25 oct 2019
La presa Achiras bajo otra óptica
8:00 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Río Cuarto (25/10/2019)
Aseguran que la presa Achiras cumple con la función para la que fue construida
Un estudio realizado por profesionales de la UNRC advierte sobre el estado de deterioro y abandono de la obra. El intendente Jorge Otamendi declaró que no es así y que las instalaciones están en pleno funcionamiento
Tras la difusión de un estudio realizado por investigadores de la UNRC, quienes advierten sobre el estado de deterioro y abandono de la represa Achiras, el intendente de esta localidad, Jorge Otamendi, cuestionó el planteamiento y aseguró que la obra cumple con la función para la que fue construida.
Como se recordará, tras las devastadoras inundaciones que sufrió el sur cordobés, la Universidad realizó estudios de todas las cuencas y se determinó la necesidad de construir las represas que fueron ejecutadas por la Provincia. Para Otamendi, el objetivo central de contener y regular las aguas se cumplió y la gran estructura está en óptimas condiciones.
"Lo curioso es que nadie me ha llamado, tampoco nadie habló conmigo para que al menos pudiéramos brindar una información más acertada sobre esta represa", dijo Otamendi.
El trabajo realizado a 12 años de la habilitación de la presa va más allá de analizar solamente la obra como reguladora de las corrientes hídricas, sino como un centro turístico natural, apto para actividades náuticas y hasta como un aportante de agua para la población. Al tiempo que plantea que gestiones inconclusas en el proceso de la expropiación de tierras donde se ubica la presa habrían demorado también su uso con otros fines. Apunta a la responsabilidad del Estado para cuidar y mantener estas estructuras.
Para el intendente de Achiras, el informe no sería del todo riguroso, ya que no identifica a fuentes consultadas.
El intendente sostuvo que hasta diciembre el acceso a la represa está negado al ingreso del público, precisamente por estar en época de veda de pejerrey.
"Sabemos como es la gente. Si van a este lugar de paseo, hay que vigilar que no se pongan a pescar porque por ley en este tiempo está prohibido. Hay que actuar, a veces, con la fuerza policial. Por eso las puertas de ingreso están cerradas", aseguró el intendente achirense.
Sobre los daños que están sufriendo los equipos, este lugar no posee turbinas, sino compuertas, y, según el mandatario, al estar frente a una época de sequía, éstas no se abren.
Y afirmó que el lugar no está abandonado. “Por el contrario, se realizan constantes visitas a ese predio para el desmalezamiento y todo lo que esté vinculado a la limpieza, ya que en tiempos normales la gente puede concurrir”.
También hizo mención a las gestiones que realizó su padre (Juan Bautista Otamendi) cuando fue intendente durante tres períodos, para la cristalización del proyecto de las presas que quería ejecutar el gobernador José Manuel de la Sota.
Atenuar crecidas y evitar inundaciones
El actual gobernante manifestó que en la zona de Achiras fueron creadas dos represas, la "Achiras" y "Las Lajas". Ambos espejos de agua de algo más de 50 hectáreas cada una se construyeron para atenuar la bajante de crecidas en tiempos de copiosas lluvias.
El objetivo central es de regular crecientes y evitar inundaciones, y su uso para otros fines sólo serían secundarios.
La presa regula a los arroyos "Achiras", más adelante adquiere el nombre de "El Gato", "Las Lajas" lo hace con el arroyo del mismo nombre o "Corralito" también llamado "630", y el "Sampacho", que, a la altura de la ruta 35, se unifica con "El Gato" y el "Santa Catalina".
Estos cursos de agua llegan unificados a la presa del "Tigre Muerto" al norte de La Cautiva con sus aguas reguladas. Allí un inmenso reservorio impide anegamientos de campos en zonas más bajas que en su momento afectaron a La Cautiva y a General Levalle.
Por último, y con respecto al tema de las expropiaciones de las tierras, se confirmó que la Provincia adeuda aún parte de los pagos a los propietarios de las mismas.
