12 dic 2012
Avícola riocuartense sufrida por los vecinos
8:20 a.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Puntal de Río Cuarto (12/12/2012)
Por contaminación, vecinos harán una denuncia penal contra una avícola
Se trata del establecimiento La Cristina, de Indacor SA. Además, realizarán una presentación contra la Secretaría de Ambiente de la Provincia, que según ellos no actúa. Dicen que tienen problemas de salud
Unas 50 familias que viven a la vera de la ruta 36, a poco más de un kilómetro de la rotonda Wittouck, y en las cercanías de la avícola “La Cristina”, decidieron ir a la Justicia por un conflicto de larga data con la empresa. Según ellos, la planta, propiedad de Indacor Sociedad Anónima, es un foco de contaminación permanente. A diario, acumulan una gran cantidad de animales muertos y residuos orgánicos al aire libre, que rápidamente entran en descomposición y esparcen un olor nauseabundo en toda la zona. Quienes viven allí relatan que, a raíz de esto, empezaron a sufrir alergias y que se ven forzados a permanecer “encerrados” en sus propias casas para evitar el mal olor. Sin respuestas, los vecinos harán una denuncia judicial contra la empresa y otra contra la Secretaría de Ambiente.
“No podemos estar en el patio de nuestras casas. Hay un olor a pollo podrido, muy fuerte, y la presencia de una gran cantidad de moscas. Esto se da a diario”, precisó Guillermo Cerioni, vecino de la avícola La Cristina, sobre la ruta 36.
Por su parte, Ester Campagno, sostuvo que a partir de la radicación del criadero de pollos parrilleros los vecinos empezaron a ver afectada su salud. “Todos los vecinos sufrimos alergias. Te brota, te hace erupción en la piel, y no te parás de rascar. Todos estamos teniendo el mismo problema”, relató la mujer.
El problema no es nuevo. Las primeras denuncias datan de agosto de 2010; es decir que tienen dos años y medio. Incluso hubo una clausura de por medio, aunque luego la planta fue rehabilitada.
“En el 2011, se clausuró este lugar. Pero poco después, la Agencia Córdoba Ambiente -hoy Secretaría de Ambiente de la Provincia- la volvió a habilitar, pasando por encima la ley vigente”, comentó Guillermo Cerioni.
Según consta en las actas de procedimiento, la medida se tomó por la “constatación de la presencia de numerosos animales muertos en estado de descomposición”, todos al aire libre.
Luego de esto, los vecinos continuaron realizando denuncias y presentaciones ante Ambiente, pidiendo que se tomen medidas para frenar la contaminación que produce la planta. La última es del 1 de agosto de este año, y aunque ingresó correctamente, como las anteriores, quedó “cajoneada” en el área de jurídica de la secretaría de Ambiente.
“Nunca recibimos ninguna respuesta, más allá de que nos informan que el expediente está en el área jurídica. Sin embargo, se apuró mucho el señor Bocco -secretario de Ambiente- para venir a clausurar de oficio la antena, porque podría contaminar”, manifestó el vecino Guillermo Cerioni.
La calidad de vida, afectada
Los vecinos del lugar expresaron relatos coincidentes en cuanto a que la emanación de olores nauseabundos se produce principalmente entre la tarde y la noche, y refieren que esto afecta su calidad de vida.
A raíz de la falta de soluciones, los vecinos ya preparan acciones legales contra la secretaría de Ambiente de la Provincia y contra la firma Indacor Sociedad Anónima. En principio, constatarán la situación a través de un escribano público, y con ese material se presentarán a la Justicia para solicitar una medida de amparo.
“Pedimos que se aplique la ley; queremos vivir como corresponde. Ya hay antecedentes de casos similares”, explicó Cerioni. Por otro lado, la secretaría de Ambiente justifica la dilación de una respuesta para el caso, en función de que ahora parte de la avícola queda comprendida dentro del ejido urbano y otra parte fuera de él. Los vecinos refutan el argumento recordando que la antena de la televisión digital fue clausurada aun estando dentro de la jusrisdicción del Municipio de Río Cuarto, lo mismo que las areneras.
“Ahora estamos medicados”
“Yo nunca tuve alergias, y ahora tengo que estar medicada contra las alergias. Es terrible”, cuenta Ester Campagno. “Hace más de 20 años que vivo acá, y nunca habíamos tenido problemas, hasta que llegó Indacor. Ahí se nos arruinó la vida”, indicó la mujer, que vive cerca de la avícola.
“Cuando venimos del trabajo, con ganas de descansar, de disfrutar del patio, nos tenemos que encerrar porque no se aguanta el olor a podrido. Nadie hace nada y hace 3 años que tenemos este problema”, detalló.
Por último, Guillermo Cerioni recordó que Indacor tiene una producción intensiva. “Según tengo entendido, hay más de 100 mil pollos en el lugar. Pero este tipo de producción no se condice con un predio que está dentro del ejido municipal”, subrayó el vecino.
