29 sept 2009
Un intento para que las maras no se extingan
7:59 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (29/09/2009)
Un intento para que las maras no se extingan
La autóctona liebre criolla casi desapareció de Córdoba. Día atrás, Ambiente liberó varias en el sur para tratar de reestablecerla.
Las maras (o liebres criollas) poblaban gran parte del territorio cordobés. Pero hoy, como otras varias especies autóctonas, están casi extinguidas. En ese marco, empezó a ensayarse una experiencia de reintroducción en su hábitat natural.
Días atrás, en la Reserva Forestal Natural Ralicó, ubicada en el extremo sur cordobés –a 25 kilómetros de Villa Huidobro– sobre el área conocida como Corredor Biogeográfico del Caldén, la Secretaría de Ambiente de la Provincia llevó a cabo, por primera vez, un operativo de liberación de 29 maras.
Se trata de una especie exclusiva de Argentina, que se encuentra extinguida en esta zona. Su reintroducción se realizó en un campo particular, que tiene un convenio de conservación con el Estado provincial como Reserva Forestal y que cuenta con 10.500 hectáreas, por lo que se constituye en un espacio propicio para la preservación y reproducción de la especie.
En la liberación participaron técnicos y funcionarios de Ambiente de las provincias de Córdoba y La Pampa.
Según informó Ambiente, las maras que fueron reintroducidas en la zona del caldenal (especie arbórea característica de la zona) provenían de un zoológico cercano a Jesús María, propiedad de un privado que, tras decidir no continuar con la actividad, solicitó el retiro de los animales. Cada animal fue revisado y desparasitado, previo a su traslado, en una tarea conjunta de técnicos de la Dirección de Recursos Naturales de la Provincia, personal del Zoológico Tatú Carreta (de Punilla) y del Zoológico de Córdoba.
La mara en Córdoba. Es un roedor (el segundo de mayor tamaño en la Argentina luego del carpincho), de cuerpo comprimido lateralmente, de patas largas y cabeza grande y angulosa. Forma grandes colonias de hasta 50 ejemplares, se refugia en cuevas subterráneas y tiene hábitos diurnos.
En Argentina la mara habitaba desde la provincia de Santa Cruz hasta Catamarca. Hoy, en Córdoba pueden hallarse poblaciones muy reducidas y totalmente fragmentadas –según el área de Recursos Naturales de la Provincia– sólo en la costa oeste de la laguna Mar Chiquita o en los alrededores de las Salinas Grandes, y en algunos arbustales del oeste cordobés. Pero ubicar una es todo un hallazgo.
El caldenal. El Corredor Biogeográfico del Caldén fue creado en el año 2003 por decreto provincial. Comprende unas 665.000 hectáreas distribuidas en el Departamento General Roca, en el suroeste de nuestra provincia, sobre el límite con las provincias de San Luis y La Pampa.
El caldén es un árbol de linaje subtropical y de presencia exclusiva en Argentina. Hoy ocupa en Córdoba unas 50.000 hectáreas, presentándose en estado fragmentado, alternándose entre parches de bosques, tierras cultivadas y campos abandonados. Un enclave importante en Córdoba es el de 40.000 hectáreas de bosque que quedan en ese extremo suroeste. Otro relicto destacado se encuentra sobre el margen sur del Río Popopis (Quinto) y cubre unas 10.000 hectáreas.
Pero a principios del siglo pasado en Córdoba había tres millones de hectáreas con presencia de esta especie. El caldén también se vio reducido drásticamente por el enorme desmonte que sufrió esta provincia.
La Reserva Ralicó. A partir de la firma del primer convenio de conservación con un privado, propietario de una estancia, se decretó en 2003 la creación de la Reserva Forestal Natural Ralicó. En su artículo 9, el decreto 891 prevé la eximición total o parcial de la obligación tributaria correspondiente al Impuesto Inmobiliario Rural a los inmuebles ubicados en ese Corredor Biogeográfico del Caldén, por ser declarado Área Natural.
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Especies en riesgo de extinción en Córdoba
Entre las especies de fauna autóctona en riesgo de extinción de Córdoba –según un resumen de la Secretaría de Ambiente– figuran:
Guanaco: camélido que habitó todos los ambientes cordobeses, salvo los espesos bosques chaqueños. Sobreviven unas pocas tropillas en el noroeste provincial, en inmediaciones de las Salinas Grandes.
Lobito de río: mustélido que habita algunos ríos serranos, ya en muy escaso número.
Zorro colorado de Achala: es el zorro de mayor tamaño de nuestra provincia y habita sólo en las Sierras Grandes. Es una subespecie endémica y de distribución muy restringida.
Gato del monte: felino que habitaba toda la provincia, en montes y arbustales. Actualmente sobrevive en escaso número.
Aguará guazú: gran cánido que habitó buena parte de la provincia, prácticamente extinguido. Se lo redescubrió en los bañados del río Dulce y costas de Mar Chiquita, en muy escaso número.
Corzuela: único ciervo autóctono que sobrevive en Córdoba, ante la ya extinción del venado de las pampas. Hay pocos ejemplares en las zonas de bosques serranos.
Pichiciego menor: el más pequeño de nuestros armadillos y vive, ya en escaso número, en los arenales del sur y oeste de Córdoba.
Cardenal amarillo: especie que por la cacería comercial y modificación del ambiente quedó al borde de la extinción en esta provincia.
Loro hablador: sobrevive, pero en escaso número, en bosques del norte y oeste de Córdoba.
Carpintero negro lomo crema y carpintero negro: pájaros que la desaparición del bosque chaqueño y serrano ha hecho disminuir notablemente, ya que no se adaptan a la modificación ambiental.
