15 mar 2009
Arsénico en el agua... que no has de beber
3:19 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Diario de Villa María (15/03/2009)
Arsénico en el agua... que no has de beber
Los representantes de la prestataria del servicio en la ciudad pusieron su empeño en aclarar que el agua que llevan a los hogares tiene niveles de arsénico por debajo del establecido por la DIPAS
De cualquier manera, aceptan que hay agua proveniente de pozos "familiares" que está contaminada en niveles superiores a los aceptados oficialmente. EL DIARIO ratifica su informe, para cuya confección consultó a especialistas
Para la conducción de la Cooperativa 15 de Mayo, encabezada por Mario Valenti, está muy mal que EL DIARIO haya "alarmado" a la población con su artículo del jueves, titulado "Detectan peligrosa presencia de arsénico en el agua de la ciudad".
Aunque la nota nacía de un estudio realizado y publicado por la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de Córdoba e incluía las palabras que el propio Valenti pronunció al ser consultado (ver "Resumiendo..."), desde la entidad decidieron recorrer algunos medios para denostarlo con términos agraviantes. Inclusive llegaron a nuestra Redacción y fueron escuchados para elaborar estas páginas. Pero de sus palabras surge cristalinamente que alguien debe actuar con urgencia para prevenir cuanto menos a la gente que no tiene agua corriente, a los vecinos que habitan en barrios donde cada uno tiene su propio pozo.
Veamos. En el inicio de la charla con un periodista de este medio, Valenti y Alfredo Antonino, acompañados por el ingeniero Eduardo Milanés, refirieron que dejaron de regirse por el Código Alimentario Argentino en cuanto a los niveles de arsénico permitidos, porque "el mismo Código establece valores y después deja que las provincias adapten esos valores para cada una de las zonas de las que se saca el agua, ya que el arsénico, mezclado con otros minerales, pude tener efectos distintos en Córdoba que en Buenos Aires".
"Y en Córdoba es la Dirección Provincial de Agua y Saneamiento (DIPAS) la que fija lo tolerable, lo aceptable y lo aconsejable. Nosotros estamos con un promedio general muy cercano a lo aconsejable", refirieron.
Esas afirmaciones están refrendadas por análisis realizados en distintos períodos del año pasado por la Facultad Regional Villa María de la Universidad Tecnológica y escritos del subdirector de Control Técnico de Alimentos de la Municipalidad, ingeniero Jorge Rolando.
Para los representantes de la 15 de mayo está descartado que el agua de red esté contaminada. En cuanto al estudio de especialistas de la Universidad Nacional de Córdoba (ver "El origen de todo"), Valenti aseguró que las muestras no fueron sacadas de pozos de la 15 de Mayo. "Nunca entró nadie. Están cerrados, sellados los pozos de la ciudad", aseguró.
Y agregó: "Para mí, el estudio de la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de Córdoba no tiene ningún valor. Como soy cien por ciento villamariense, le creo a la UTN de Villa María".
Luego estimó que en Villa María "un noventa por ciento de la gente toma agua de red y un diez por ciento toma agua contaminada" y que "a eso lo sabemos todos, porque hay pozos negros a 20 metros y se está sacando agua a 25 metros".
-¿Y hablando del arsénico concretamente?
-"Pero por supuesto que también hay arsénico a los 25 metros..."
En ese momento el periodista le pregunta a Antonino:
-¿A qué metros se supone que el agua no está contaminada?
-"A los 100 metros, de los 100 metros para abajo."
-Anoche usted dijo en la televisión local que frente a Las Rosarinas había un pozo que estaba a 100 metros y lo tuvieron que cerrar porque estaba contaminado y que hicieron otro hasta los 150 metros...
-"Es que un pozo a los 60 metros ya empieza a filtrar y ese pozo empezó a dar niveles no normales..."
-¿De qué?
-"Tenía un poquito de arsénico, entonces qué se hizo: se sacó de servicio y se hizo una perforación nueva de 150 metros de profundidad."
Más adelante, Valenti ofreció realizar análisis del agua a las familias que lo requieran.
Consultado sobre si podrían analizar el agua de las viviendas que no cuentan con el servicio de agua corriente, dijo que "no".
"Nosotros en esos casos no tenemos nada que ver. Pero estamos tratando de llevar el servicio a la totalidad de la población, porque sabemos que hay agua contaminada en los lugares donde llegamos", concluyó.
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El origen de todo
El estudio que dio origen al tratamiento del tema en nuestro medio fue realizado en esta ciudad por la investigadora Marta Rodríguez, de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC; y las licenciadas de la Escuela de Nutrición de la UNC, Carolina Roviera, Silvia Fanto y Erika Wenzel. “Las especialistas tomaron 24 muestras de 500 ml cada una, en ocho pozos de abastecimiento con que cuenta la ciudad. El muestreo fue realizado en setiembre pasado, mediante la técnica de espectrofotometría de absorción atómica”, se lee todavía hoy en la página oficial en Internet.
