entero existe preocupación por el polonio 210 hallado en aviones y un restaurante, pero la Provincia y la Municipalidad de Córdoba ni siquiera saben la cantidad total de uranio, radio, radón y polonio radiactivos que concentró CNEA en las sierras y en la ciudad, ni cuándo serán tratados”.

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