La Voz del Interior - Edición Electrónica (20/02/2024)
Construirán un nuevo pumario en el Parque Ecológico Urbano de Río Cuarto

El proyecto fue uno de los más votados en el programa municipal de presupuesto ciudadano. Contribuirá a la obra de rehabilitación y reinserción que el parque realiza desde hace décadas. Advierten sobre la problemática de la fauna silvestre, la pérdida de monte y el negocio de los cotos de caza.
Desde hace más de 30 años Río Cuarto cuenta con un Parque Ecológico Urbano (PEU) que funciona como un centro de rescate y reinserción de la fauna silvestre.
En el PEU, expertos y voluntarios reciben, protegen, rehabilitan sanitaria y físicamente a animales de distintas especies, principalmente los que están en vías de extinción. Su objetivo es recuperarlos y devolverlos a su hábitat natural, no tenerlos en exhibición. Hoy tienen 300 ejemplares.
Desde 1992 hasta la actualidad, el Parque rescató y liberó a más de mil pumas. Pero varios quedaron como habitantes permanentes del lugar, porque no pueden ser devueltos a su hábitat. Uno de los proyectos del programa municipal Presupuesto Comunitario más votado por los vecinos, en el oeste de la ciudad, es la construcción de un pumario, un recinto apropiado para estos felinos.
En las últimas horas el secretario de Gobierno Guillermo de Rivas firmó un convenio con la Asociación Civil del PEU para efectivizar el aporte de unos 15 millones. La vicepresidenta del Parque Ecológico Urbano Viviana Yawny destacó la cantidad de votos que recibió el proyecto y dijo que el pumario servirá para mejorar la calidad de vida de los animales que hoy están en recintos muy pequeños. “Tienen una expectativa de 15 a 20 años de vida de aquí en adelante y necesitan un nuevo espacio”, mencionó.
Entre los pumas que forman parte del plantel permanente está Aram. A modo de ejemplo, integrantes del PEU comentaron que ingresó al parque porque le habían matado a la madre, había sufrido un golpe y tenía parte de la mandíbula fracturada. Tiene problemas dentales, perdió los colmillos y no se puede liberar, no podría sobrevivir en el campo.
“Tenemos animales que vienen con heridas de trampas, que han perdido dedos o una pata, o no tienen los dientes, o les han sacado las garras. O tienen demasiada confianza con el ser humano, han sido sacado desde muy pequeños de su hábitat y no les tienen temor al peor enemigo que puede ser el hombre, por eso no se los pueden liberar”, explicó Miriam Rodríguez, una de las fundadoras del PEU.
Los responsables del Parque indicaron que también se les dificulta liberar a aves rapaces, águilas, búhos, que son encontrados con las patas quebradas. “Tenemos un águila que trajo el padre de un chico que, practicando tiro le hirió un ala y se la tuvieron que amputar”, denuncian desde el PEU.
Sobre la situación del puma en la región, Rodríguez indicó: “Cada vez se acentúa más la problemática, porque se están quedando sin hábitat y sin presas naturales, por eso se acercan a la ciudades. Hacen falta más corredores, estamos perdiendo mucho monte y el puma es una especie que es muy importante para controlar otras poblaciones”.
Desde el PEU también cuestionaron los cotos de caza. “Hay gente que vende pumas en campos privados para que cazadores extranjeros se los lleven como trofeo. Se los liberan muy drogados o con mucha sed para que no puedan defenderse y los maten. También hubo quienes sacaban animales semimansos de centros de rescate para llevarlos a cotos”, denunció Rodríguez, que lleva años de lucha contra este tipo de prácticas.
Aseguró que muchas veces los pumas que tienen problemas con los productores rurales son animales liberados por quienes los tuvieron como mascotas y ya no los pueden controlar. En ese sentido, el PEU apunta a la educación y concientización contra el mascotismo.

