7 sept 2007
Acopio de cereales en Hernando
7:15 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (07/09/2007)
Cómo afecta al ambiente el acopio de cereales en Hernando
Cuando llega la época de cosecha –entre marzo y agosto– Hernando ve “nevar” varias veces al mes. El tema es que esos “copos” no son fríos, no se disuelven ni forman paisajes de ensueño, como los vistos el 9 de julio pasado, sino que pululan en el ambiente y se depositan en puertas, ventanas, veredas y en el organismo de cada habitante de la ciudad, en especial los que viven en las zonas cercadas a los silos que, en plena zona urbana y muy cerca del centro de la ciudad, están ubicados a la vera de la ruta 6.
El tema es de conversación permanentemente en el boca a boca pero nunca, hasta ahora, había sido plasmado en un informe. Fueron los alumnos de primer año del Instituto Divino Corazón que con la coordinación de la profesora Alejandra Sebastiani se dedicaron a analizarlo y lo presentaron en la instancia zonal de la Feria de Ciencias y Tecnología. El trabajo fue seleccionado y competirá en la feria provincial que en los próximos días se realizará en Córdoba.
Los resultados generales
“De acuerdo con los resultados obtenidos, son varias las personas que aseguran que en determinados momentos del día importantes cantidades de deshechos quedan diseminados en las banquinas de las calles, en las veredas, jardines y en las entradas de las casas. En la época de cosecha gruesa se sienten invadidos por el polvo y por gruesas partículas que parecen una tenue nevada”, dice la conclusión del trabajo al que tuvo acceso este diario.
“Todas las personas encuestadas –unas 120– manifestaron tener uno o más síntomas en esa situación, como falta de aire, obstrucción nasal, silbidos en el pecho, picazón de nariz y ojos, entre otros, derivados de esta exposición. Este trabajo de investigación se considera el primer estudio que se realiza en Hernando respecto al acopio de granos y las posibles afecciones que puede ocasionar a las personas. No pedimos que se erradiquen las plantas porque eso sería prácticamente imposible, pero sí esperamos que los encargados compren o instalen las maquinarias necesarias para evitar que se produzca la contaminación. Para no continuar afectando la salud y el medio ambiente, todo ciudadano debe ser consciente de la contaminación que esto produce como así también del daño que se produce cada vez que respira”, expresa el informe.
Qué dicen las empresas
En el trabajo de investigación se deja en claro que la situación no es exclusiva de Hernando sino que se repite en la mayoría de las localidades que tienen silos de acopio que quedaron en medio de la zona urbana y que en general, en la última década crecieron en su capacidad de almacenamiento. La zona del ferrocarril que atraviesa cada localidad fue el lugar elegido por estos emprendimientos, para estar a mano del transporte por tren. Esos lugares, en general, están en medio de las zonas urbanas. En Hernando, de las empresas ubicadas en la zona urbana a la vera de la ruta, sólo una aceptó responder las preguntas de los estudiantes.
La otra empresa argumentó falta de tiempo y precisó que antes debía consultar con sus abogados.
En la entrevista mantenida con personal de Aceitera General Deheza (AGD), Guillermo Defagot expresó que la empresa cuenta en Hernando con cuatro silos de 1.700 toneladas cada uno, una planta de cuatro silos con 250 toneladas cada uno y uno de 3.500 toneladas. Según los registros, esta empresa mueve por año unas 200 mil toneladas de cereal. En cuanto a las tareas de secado del cereal, AGD cuenta con una sola ya que los silos se comunican subterráneamente entre sí. Los responsables de la empresa a nivel local aseguran que desde allí no hay voladura de polvillo porque se cuenta con extractor.
Qué dicen las autoridades
El intendente Sergio Coser admitió ante los alumnos del Instituto Divino Corazón conocer la problemática porque vive a una cuadra y media del lugar y porque en varias ocasiones ha encontrado restos de cascarillas en el patio de su casa.