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Un intento para que las maras no se extingan
La autóctona liebre criolla casi desapareció de Córdoba. Día atrás, Ambiente liberó varias en el sur para tratar de reestablecerla.
Las maras (o liebres criollas) poblaban gran parte del territorio cordobés. Pero hoy, como otras varias especies autóctonas, están casi extinguidas. En ese marco, empezó a ensayarse una experiencia de reintroducción en su hábitat natural.
Días atrás, en la Reserva Forestal Natural Ralicó, ubicada en el extremo sur cordobés –a 25 kilómetros de Villa Huidobro– sobre el área conocida como Corredor Biogeográfico del Caldén, la Secretaría de Ambiente de la Provincia llevó a cabo, por primera vez, un operativo de liberación de 29 maras.
Se trata de una especie exclusiva de Argentina, que se encuentra extinguida en esta zona. Su reintroducción se realizó en un campo particular, que tiene un convenio de conservación con el Estado provincial como Reserva Forestal y que cuenta con 10.500 hectáreas, por lo que se constituye en un espacio propicio para la preservación y reproducción de la especie.
En la liberación participaron técnicos y funcionarios de Ambiente de las provincias de Córdoba y La Pampa.
Según informó Ambiente, las maras que fueron reintroducidas en la zona del caldenal (especie arbórea característica de la zona) provenían de un zoológico cercano a Jesús María, propiedad de un privado que, tras decidir no continuar con la actividad, solicitó el retiro de los animales. Cada animal fue revisado y desparasitado, previo a su traslado, en una tarea conjunta de técnicos de la Dirección de Recursos Naturales de la Provincia, personal del Zoológico Tatú Carreta (de Punilla) y del Zoológico de Córdoba.
La mara en Córdoba. Es un roedor (el segundo de mayor tamaño en la Argentina luego del carpincho), de cuerpo comprimido lateralmente, de patas largas y cabeza grande y angulosa. Forma grandes colonias de hasta 50 ejemplares, se refugia en cuevas subterráneas y tiene hábitos diurnos.
En Argentina la mara habitaba desde la provincia de Santa Cruz hasta Catamarca. Hoy, en Córdoba pueden hallarse poblaciones muy reducidas y totalmente fragmentadas –según el área de Recursos Naturales de la Provincia– sólo en la costa oeste de la laguna Mar Chiquita o en los alrededores de las Salinas Grandes, y en algunos arbustales del oeste cordobés. Pero ubicar una es todo un hallazgo.
El caldenal. El Corredor Biogeográfico del Caldén fue creado en el año 2003 por decreto provincial. Comprende unas 665.000 hectáreas distribuidas en el Departamento General Roca, en el suroeste de nuestra provincia, sobre el límite con las provincias de San Luis y La Pampa.
El caldén es un árbol de linaje subtropical y de presencia exclusiva en Argentina. Hoy ocupa en Córdoba unas 50.000 hectáreas, presentándose en estado fragmentado, alternándose entre parches de bosques, tierras cultivadas y campos abandonados. Un enclave importante en Córdoba es el de 40.000 hectáreas de bosque que quedan en ese extremo suroeste. Otro relicto destacado se encuentra sobre el margen sur del Río Popopis (Quinto) y cubre unas 10.000 hectáreas.
Pero a principios del siglo pasado en Córdoba había tres millones de hectáreas con presencia de esta especie. El caldén también se vio reducido drásticamente por el enorme desmonte que sufrió esta provincia.
La Reserva Ralicó. A partir de la firma del primer convenio de conservación con un privado, propietario de una estancia, se decretó en 2003 la creación de la Reserva Forestal Natural Ralicó. En su artículo 9, el decreto 891 prevé la eximición total o parcial de la obligación tributaria correspondiente al Impuesto Inmobiliario Rural a los inmuebles ubicados en ese Corredor Biogeográfico del Caldén, por ser declarado Área Natural.
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Especies en riesgo de extinción en Córdoba
Entre las especies de fauna autóctona en riesgo de extinción de Córdoba –según un resumen de la Secretaría de Ambiente– figuran:
Guanaco: camélido que habitó todos los ambientes cordobeses, salvo los espesos bosques chaqueños. Sobreviven unas pocas tropillas en el noroeste provincial, en inmediaciones de las Salinas Grandes.
Lobito de río: mustélido que habita algunos ríos serranos, ya en muy escaso número.
Zorro colorado de Achala: es el zorro de mayor tamaño de nuestra provincia y habita sólo en las Sierras Grandes. Es una subespecie endémica y de distribución muy restringida.
Gato del monte: felino que habitaba toda la provincia, en montes y arbustales. Actualmente sobrevive en escaso número.
Aguará guazú: gran cánido que habitó buena parte de la provincia, prácticamente extinguido. Se lo redescubrió en los bañados del río Dulce y costas de Mar Chiquita, en muy escaso número.
Corzuela: único ciervo autóctono que sobrevive en Córdoba, ante la ya extinción del venado de las pampas. Hay pocos ejemplares en las zonas de bosques serranos.
Pichiciego menor: el más pequeño de nuestros armadillos y vive, ya en escaso número, en los arenales del sur y oeste de Córdoba.
Cardenal amarillo: especie que por la cacería comercial y modificación del ambiente quedó al borde de la extinción en esta provincia.
Loro hablador: sobrevive, pero en escaso número, en bosques del norte y oeste de Córdoba.
Carpintero negro lomo crema y carpintero negro: pájaros que la desaparición del bosque chaqueño y serrano ha hecho disminuir notablemente, ya que no se adaptan a la modificación ambiental.
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