25 feb 2007

Poliducto: ¿sin daños ambientales?

El Puntal de Río Cuarto (25/02/2007)
Inician la obra del poliducto: dicen que no causará daños ambientales

La obra de reubicación del poliducto de Repsol YPF a 14 metros de profundidad ya se puso en marcha, tendrá un plazo de ejecución de 90 días y -se asegura- no provocará daños ambientales.
Es que la técnica empleada es la de la perforación dirigida que evita que el río sea desviado, como ocurría en épocas pasadas.
Mientras en la margen norte del río Cuarto se procede a la soldadura de los caños, en la sur se comenzó con la perforación que, según pudo averiguar PUNTAL, ya alcanzó la mitad del lecho.
Las últimas crecientes no alteraron el ritmo de obra, puesto que no fueron de gran magnitud.
La decisión de hacer la obra surgió a raíz de la denuncia de que un tramo del poliducto se encontraba al descubierto y podía romperse con las crecientes y contaminar así el curso de agua.
El conducto, que cruza el río Cuarto a la altura de la estancia Huenú, transporta productos refinados derivados del petróleo como nafta, kerosene, JP1 y gasoil. Se encontraba enterrado a tres metros, pero el descenso del cauce lo dejó al desnudo.
La problemática tomó estado legislativo y la empresa decidió invertir en una reubicación a mayor profundidad.
Los trabajos específicos apuntan a la renovación de un tramo de 800 metros, para lo cual se utilizará un caño de acero con revestimiento tricapa.
La empresa Pamar SA es la encargada de llevar a cabo la obra.
“A través de la técnica de perforación horizontal dirigida, el poliducto será reubicado a 14 metros de profundidad. La citada es una técnica con menor impacto ambiental que brinda una solución definitiva a cruces de accidentes geográficos naturales”, informó Repsol YPF.
“Entre las etapas, figuran la preparación de los caminos de acceso, el montaje de la máquina de perforación, la construcción del túnel piloto y la inserción del caño”, agregó.
“Durante los 90 días fijados trabajará un equipo formado por treinta personas entre personal propio y contratado”, señaló.
Según la memoria técnica, el objetivo es: “La renovación de un tramo de aproximadamente 800 metros del Poliducto Villa Mercedes-Monte Cristo, de diámetro nominal 305 mm (12”) y 7,9 mm de espesor, con caño de acero y revestimiento tricapa, en el cruce del río Cuarto, empalme con el poliducto existente y remoción del tramo desvinculado”.
La reubicación del poliducto se divide en ocho etapas:
- Preparación de los caminos de acceso y sitios de trabajo en ambas márgenes del río.
- Realización de las zanjas de ataque y salida.
- Construcción de la columna de caños.
- Montaje de la máquina de perforación.
- Construcción del túnel piloto, su rectificación y acondicionamiento.
- Inserción del caño.
- Desmovilización del equipo tras la conclusión de los trabajos.
- Disposición de lodos y recomposición del sitio.

El río no se desvía
Con la técnica de la perforación dirigida, se evita desviar el río como así también tocar sus márgenes. Los trabajos de perforación ya comenzaron y hasta el momento han llegado hasta la mitad del lecho del río.
Con el proyecto ejecutivo listo, se procede a la demarcación y el estaqueado de la traza, realizándose a continuación el sondeo de interferencias enterradas y de la cañería existente, con un equipo de última generación.
Para los trabajos de zanjeo se utilizan retroexcavadoras. Y en los lugares donde la napa freática pueda interferir se usan bombas de achique.
El sitio del cruce es relevado para confirmar que no existan interferencias como otros conductos, cavernas u obras de arte enterradas.
La soldadura de los caños se realiza manualmente por el sistema de arco eléctrico y electrodo revestido.
La perforación propiamente dicha se hace con una lanza hidrocinética para suelos arenosos y una sonda radioeléctrica. Luego viene la rectificación del túnel y su acondicionamiento.
La etapa final del trabajo consiste en la inserción del caño por tiro dentro del túnel sin que el mismo gire. Posteriormente, se hace la prueba de resistencia y hermeticidad.
Una vez concluida la obra, Repsol YPF se compromete a dejar el lugar de trabajo en condiciones iguales a las encontradas. Se reacondicionarán los terrenos y se repararán los bienes que hubieran sido afectados.
Con la reubicación del poliducto, desaparecerá el riesgo de un daño ecológico a raíz de las crecientes a sólo 7 kilómetros aguas arriba de Río Cuarto.

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