27 may 2013

El carayá rescatado está feliz

Día a Día (27/05/2013)
El mono carayá tuvo sexo en la reserva

El carayá rescatado fue enviado a la reserva de monos de La Cumbre, donde se integró a la monada... ¡Y tuvo sexo!
La historia de Yuri, el monito exótico rescatado de una familia que lo había domesticado, sumó otro capítulo en la novela este fin de semana.
Y es que, luego de ser derivado a la Reserva de Monos Carayá en La Cumbre, el sábado se vieron los primeros síntomas de integración entre el simio y sus pares que viven en el lugar.
“Lo dejamos con dos hembras más grandes que él y de pronto una compañera de trabajo me hizo notar que el monito estaba copulando: ¡Mirálo al que iba a extrañar!, dijimos”, contó Alejandra Juárez, fundadora de la reserva que acogió a Yuri, luego de un fugaz paso por el Zoológico de esta ciudad.
El “romance” del monito siguió ayer e incluyó una pequeña “luchita” con otros ejemplares de su edad por la hembra.
“Estamos asombrados por la velocidad con la que adaptó”, explicó Juárez, tras aclarar que naturalmente la especie Carayá no es sencilla de integrar con sus pares. “Es un trabajo que requiere paciencia: cuando llegan, los alojamos en recintos y luego los vamos aclimatando y liberando paulatinamente en un sector donde se aquerencian: son territoriales”.
“Relación enferma”. En tanto, el camionero que convivía con el animal, Rubén Héctor Rodríguez, dijo que todavía lamenta la pérdida del animal y denunció que la gente de la Secretaría de Ambiente provincial les “mintió” cuando les prometió que el mono iba a seguir teniendo cuidados especiales. “Me hablaban de una pieza calefaccionada que no existe. Están en una piecita con otros tres monos con los vidrios rotos. El lugar no tiene higiene,” agregó enojado al diario La Voz del Interior. Según trascendió, la familia presentaría un recurso de amparo para recuperar al animal.
Desde la reserva, sus responsables indicaron que el mono está alojado en un recinto aclimatado, pero además advirtieron que Rodríguez “tiene una relación enferma con el animal”. “En el verano ya había venido a la reserva y se quedó en la puerta con el animal. Sus familiares comentaron que estaban preocupados por la importancia que le daba al monito en su casa”, disparó la conservacionista.
Una reserva única. El Centro de Rescate de Monos Carayá es el primero en su tipo en la Argentina y el único en el mundo dedicado a esta especie de primates. Fue fundado hace más de 20 años por la conservacionista Alejandra Juárez. En su predio de 360 hectáreas viven alrededor de 160 monos. “La mitad más uno es rescatado de alguna familia que lo compró gracias al tráfico ilegal de animales”, cuenta la encargada del lugar, tras revelar que en muchos casos los entregan sus propios “dueños” cuando el mono supera la pubertad y se pone algo agresivo.

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Más Información:

La Voz del Interior - Edición Electrónica (27/05/2013)
- En la jaula, el mono Yuri estuvo con una mona
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