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Aseguran que la presa Achiras cumple con la función para la que fue construida
Un estudio realizado por profesionales de la UNRC advierte sobre el estado de deterioro y abandono de la obra. El intendente Jorge Otamendi declaró que no es así y que las instalaciones están en pleno funcionamiento
Tras la difusión de un estudio realizado por investigadores de la UNRC, quienes advierten sobre el estado de deterioro y abandono de la represa Achiras, el intendente de esta localidad, Jorge Otamendi, cuestionó el planteamiento y aseguró que la obra cumple con la función para la que fue construida.
Como se recordará, tras las devastadoras inundaciones que sufrió el sur cordobés, la Universidad realizó estudios de todas las cuencas y se determinó la necesidad de construir las represas que fueron ejecutadas por la Provincia. Para Otamendi, el objetivo central de contener y regular las aguas se cumplió y la gran estructura está en óptimas condiciones.
"Lo curioso es que nadie me ha llamado, tampoco nadie habló conmigo para que al menos pudiéramos brindar una información más acertada sobre esta represa", dijo Otamendi.
El trabajo realizado a 12 años de la habilitación de la presa va más allá de analizar solamente la obra como reguladora de las corrientes hídricas, sino como un centro turístico natural, apto para actividades náuticas y hasta como un aportante de agua para la población. Al tiempo que plantea que gestiones inconclusas en el proceso de la expropiación de tierras donde se ubica la presa habrían demorado también su uso con otros fines. Apunta a la responsabilidad del Estado para cuidar y mantener estas estructuras.
Para el intendente de Achiras, el informe no sería del todo riguroso, ya que no identifica a fuentes consultadas.
El intendente sostuvo que hasta diciembre el acceso a la represa está negado al ingreso del público, precisamente por estar en época de veda de pejerrey.
"Sabemos como es la gente. Si van a este lugar de paseo, hay que vigilar que no se pongan a pescar porque por ley en este tiempo está prohibido. Hay que actuar, a veces, con la fuerza policial. Por eso las puertas de ingreso están cerradas", aseguró el intendente achirense.
Sobre los daños que están sufriendo los equipos, este lugar no posee turbinas, sino compuertas, y, según el mandatario, al estar frente a una época de sequía, éstas no se abren.
Y afirmó que el lugar no está abandonado. “Por el contrario, se realizan constantes visitas a ese predio para el desmalezamiento y todo lo que esté vinculado a la limpieza, ya que en tiempos normales la gente puede concurrir”.
También hizo mención a las gestiones que realizó su padre (Juan Bautista Otamendi) cuando fue intendente durante tres períodos, para la cristalización del proyecto de las presas que quería ejecutar el gobernador José Manuel de la Sota.
Atenuar crecidas y evitar inundaciones
El actual gobernante manifestó que en la zona de Achiras fueron creadas dos represas, la "Achiras" y "Las Lajas". Ambos espejos de agua de algo más de 50 hectáreas cada una se construyeron para atenuar la bajante de crecidas en tiempos de copiosas lluvias.
El objetivo central es de regular crecientes y evitar inundaciones, y su uso para otros fines sólo serían secundarios.
La presa regula a los arroyos "Achiras", más adelante adquiere el nombre de "El Gato", "Las Lajas" lo hace con el arroyo del mismo nombre o "Corralito" también llamado "630", y el "Sampacho", que, a la altura de la ruta 35, se unifica con "El Gato" y el "Santa Catalina".
Estos cursos de agua llegan unificados a la presa del "Tigre Muerto" al norte de La Cautiva con sus aguas reguladas. Allí un inmenso reservorio impide anegamientos de campos en zonas más bajas que en su momento afectaron a La Cautiva y a General Levalle.
Por último, y con respecto al tema de las expropiaciones de las tierras, se confirmó que la Provincia adeuda aún parte de los pagos a los propietarios de las mismas.
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