La historia de los pumas Simba y de Kobu
La actual vicepresidenta del Parque, Viviana Yawny, en el 2012, recibió una denuncia que indicaba que en Gigena hacían pelear a un puma con perros.
“Cuando fueron a buscar a ese puma, estaba en un estado calamitoso. Le faltaban dientes, uñas, estaba lleno de garrapatas. Pasó dos años sin salir de su refugio. Salía cuando nadie lo veía. La cuidadora Jorgelina Rúa, trabajó intensamente y hoy le puede dar hasta los remedios en la boca. Eso es trabajo con amor, respeto y conocimiento”, destacó Rodríguez y aporta una foto del animal en inmejorables condiciones.
La puma que figura en el logo del PEU es Simba, la primera que ingresó al parque. Fue rescatada de un taller de Sampacho. Según relatan en el PEU, al dueño del negocio, como había sufrido muchos robos, se le ocurrió apropiarse de dos pumas, un macho y una hembra, para usarlos para ahuyentar a los ladrones.
Cuando los proteccionistas intervinieron, determinaron que el macho (Perico) era muy agresivo y no había tenido contacto con la gente, por eso pudieron rehabilitarlo y liberarlo.
En cambio, la hembra, Simba, con siete meses, ya estaba muy acostumbrada a los humanos, buscaba jugar con la gente. Se evaluó que no podría devolverse al monte porque no sabría buscarse comida. Simba vivió 19 años en el PEU. Murió de cáncer.
“El parque lo hicimos porque teníamos en ese momento un grupo de guardafaunas y hacíamos muchos controles en ruta, de caza y pesca y a veces encontrábamos animales en mal estado. Una vez me tocó presenciar un hombre que traía un mono sobre el volante del auto, hay mucho por hacer en materia de educación”, agregó Rodríguez, fundadora y actual concejal.
Actualmente, entre más de 300 animales, en el PEU hay 11 pumas que no pueden devolverse a su hábitat natural. El costo de su alimentación es elevado, por lo que siempre se realizan campañas de socios y se tramitan aportes estatales para la asociación civil.

Horario habilitado en Río Cuarto
El PEU es abierto al público y puede ser visitado sábados, domingos y feriados de 16 a 20.30.

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El Puntal de Río Cuarto (20/02/2024)
Presupuesto Participativo: se construirá un pumario en el Parque Ecológico

El secretario de Gobierno, Guillermo De Rivas, firmó un convenio con la Asociación Civil del Parque. La obra fue votada por los vecinos de la ciudad. Ya trabajan en el proyecto
El Secretario de Gobierno y Participación Ciudadana Guillermo De Rivas firmó un convenio con los miembros de la Asociación Civil del Parque Ecológico para la construcción de un pumario, luego de que la obra fuera votada por los vecinos y vecinas a través del Presupuesto Participativo.
“Este es uno de los proyectos más votados en el oeste de la ciudad en 2023, e implica mejorar la infraestructura del Parque Ecológico. En este caso se construirá un pumario. Ahora estamos articulando su ejecución y en ese marco hemos firmado el convenio para comenzar los trabajos”, comentó De Rivas.
Al respecto, el funcionario dijo que, como paso previo al inicio de los trabajos, se viene avanzando desde hace meses junto a arquitectos y referentes de la entidad para identificar las necesidades y definir el estilo del proyecto. “Una vez que esté aprobado el proyecto se empezarán a transferir los fondos para su ejecución. Lo importante es la confianza y la articulación institucional, ya que los recursos se girarán al Parque Ecológico para su administración y ejecución, como ya se hizo con un proyecto anterior. Gracias a eso hoy cuentan con un quirófano y un salón de usos múltiples. Ese trabajo en conjunto es lo que permitirá que en los próximos meses se cumpla el objetivo de tener el pumario”, agregó De Rivas.
A su turno, la Vicepresidenta del Parque Ecológico Urbano Viviana Yawny se mostró satisfecha con el avance de las gestiones y dijo que el pumario servirá para mejorar la calidad de vida de los animales que allí están alojados. “Es una gran alegría. El Parque Ecológico de Río Cuarto está instalado con un concepto de cuidado hacia nuestra fauna silvestre y también en lo que respecta al ambiente y la naturaleza. Esto abarca a la ciudad, pero también a la zona. De hecho, está empezando a ser reconocido a nivel nacional”, indicó Yawni.
“Este aporte que hace la Municipalidad a través del Presupuesto Participativo va a tener como destino la construcción de un pumario, que es para mejorar la calidad de vida de seis pumas que se encuentran en el Parque Ecológico y hoy no están en las condiciones adecuadas. Son animales que tienen una expectativa de 15 a 20 años de vida de aquí en adelante y que necesitan un nuevo espacio”, agregó la referente de la institución de Villa Dalcar.

Un espacio para disfrutar
Gracias a las mejoras constantes que son posibles mediante los aportes del Municipio y el trabajo permanente de la Asociación Civil, el Parque Ecológico ha experimentado mejoras significativas durante los últimos años. Por eso, cada fin de semana decenas de familias recorren sus instalaciones, contemplan a los animales que están siendo preservados y eligen sus espacios verdes para pasar la tarde.
Además de observar una importante cantidad de especies, el Parque ofrece juegos infantiles y espacios recreativos para aprovechar. Por eso, tanto De Rivas como Yawny invitaron a aquellos vecinos y vecinas que aún no lo conocen a que se acerquen y descubran un lugar único en el sur de la provincia de Córdoba.
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