“Se encontraron porcentajes de arsénico que superan largamente los límites establecidos. La ingesta crónica de este tóxico, a través del agua o en los alimentos, puede producir una amplia gama de enfermedades, desde lesiones cardíacas y vasculopatías hasta cáncer al pulmón, hígado, piel, vejiga y riñón”, se indica.
Y se agrega: “La hipótesis planteada por las investigadoras indicaba que el agua superaba los límites de arsénico permitidos, y así se demostró en todas las muestras extraídas para el análisis: se encontró como mínimo cuatro veces el valor permitido (0,049 mg/l) y en algunos casos se octuplicó (0,080 mg/l)”.
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Resumiendo las voces de la primera publicación
Las siguientes son palabras que constan en el informe publicado el jueves por este medio y que intentó ser desacreditado por supuesta falta de rigor.
Graciela Marín, profesional que trabaja en el laboratorio de la Universidad Tecnológica Nacional: "Estamos hablando de las aguas de pozo y no de la red de la ciudad... Los problemas en general están en las primeras napas; hablando genéricamente, en las más profundas ya se puede dar con agua de mayor calidad".
Adriana Ferreira, licenciada en Ciencias Aplicadas, autora de una tesis de grado en la materia presentada ante la UTN: "Que hay arsénico en el agua no es algo nuevo. Eso lo sabemos desde que tenemos uso de razón. Lo que quise conocer con la tesis fue si había aumentado la concentración... (Luego de tomar un estudio de 1973 y realizar extracciones en los mismos lugares) el resultado fue que se registró en esos años un incremento del 370%. Creo que no hay que alarmar a la población, pero sí informarla".
Mario Valenti, presidente de la 15 de Mayo, concesionaria del servicio: "El agua que se toma en Villa María proviene de pozos que se encuentran a 160 ó 170 metros de profundidad. Es probable que el estudio de la Universidad Nacional de Córdoba se haya realizado en un nivel menos profundo y que allí las napas sí estén contaminadas".
De los ecologistas
El viernes, un día después de publicar el informe, este medio dio a conocer la opinión del grupo ecologista EcoSitio, que en base a informes propios (exhibidos en nuestra Redacción) indicó:
“Puede que los valores obtenidos (en las mediciones realizadas en el agua de red) estén dentro de la normativa provincial, pero según la Organización Mundial de la Salud estamos consumiendo un agua de red con valores de 3 a 8 veces más cantidad de arsénico que lo recomendado a nivel mundial y nacional”.
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Arsénico en el agua... que no has de beber
Los representantes de la prestataria del servicio en la ciudad pusieron su empeño en aclarar que el agua que llevan a los hogares tiene niveles de arsénico por debajo del establecido por la DIPAS
De cualquier manera, aceptan que hay agua proveniente de pozos "familiares" que está contaminada en niveles superiores a los aceptados oficialmente. EL DIARIO ratifica su informe, para cuya confección consultó a especialistas
Para la conducción de la Cooperativa 15 de Mayo, encabezada por Mario Valenti, está muy mal que EL DIARIO haya "alarmado" a la población con su artículo del jueves, titulado "Detectan peligrosa presencia de arsénico en el agua de la ciudad".
Aunque la nota nacía de un estudio realizado y publicado por la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de Córdoba e incluía las palabras que el propio Valenti pronunció al ser consultado (ver "Resumiendo..."), desde la entidad decidieron recorrer algunos medios para denostarlo con términos agraviantes. Inclusive llegaron a nuestra Redacción y fueron escuchados para elaborar estas páginas. Pero de sus palabras surge cristalinamente que alguien debe actuar con urgencia para prevenir cuanto menos a la gente que no tiene agua corriente, a los vecinos que habitan en barrios donde cada uno tiene su propio pozo.
Veamos. En el inicio de la charla con un periodista de este medio, Valenti y Alfredo Antonino, acompañados por el ingeniero Eduardo Milanés, refirieron que dejaron de regirse por el Código Alimentario Argentino en cuanto a los niveles de arsénico permitidos, porque "el mismo Código establece valores y después deja que las provincias adapten esos valores para cada una de las zonas de las que se saca el agua, ya que el arsénico, mezclado con otros minerales, pude tener efectos distintos en Córdoba que en Buenos Aires".
"Y en Córdoba es la Dirección Provincial de Agua y Saneamiento (DIPAS) la que fija lo tolerable, lo aceptable y lo aconsejable. Nosotros estamos con un promedio general muy cercano a lo aconsejable", refirieron.
Esas afirmaciones están refrendadas por análisis realizados en distintos períodos del año pasado por la Facultad Regional Villa María de la Universidad Tecnológica y escritos del subdirector de Control Técnico de Alimentos de la Municipalidad, ingeniero Jorge Rolando.
