12 nov 2012

Efectos de la contaminación por residuos cloacales

Día a Día (12/11/2012)
Cloacas: más que un dolor de panza

La contaminación por residuos cloacales puede generar desde molestias en el estómago y ronchas, hasta peligrosas enfermedades.
Desde un molesto dolor de estómago, hasta enfermedades más complicadas. Todos son riesgos que puede provocar la contaminación por volcamientos cloacales. Joaquín Navarro, profesor de Problemática Ambiental de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Córdoba, explica que la proliferación de estos desechos es un serio riesgo para la salud. Especialmente en niños.
“Los líquidos cloacales son peligrosos para la salud porque en ellos proliferan gérmenes, algunos de ellos, muy riesgosos. La contaminación por este tipo de agentes puede provocar desde molestias en el estómago hasta enfermedades complicadas. En personas sensibles o en etapa de crecimiento, puede causar la muerte”, explica.
Escherichia coli, salmonella, shigella, leptospira y vibrio cholerae son nombres de gérmenes que no resultan familiares al oído. Pero si hablamos de síndrome urémico hemolítico, hepatitis, fiebre tifoidea, leptospirosis y cólera –enfermedades que se trasmiten por líquidos cloacales– es más fácil de comprender el riesgo.
Navarro integra el Foro Ambiental Córdoba. La ONG tomó muestras de agua para medir las bacterias fecales en distintos puntos de la ciudad de Córdoba. Fue durante la gestión del ex intendente Daniel Giacomino, en el marco del monitoreo del Acta Compromiso “Por una Córdoba Sustentable”. “Los valores hallados en Córdoba se encuentran 10 ó hasta 100 veces por encima de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud”, explica.
La principal vía de contagio de este tipo de enfermedades es por contacto. “La regla de oro para prevenir este tipo de contagios es la higiene. Y en segundo lugar, mantenerse lo más alejado posible de estos sitios. Hemos encontrado casos en que niños juegan descalzos a la pelota, cerca de un desborde cloacal. O se bañan en ríos en los que se suceden volcamientos”, agrega Navarro.
Hay distintas vías por la que los gérmenes pueden ingresar al organismo. La más común es a través de la boca. Pero también pueden hacerlo a través de los ojos, nariz, oídos o una lesión en la piel. Aunque es menos frecuente, los gérmenes también pueden viajar a través del aire. Esto sucede, por ejemplo, cuando un auto pasa por un desborde cloacal y salpica. Las bacterias pueden viajar a través de pequeñas gotas (que se conocen como “aerosol”) e ingresan al organismo al ser aspiradas.

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Más Información:

Día a Día (12/11/2012)
- Córdoba apesta: 20 desbordes cloacales por día
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