26 dic 2006

Luz y sombra

La Voz del Interior (24/12/2006)
Luz y sombra en el problema eléctrico

La situación de emergencia que vive el país en materia de provisión de electricidad debe servir de estímulo para potenciar una capacidad energética para cuyo incremento el país tiene sobradas posibilidades.
El verano despunta complicado en materia energética. Reiterados cortes del servicio eléctrico en las grandes ciudades, coincidentes con el ascenso de la temperatura, pronostican dificultades considerables, aunque nadie se atreve a pronosticar la magnitud de los problemas. Frente a esto, el Gobierno nacional está adoptando providencias y formulando consejos que apuntan a paliar los inconvenientes que pueden avecinarse.
Entre las primeras, se cuentan la autorización a los prestadores del servicio de distribución de energía, sea a nivel provincial o municipal, a ofrecer al Organismo Encargado del Despacho (OED) la operación de unidades de generación que no están habilitadas para la operación comercial. Esto incluye la puesta en marcha de equipos que han salido de uso entre ocho y diez años atrás.
Entre las recomendaciones, se cuenta la dirigida a las grandes empresas y centros comerciales, como supermercados y shoppings, para que no activen al máximo sus aparatos de aire acondicionado. De hecho, esta actitud está siendo implementada de manera espontánea por algunos de esos centros.
Pero el obstáculo mayor es de carácter estructural y no pasa tanto por las adversidades climáticas como por cierta negación a ver la realidad, fundada en consideraciones oportunistas de parte de quienes tienen a su cargo la planificación y regulación del servicio.
Por ejemplo, el Ente Regulador de los servicios públicos (Enre), preguntado por los directivos del Centro de Educación al Consumidor (CEC) para que respondiera sobre el actual estado de los servicios eléctricos y los posibles cortes que pudieran sufrir los usuarios, respondió que no existe crisis energética. La falta de mantenimiento de las líneas de media y baja tensión (correspondientes a las distribuidoras) y los calores reinantes (que a la vez corresponden a momentos de altos consumos) provocan que se produzcan cortes por el recalentamiento de los cables.
No hay crisis, según esas manifestaciones, pero los cortes y apagones continuarán. ¿Entonces? La crisis se convierte así en una cuestión semántica: no existe como vocablo, pero se verifica en la práctica.
Es evidente que no es sólo el verano lo que induce al mayor número de apagones, sino que la demanda energética debe estar acorde con la mayor o menor necesidad que el país tiene de ella y ésta hoy se encuentra por encima de la que el sistema eléctrico integrado está en condiciones de satisfacer.
La reactivación económica que Argentina experimenta y que toca índices inusitados, estimula la demanda y el consumo de energía y este incremento choca con la desinversión en esas estructuras y con el abandono en que se las dejara durante más de una década, cuando nuestro original proyecto de país, que fuera grande y proporcionado a sus recursos y a sus aspiraciones históricas, se redujo al nivel de un apéndice enano del sistema-mundo.
La construcción de una tercera central nuclear y el aprovechamiento de todas las otras fuentes generadoras de energía, más el lanzamiento de un ambicioso programa de potenciación energética es probable que saquen al país de la actual situación, en unos pocos años. Pero las empresas generadoras advierten, con razón, que el considerable atraso tarifario que acumulan desde la devaluación de 2002 les impide encarar inversiones de envergadura como las que son cada vez más necesarias. Y el mismo atraso alienta un consumo desmedido, que no hace más que agravar el problema.
Todo indica, entonces, que habrá que remar contra las insuficiencias del sistema eléctrico, haciéndonos a la idea de que cualquier programación a futuro deberá estar sostenida por una visión estratégica de gran aliento.
Frente a la emergencia (si es que no se desea utilizar la palabra crisis, que hiere a los oídos sensibles) bueno será que el público usuario tome todas las providencias del caso y extreme sus esfuerzos para ahorrar electricidad. Seguir los consejos oficiales para un uso eficaz de la energía es una manera de acoplarse a esa aspiración.

Ver Nota On Line (el link pudo haber cambiado)

0 comentarios:

Buscar este blog

Blog Archive

Temas

Archivo de Blogs