Para los representantes de la 15 de mayo está descartado que el agua de red esté contaminada. En cuanto al estudio de especialistas de la Universidad Nacional de Córdoba (ver "El origen de todo"), Valenti aseguró que las muestras no fueron sacadas de pozos de la 15 de Mayo. "Nunca entró nadie. Están cerrados, sellados los pozos de la ciudad", aseguró.
Y agregó: "Para mí, el estudio de la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de Córdoba no tiene ningún valor. Como soy cien por ciento villamariense, le creo a la UTN de Villa María".
Luego estimó que en Villa María "un noventa por ciento de la gente toma agua de red y un diez por ciento toma agua contaminada" y que "a eso lo sabemos todos, porque hay pozos negros a 20 metros y se está sacando agua a 25 metros".
-¿Y hablando del arsénico concretamente?
-"Pero por supuesto que también hay arsénico a los 25 metros..."
En ese momento el periodista le pregunta a Antonino:
-¿A qué metros se supone que el agua no está contaminada?
-"A los 100 metros, de los 100 metros para abajo."
-Anoche usted dijo en la televisión local que frente a Las Rosarinas había un pozo que estaba a 100 metros y lo tuvieron que cerrar porque estaba contaminado y que hicieron otro hasta los 150 metros...
-"Es que un pozo a los 60 metros ya empieza a filtrar y ese pozo empezó a dar niveles no normales..."
-¿De qué?
-"Tenía un poquito de arsénico, entonces qué se hizo: se sacó de servicio y se hizo una perforación nueva de 150 metros de profundidad."
Más adelante, Valenti ofreció realizar análisis del agua a las familias que lo requieran.
Consultado sobre si podrían analizar el agua de las viviendas que no cuentan con el servicio de agua corriente, dijo que "no".
"Nosotros en esos casos no tenemos nada que ver. Pero estamos tratando de llevar el servicio a la totalidad de la población, porque sabemos que hay agua contaminada en los lugares donde llegamos", concluyó.
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El origen de todo
El estudio que dio origen al tratamiento del tema en nuestro medio fue realizado en esta ciudad por la investigadora Marta Rodríguez, de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC; y las licenciadas de la Escuela de Nutrición de la UNC, Carolina Roviera, Silvia Fanto y Erika Wenzel. “Las especialistas tomaron 24 muestras de 500 ml cada una, en ocho pozos de abastecimiento con que cuenta la ciudad. El muestreo fue realizado en setiembre pasado, mediante la técnica de espectrofotometría de absorción atómica”, se lee todavía hoy en la página oficial en Internet.
“Se encontraron porcentajes de arsénico que superan largamente los límites establecidos. La ingesta crónica de este tóxico, a través del agua o en los alimentos, puede producir una amplia gama de enfermedades, desde lesiones cardíacas y vasculopatías hasta cáncer al pulmón, hígado, piel, vejiga y riñón”, se indica.
Y se agrega: “La hipótesis planteada por las investigadoras indicaba que el agua superaba los límites de arsénico permitidos, y así se demostró en todas las muestras extraídas para el análisis: se encontró como mínimo cuatro veces el valor permitido (0,049 mg/l) y en algunos casos se octuplicó (0,080 mg/l)”.
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Resumiendo las voces de la primera publicación
Las siguientes son palabras que constan en el informe publicado el jueves por este medio y que intentó ser desacreditado por supuesta falta de rigor.
Graciela Marín, profesional que trabaja en el laboratorio de la Universidad Tecnológica Nacional: "Estamos hablando de las aguas de pozo y no de la red de la ciudad... Los problemas en general están en las primeras napas; hablando genéricamente, en las más profundas ya se puede dar con agua de mayor calidad".
Adriana Ferreira, licenciada en Ciencias Aplicadas, autora de una tesis de grado en la materia presentada ante la UTN: "Que hay arsénico en el agua no es algo nuevo. Eso lo sabemos desde que tenemos uso de razón. Lo que quise conocer con la tesis fue si había aumentado la concentración... (Luego de tomar un estudio de 1973 y realizar extracciones en los mismos lugares) el resultado fue que se registró en esos años un incremento del 370%. Creo que no hay que alarmar a la población, pero sí informarla".
Mario Valenti, presidente de la 15 de Mayo, concesionaria del servicio: "El agua que se toma en Villa María proviene de pozos que se encuentran a 160 ó 170 metros de profundidad. Es probable que el estudio de la Universidad Nacional de Córdoba se haya realizado en un nivel menos profundo y que allí las napas sí estén contaminadas".
De los ecologistas
El viernes, un día después de publicar el informe, este medio dio a conocer la opinión del grupo ecologista EcoSitio, que en base a informes propios (exhibidos en nuestra Redacción) indicó:
“Puede que los valores obtenidos (en las mediciones realizadas en el agua de red) estén dentro de la normativa provincial, pero según la Organización Mundial de la Salud estamos consumiendo un agua de red con valores de 3 a 8 veces más cantidad de arsénico que lo recomendado a nivel mundial y nacional”.
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