Al ser consultado sobre si se han tomado medidas al respecto. Coser respondió: “Técnicos de la Municipalidad junto a técnicos de la Agencia Córdoba Ambiente están visitando las empresas y se les han marcado medidas correctivas que deben ir cumpliendo. Todas están en ese camino. No se puede pedir que de un día para otro inviertan un millón de pesos, que es el monto en el que oscila una vía de solución. Si les exigimos que hagan eso urgente, cierran, lo que se traduciría en pérdidas de fuente de trabajo”, argumentó el intendente.
Pero la duda es si no es en este momento de mayor rentabilidad agropecuaria, cuándo se podrían propiciar esas mejoras.
Mientras, Coser aseguró que debe evaluarse “concienzudamente” el verdadero impacto del polvillo de cereal en la población. Recordó además que el Concejo Deliberante ya aprobó la constitución del Consejo de Medio Ambiente para tratar todo tipo de problemáticas en este rubro.
En cuanto a la legislación actual, Omar Prigione, técnico sanitario de la Municipalidad, ratificó a los alumnos que “hace años que se viene trabajando en coordinación con la Agencia Córdoba Ambiente”. Acotó que “se realizó una auditoría para detectar no solamente fugas sino situaciones internas de trabajo. Hecho esto, se fijaron a las empresas plazos progresivos para el mejoramiento de algunos defectos encontrados. Hoy se ha logrado un porcentaje muy alto de hermeticidad y seguimos avanzando”, apuntó Prigione.
El profesional destacó que según una ordenanza vigente en esta ciudad, en este momento no es factible instalar nuevas plantas de silos en el área urbana.
Qué dicen los médicos
Para la presentación de la investigación, el equipo de trabajo estudiantil también consultó a cinco profesionales médicos de Hernando, en relación a las consecuencias que para la salud podría tener la voladura de polvillo de cereal.
Los médicos después de una amplia exposición teórica sobre alergias y afecciones de ese tipo, reconocen que en Hernando existirían problemas con enfermedades generadas por el polvillo del cereal. Agregan que a la situación de por sí complicada se suma que el asentamiento del cereal en Hernando está en la línea de los vientos y en medio de la población.
Si bien los profesionales admitieron que las alergias pueden provenir de diversas fuentes, aseguran que los casos temporales se agravan considerablemente desde marzo a julio, en coincidencia con la cosecha gruesa.
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Cómo afecta al ambiente el acopio de cereales en Hernando
Cuando llega la época de cosecha –entre marzo y agosto– Hernando ve “nevar” varias veces al mes. El tema es que esos “copos” no son fríos, no se disuelven ni forman paisajes de ensueño, como los vistos el 9 de julio pasado, sino que pululan en el ambiente y se depositan en puertas, ventanas, veredas y en el organismo de cada habitante de la ciudad, en especial los que viven en las zonas cercadas a los silos que, en plena zona urbana y muy cerca del centro de la ciudad, están ubicados a la vera de la ruta 6.
El tema es de conversación permanentemente en el boca a boca pero nunca, hasta ahora, había sido plasmado en un informe. Fueron los alumnos de primer año del Instituto Divino Corazón que con la coordinación de la profesora Alejandra Sebastiani se dedicaron a analizarlo y lo presentaron en la instancia zonal de la Feria de Ciencias y Tecnología. El trabajo fue seleccionado y competirá en la feria provincial que en los próximos días se realizará en Córdoba.
Los resultados generales
“De acuerdo con los resultados obtenidos, son varias las personas que aseguran que en determinados momentos del día importantes cantidades de deshechos quedan diseminados en las banquinas de las calles, en las veredas, jardines y en las entradas de las casas. En la época de cosecha gruesa se sienten invadidos por el polvo y por gruesas partículas que parecen una tenue nevada”, dice la conclusión del trabajo al que tuvo acceso este diario.
“Todas las personas encuestadas –unas 120– manifestaron tener uno o más síntomas en esa situación, como falta de aire, obstrucción nasal, silbidos en el pecho, picazón de nariz y ojos, entre otros, derivados de esta exposición. Este trabajo de investigación se considera el primer estudio que se realiza en Hernando respecto al acopio de granos y las posibles afecciones que puede ocasionar a las personas. No pedimos que se erradiquen las plantas porque eso sería prácticamente imposible, pero sí esperamos que los encargados compren o instalen las maquinarias necesarias para evitar que se produzca la contaminación. Para no continuar afectando la salud y el medio ambiente, todo ciudadano debe ser consciente de la contaminación que esto produce como así también del daño que se produce cada vez que respira”, expresa el informe.
