16 abr 2009

Urge aplicar la Ley de Bosques

Diario de Democracia de Villa Dolores (15/04/2009)
Urge aplicar la Ley de Bosques

La discusión sobre la Ley de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos llegó por fin a Villa Dolores. Tuvo lugar en el salón de usos múltiples del Centro Integrador Comunitario de Barrio Aeronáutico, donde se desarrolló el “Taller de Ordenamiento Regional, Ley de Bosque”.
Éste reunió a expertos y a vecinos de distintas comunidades de la región, quienes se interiorizaron y debatieron con relación a la necesidad de hacer cumplir la normativa nacional que regula la explotación.
Esta valiosa iniciativa ha tenido lugar en varias poblaciones del país, con la intención de que se tome conciencia sobre la necesidad de aplicar la Ley. Como resultado, en el encuentro mantenido en Villa Dolores se coincidió en la urgencia de aplicar esta legislación para evitar el continuo deterioro ambiental y, de este modo, prevenir eventuales desastres naturales, como así también daños a las actividades productivas de los campesinos.
Todo surge de la firma, por parte de la Presidencia de la Nación, del decreto que limita el desmonte y la tala indiscriminada de árboles. La norma establece una moratoria a los desmontes hasta que cada provincia realice un ordenamiento territorial de los bosques nativos, con la finalidad de que se planifique un uso ambientalmente sustentable de los mismos y se definan áreas intocables.
Es vital que se llegue a coordinar exitosamente la producción con el cuidado del medio ambiente, este es el gran desafío, para lo cual se deben articular estrategias con todos los gobiernos provinciales, en base a una política federal de preservación y explotación sustentable de los recursos.
En este marco, el avance de la frontera agrícola ganadera debe ser tratado sensata y racionalmente, en defensa de la riqueza forestal y de la producción nacional, en el contexto de un serio ordenamiento territorial de los bosques nativos existentes en cada jurisdicción.
Para ello, el Estado nacional debe cumplir con la asistencia y control a las provincias en la aplicación de la norma. En tal sentido, hay que fortalecer institucionalmente las estructuras provinciales administrativas, para un efectivo cumplimiento y control, evitando la deforestación y el consiguiente deterioro de ecosistemas únicos.
A la vez, no se debe pasar por alto la conservación, restauración y aprovechamiento sustentable de los recursos forestales nativos de nuestro país, reconociendo la voz de las comunidades indígenas, campesinas y pequeños productores que viven del bosque.
Según registros satelitales de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, dados a conocer por Greenpeace, en Argentina se pierden unas 300 mil hectáreas de bosque nativo por año, lo que significa la alarmante pérdida de una hectárea cada dos minutos. Hace un siglo atrás, los bosques ocupaban 127 millones de hectáreas y ahora apenas 31 millones.
La Ley ya está reglamentada, resta que la Nación y las provincias aceleren su aplicación con el propósito ineludible de que el territorio argentino no siga atravesando un alto riesgo. Es deber de las legislaturas provinciales avanzar en el tratamiento de los proyectos de ordenamiento territorial, poniéndole un tope a la indiscriminada y destructiva tala de bosques nativos, que provoca desertificación, inundaciones, pérdida de especies en peligro y hasta el desalojo de comunidades campesinas e indígenas.

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