15 ago 2018

Ex Batallón 141: solicitan revocación de la venta

La Nueva Mañana  - Edición Electrónica (15/08/2018)
Pidieron la revocación de la venta del ex Batallón 141

La Fundación Córdoba de Todos elevó hoy un pedido para que se rescinda la licencia otorgada a la corporación comandada por Eduardo Eurnekian por parte del Ejecutivo municipal.
La Fundación Córdoba de Todos realizó este miércoles al mediodía dos presentaciones con el objetivo de avanzar en dar por terminada la relación entre la Municipalidad de Córdoba y la corporación comandada por Eduardo Eurnekian, para la edificación en los terrenos correspondientes al Ex Batallón 141.
El pedido de rescisión del contrato se sustenta en los incumplimientos de los compromisos que la Corporación América había asumido con la Municipalidad de Córdoba a partir del acuerdo que daba nacimiento al emprendimiento, que prometió la construcción de un megacomplejo de viviendas y espacios comerciales.
Según lo acordado al momento de la firma del contrato, la corporación de Eduardo Eurnekian tenía dos años para realizar una serie de obras destinadas a implementar transformaciones viales con nuevos accesos y rotondas en las calles aledañas al predio ubicado en la zona sur de la ciudad.
Además, el proyecto original incluía la construcción de una planta de tratamiento de efluentes cloacales que quedó desestimada tras una muy criticada modificación aprobada por el Concejo Deliberante en diciembre del 2017. Allí, con toda la oposición en contra, el oficialismo aprobó los cambios que desligaron a la empresa de dicha responsabilidad a la vez que se habilitó el redireccionamiento del dinero de inversión que, desde entonces, debería ir a parar a la planta municipal de tratamiento de líquidos cloacales de Bajo Grande.
Según señalan en la presentación, lejos de sancionar los incumplimientos, el Ejecutivo municipal ha premiado en infinidad de ocasiones al grupo comandado por Eduardo Eurnekian, “perdonando demoras, cambiando compromisos de inversión, dando plazos híper extendidos en el tiempo para pagar lo comprometido, brindando la posibilidad de hacerlo en comodísimas cuotas sin interés”.
De hecho, otra adenda reciente al contrato original, exime a la Corporación América de la ejecución de trabajos fijando en contraprestación la suma de $376.365.653,27 a abonar en 11 cuotas hasta abril de 2019. Cabe recordar que la estimación del valor de la planta en el año 2012 fue de $96.702.382.
Miguel Magnasco, Presidente de la Fundación Córdoba de Todos, señaló además que el pedido incluye una solicitud para que, una vez concretada la rescisión del contrato, se lleve adelante la misma metodología que se utilizó para los proyectos de urbanización de Forja y la Reserva Natural San Martín. Cabe señalar que, en ambos casos, se avanzó con la convocatoria a concursos públicos de ideas que contaron con la participación de múltiples sectores de la ciudadanía cordobesa.
La presentación a la Municipalidad tuvo un paralelo ante la Secretaria de Ambiente de la Provincia. Allí, se solicitó la caducidad de la licencia ambiental ya que el estudio de impacto ambiental había sido aprobado en el marco de “una propuesta a desarrollar en un determinado tiempo y lugar” y advertía que “si se modificaran las condiciones declaradas en el mismo y que fueran tenidas en cuenta al momento de su evaluación y valoración crítica, la presente resolución caducara”.
En la presentación, la Fundación entiende que los sucesivos cambios acordados con el municipio y los casi cinco años de incumplimiento suponen una “modificación de las condiciones declaradas” en el informe de impacto ambiental y que, por lo tanto, deberían provocar la caducidad de la licencia ambiental otorgada a la Corporación América.
Todo esta situación arrastrada desde hace años por los vecinos y las organizaciones que vienen denunciando el acuerdo en torno al Ex Batallón, tuvo un nuevo estallido cuando en medio del escándalo de los “cuadernos de la corrupción”, Hugo Eurnekian (directivo principal de la Corporación América, sobrino directo de Eduardo) admitió el pago de coimas para obtener beneficios en la obra pública en el año 2013.
“Si el convenio ya estaba viciado, que Eurnekian haya confesado que pagaba coimas en el 2013 y que ese sea justo el año en que se firmó el acuerdo enturbia mucho más el proceso. Hay que rescindir ese contrato”, sostuvo Magnasco consultado por La Nueva Mañana.

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