Qué dicen las empresas
En el trabajo de investigación se deja en claro que la situación no es exclusiva de Hernando sino que se repite en la mayoría de las localidades que tienen silos de acopio que quedaron en medio de la zona urbana y que en general, en la última década crecieron en su capacidad de almacenamiento. La zona del ferrocarril que atraviesa cada localidad fue el lugar elegido por estos emprendimientos, para estar a mano del transporte por tren. Esos lugares, en general, están en medio de las zonas urbanas. En Hernando, de las empresas ubicadas en la zona urbana a la vera de la ruta, sólo una aceptó responder las preguntas de los estudiantes.
La otra empresa argumentó falta de tiempo y precisó que antes debía consultar con sus abogados.
En la entrevista mantenida con personal de Aceitera General Deheza (AGD), Guillermo Defagot expresó que la empresa cuenta en Hernando con cuatro silos de 1.700 toneladas cada uno, una planta de cuatro silos con 250 toneladas cada uno y uno de 3.500 toneladas. Según los registros, esta empresa mueve por año unas 200 mil toneladas de cereal. En cuanto a las tareas de secado del cereal, AGD cuenta con una sola ya que los silos se comunican subterráneamente entre sí. Los responsables de la empresa a nivel local aseguran que desde allí no hay voladura de polvillo porque se cuenta con extractor.
Qué dicen las autoridades
El intendente Sergio Coser admitió ante los alumnos del Instituto Divino Corazón conocer la problemática porque vive a una cuadra y media del lugar y porque en varias ocasiones ha encontrado restos de cascarillas en el patio de su casa.
Al ser consultado sobre si se han tomado medidas al respecto. Coser respondió: “Técnicos de la Municipalidad junto a técnicos de la Agencia Córdoba Ambiente están visitando las empresas y se les han marcado medidas correctivas que deben ir cumpliendo. Todas están en ese camino. No se puede pedir que de un día para otro inviertan un millón de pesos, que es el monto en el que oscila una vía de solución. Si les exigimos que hagan eso urgente, cierran, lo que se traduciría en pérdidas de fuente de trabajo”, argumentó el intendente.
Pero la duda es si no es en este momento de mayor rentabilidad agropecuaria, cuándo se podrían propiciar esas mejoras.
Mientras, Coser aseguró que debe evaluarse “concienzudamente” el verdadero impacto del polvillo de cereal en la población. Recordó además que el Concejo Deliberante ya aprobó la constitución del Consejo de Medio Ambiente para tratar todo tipo de problemáticas en este rubro.
En cuanto a la legislación actual, Omar Prigione, técnico sanitario de la Municipalidad, ratificó a los alumnos que “hace años que se viene trabajando en coordinación con la Agencia Córdoba Ambiente”. Acotó que “se realizó una auditoría para detectar no solamente fugas sino situaciones internas de trabajo. Hecho esto, se fijaron a las empresas plazos progresivos para el mejoramiento de algunos defectos encontrados. Hoy se ha logrado un porcentaje muy alto de hermeticidad y seguimos avanzando”, apuntó Prigione.
El profesional destacó que según una ordenanza vigente en esta ciudad, en este momento no es factible instalar nuevas plantas de silos en el área urbana.
Qué dicen los médicos
Para la presentación de la investigación, el equipo de trabajo estudiantil también consultó a cinco profesionales médicos de Hernando, en relación a las consecuencias que para la salud podría tener la voladura de polvillo de cereal.
Los médicos después de una amplia exposición teórica sobre alergias y afecciones de ese tipo, reconocen que en Hernando existirían problemas con enfermedades generadas por el polvillo del cereal. Agregan que a la situación de por sí complicada se suma que el asentamiento del cereal en Hernando está en la línea de los vientos y en medio de la población.
Si bien los profesionales admitieron que las alergias pueden provenir de diversas fuentes, aseguran que los casos temporales se agravan considerablemente desde marzo a julio, en coincidencia con la cosecha gruesa.
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