24 ene 2012

CRESE: Otra inaceptable agresión gremial

La Voz del Interior (24/01/2012)
Otra inaceptable agresión gremial

Que un sindicato que tiene una de las escalas salariales más altas -el de recolectores de basura- haya dejado sin ese servicio a la segunda ciudad del país durante los cuatro días más calurosos del verano constituye una agresión mafiosa contra Córdoba.
El reciente paro dispuesto por el gremio Surrbac, que agrupa a los trabajadores de la empresa Crese, dejó sin recolección de basura a la ciudad de Córdoba durante cuatro días (en pleno fin de semana) durante los cuales se registraron las temperaturas más altas en lo que va del verano. Para poner un paréntesis en este prolongado, recurrente e insoportable conflicto, tuvo que intervenir el gobernador de la Provincia, quien instruyó a la Secretaría de Trabajo para que dictara la conciliación obligatoria si no había acuerdo entre las partes. Y fue así que una ciudad cercana al millón y medio de habitantes se vio privada de este vital servicio por la intemperancia y la agresividad de un sindicato que no dudó en situarse en el plano de la ilegalidad y en apelar a la violencia para tratar de imponer sus puntos de vista, agrediendo a policías, bomberos y desprevenidos transeúntes.
El titular de la empresa recolectora Crese, designado por el gobierno municipal electo hace pocos meses por la ciudadanía cordobesa, sostuvo que la empresa está quebrada, y ese también es el criterio del intendente, del Departamento Ejecutivo y del Concejo Deliberante, mientras que el gremio dice que está “desfinanciada” porque el municipio no le otorga los fondos correspondientes. Al llegar a este punto, es preciso hacer una aclaración: el conflicto entre la Municipalidad de Córdoba y Crese no es entre una empresa privada cualquiera y un sindicato, ya que el municipio –que administra la segunda ciudad del país– tiene la potestad constitucional de definir sus políticas y acciones de gobierno sin que gremio alguno pueda interferirlas.
Por otra parte, aquí no está en juego una cuestión salarial, sino la viabilidad de la empresa como tal. El presidente de la Crese ha dicho que hay gerentes que cobran 25 mil pesos por mes, choferes que ganan 15 mil pesos y recolectores que perciben ocho mil pesos. Habría que preguntarse si los médicos, los profesores universitarios o los trabajadores calificados que se desempeñan en la actividad privada ganan cifras semejantes. Resulta inaceptable, pues, que se pretenda violar el principio de igualdad ante la ley, máxime tratándose de un municipio, que debe prestar servicios esenciales y no agotar sus recursos en sueldos de privilegio. Esto es lo que pide, lo que exige, el pueblo.
El Surrbac, que responde al líder camionero y cegetista Hugo Moyano, ha dicho que es intención del municipio privatizar Crese. Que se sepa, hasta el momento la Municipalidad de Córdoba no se ha pronunciado al respecto, pero la privatización total o parcial de la empresa de recolección y enterramiento de basura es una alternativa como cualquier otra. Y cabe recordar al respecto que dicho servicio fue prestado largo tiempo en Córdoba por una empresa privada, como sucede en otras ciudades del país, entre ellas la de Buenos Aires.

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