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Por contaminación, vecinos harán una denuncia penal contra una avícola
Se trata del establecimiento La Cristina, de Indacor SA. Además, realizarán una presentación contra la Secretaría de Ambiente de la Provincia, que según ellos no actúa. Dicen que tienen problemas de salud
Unas 50 familias que viven a la vera de la ruta 36, a poco más de un kilómetro de la rotonda Wittouck, y en las cercanías de la avícola “La Cristina”, decidieron ir a la Justicia por un conflicto de larga data con la empresa. Según ellos, la planta, propiedad de Indacor Sociedad Anónima, es un foco de contaminación permanente. A diario, acumulan una gran cantidad de animales muertos y residuos orgánicos al aire libre, que rápidamente entran en descomposición y esparcen un olor nauseabundo en toda la zona. Quienes viven allí relatan que, a raíz de esto, empezaron a sufrir alergias y que se ven forzados a permanecer “encerrados” en sus propias casas para evitar el mal olor. Sin respuestas, los vecinos harán una denuncia judicial contra la empresa y otra contra la Secretaría de Ambiente.
“No podemos estar en el patio de nuestras casas. Hay un olor a pollo podrido, muy fuerte, y la presencia de una gran cantidad de moscas. Esto se da a diario”, precisó Guillermo Cerioni, vecino de la avícola La Cristina, sobre la ruta 36.
Por su parte, Ester Campagno, sostuvo que a partir de la radicación del criadero de pollos parrilleros los vecinos empezaron a ver afectada su salud. “Todos los vecinos sufrimos alergias. Te brota, te hace erupción en la piel, y no te parás de rascar. Todos estamos teniendo el mismo problema”, relató la mujer.
El problema no es nuevo. Las primeras denuncias datan de agosto de 2010; es decir que tienen dos años y medio. Incluso hubo una clausura de por medio, aunque luego la planta fue rehabilitada.
“En el 2011, se clausuró este lugar. Pero poco después, la Agencia Córdoba Ambiente -hoy Secretaría de Ambiente de la Provincia- la volvió a habilitar, pasando por encima la ley vigente”, comentó Guillermo Cerioni.
Según consta en las actas de procedimiento, la medida se tomó por la “constatación de la presencia de numerosos animales muertos en estado de descomposición”, todos al aire libre.
Luego de esto, los vecinos continuaron realizando denuncias y presentaciones ante Ambiente, pidiendo que se tomen medidas para frenar la contaminación que produce la planta. La última es del 1 de agosto de este año, y aunque ingresó correctamente, como las anteriores, quedó “cajoneada” en el área de jurídica de la secretaría de Ambiente.
“Nunca recibimos ninguna respuesta, más allá de que nos informan que el expediente está en el área jurídica. Sin embargo, se apuró mucho el señor Bocco -secretario de Ambiente- para venir a clausurar de oficio la antena, porque podría contaminar”, manifestó el vecino Guillermo Cerioni.
La calidad de vida, afectada
Los vecinos del lugar expresaron relatos coincidentes en cuanto a que la emanación de olores nauseabundos se produce principalmente entre la tarde y la noche, y refieren que esto afecta su calidad de vida.
A raíz de la falta de soluciones, los vecinos ya preparan acciones legales contra la secretaría de Ambiente de la Provincia y contra la firma Indacor Sociedad Anónima. En principio, constatarán la situación a través de un escribano público, y con ese material se presentarán a la Justicia para solicitar una medida de amparo.
“Pedimos que se aplique la ley; queremos vivir como corresponde. Ya hay antecedentes de casos similares”, explicó Cerioni. Por otro lado, la secretaría de Ambiente justifica la dilación de una respuesta para el caso, en función de que ahora parte de la avícola queda comprendida dentro del ejido urbano y otra parte fuera de él. Los vecinos refutan el argumento recordando que la antena de la televisión digital fue clausurada aun estando dentro de la jusrisdicción del Municipio de Río Cuarto, lo mismo que las areneras.
“Ahora estamos medicados”
“Yo nunca tuve alergias, y ahora tengo que estar medicada contra las alergias. Es terrible”, cuenta Ester Campagno. “Hace más de 20 años que vivo acá, y nunca habíamos tenido problemas, hasta que llegó Indacor. Ahí se nos arruinó la vida”, indicó la mujer, que vive cerca de la avícola.
“Cuando venimos del trabajo, con ganas de descansar, de disfrutar del patio, nos tenemos que encerrar porque no se aguanta el olor a podrido. Nadie hace nada y hace 3 años que tenemos este problema”, detalló.
Por último, Guillermo Cerioni recordó que Indacor tiene una producción intensiva. “Según tengo entendido, hay más de 100 mil pollos en el lugar. Pero este tipo de producción no se condice con un predio que está dentro del ejido municipal”, subrayó el vecino.
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