22 oct 2008
"Meter cemento ... no es sinónimo de progreso”
6:40 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
El Diario de Villa María (22/10/2008)
"Meter cemento por todos lados no es sinónimo de progreso”
El concejal de la Democracia Cristiana, Alejandro Balanza, salió ayer al cruce de las críticas que le propinó a su bloque el titular de Acovim y el oficialismo accastellista.
En declaraciones a EL DIARIO, Balanza aclaró en primer término que ninguno de los tres componentes del sector democristiano concurrió a la reunión del lunes por el nuevo centro comercial, "porque se convocó a último momento y los tres miembros del bloque estábamos trabajando en asuntos específicos de nuestra tarea de concejales. Yo por ejemplo, estaba entrevistándome con la CTA". Como se recordará, el titular de Acovim, Roberto Salomón dijo públicamente que "la ausencia de los democristianos significa que no tienen interés por el desarrollo de la ciudad".
Balanza, en nombre de su bloque, le respondió que "el 25 de setiembre hemos dado a conocer por escrito nuestro parecer sobre la idea de nuevo centro comercial a Acovim, y desde ese momento no hemos recibido ninguna respuesta. Habría que analizar quién es el que se está borrando y quién no".
Al respecto, el edil opositor ratificó que la posición de su núcleo cuestiona la urgencia con la que se está tratando de imponer el proyecto, y consideró que "por tratarse de un espacio público, la comuna debería llamar a un concurso público de ideas para ver qué es lo que beneficia a más habitantes de la ciudad".
"Se estima que en Villa María hay entre 5 mil y 7 mil comercios, y con la iniciativa de Acovim sólo se beneficiarían 80 empresarios. Entendemos que habría que estudiar con más detenimiento la idea, que por otra parte no parte de un estudio exhaustivo de las cuestiones urbanísticas, ni provee detalles de lo que se pretende edificar", expresó Balanza.
"Nosotros hemos aprobado que ese grupo se pusiera a elaborar un proyecto, y ahora como ponemos objeciones nos acusan de poner trabas. No hemos cambiado de idea, pero sí vemos que Acovim cambia su propuesta permanentemente: primero se hablaba de playa subterránea, de torres, de apart hotel, ahora no se habla nada de eso", prosiguió.
Asimismo, Balanza observó que el proyecto que está en el Concejo Deliberante, "en ningún momento precisa que para ocupar un local en el centro comercial sea un requisito ser comerciante villamariense, por el contrario se está anticipando que se radicarán grandes tiendas foráneas".
"Todos los concejales, no sólo nosotros -enfatizó el concejal de la DC- tenemos el deber de pensar que se trata de un enorme predio que el ex intendente Veglia consiguió para la ciudad con el cargo de hacer un salón de convenciones. En cambio, los promotores del centro comercial acceden a hacer el salón de convenciones pero con un usufructo por 50 años para el que construya el salón. Eso no es velar por el interés público."
Cambiar de ideas puede ser positivo
"Cambiar de ideas puede ser positivo", continuó Balanza, "y ahí está el ejemplo de los terrenos del Aeroclub. Algunos concejales opositores y oficialistas, consideran entusiasmados que el proyecto presentado por el Frente Cívico y Social da un giro de 180 grados a la cuestión. Pero ese proyecto no hubiera existido si firmábamos ciegamente la primera propuesta que nos llegó. En conclusión, parar para reflexionar no es obstruir, es buscar el interés general por encima de los particulares".
El vocero del bloque afín al ex candidato a intendente Raúl Costa afirmó que "para nosotros, las prioridades para el uso del terreno de San Juan y Sabattini son, en primer término un enorme respeto a la cuestión ambiental, y en segundo lugar procurar que toda la población se beneficie con el destino que se le dé al predio".
"Meter cemento por todos lados no es sinónimo de progreso, porque de esa manera se van perdiendo espacios verdes", agregó.
Compromisos políticos
Al preguntársele a qué obedece el fuerte apoyo del oficialismo al proyecto de Acovim, Balanza respondió que "puede haber un compromiso político por la afinidad que tiene esa entidad con el municipio".
También dijo que en el Gobierno de Eduardo Accastello "prima la ideología de las oportunidades de negocio, cuando un gobierno popular debe tener en cuenta las oportunidades de servicio, ya que el Estado debe hacer efectivo los derechos de los ciudadanos, como por ejemplo el de la vivienda".
"Esa ideología de las oportunidades de negocio se emparenta con la teoría del derrame, según la cual, los nuevos negocios indirectamente favorecen a los más desprotegidos, pero es un concepto que está muy cuestionado por la realidad mundial", opinó.
Finalmente, Balanza se declaró extrañado de que "no se pueda hacer un centro comercial sin usar terrenos públicos. Hace poco estaba a la venta un gran terreno frente al Banco de Córdoba, pero no se juntaron los comerciantes para adquirirlo".
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El Puntal de Villa María (22/10/2008)
Concejales del Frente Cívico y Social: “no pondrán la firma sin ver”
En relación con la iniciativa para la construcción de un centro comercial en terrenos férreos, el bloque presentó un escrito en el cual destacó que “la metodología propuesta no es la adecuada”
“Lo estamos estudiando. Ya presentamos algunas objeciones y cuestiones a resolver previamente. Una de ellas es el cargo que tienen las tierras (para la construcción de un centro de convenciones), y si bien se nos dice que no habría ningún inconveniente queremos verlo escrito y tener el asesoramiento jurídico de que estamos obrando dentro de las leyes. Otro tema es los criterios de adjudicación, no sé si la licitación es el mejor sistema, ya que cuando se nos presentó la idea en principio dijimos que sí, pero en ese momento lo que se decía era que la adjudicación iba a ser para los comerciantes de Villa María de todos los barrios no sólo del centro, pero de eso el proyecto no establece absolutamente nada. Hay cosas que no están claras”, afirmó ayer el edil del Frente Cívico y Social, Miguel Zandrino, al ser consultado por este matutino en relación con el proyecto que impulsa Acovim para la concreción de un centro comercial en terrenos férreos (que la Nación cedió al Municipio).
Precisamente, el bloque que el médico integra junto a Carlos Andrada presentó días atrás una nota ante el presidente del Concejo Deliberante, Javier Suppo. Entre otras precisiones, en la misma apuntaron: “Sin entrar en detalle acerca de la letra del proyecto entendemos que la metodología propuesta no es la adecuada y que el anteproyecto llama a licitación para la contratación de un proyecto, y esto implica que el pliego nada define respecto de la ubicación de los locales, las dimensiones de los mismos, las construcciones anexas, la parquización. En definitiva, queda en manos de privados la planificación del espacio público, facultad indelegable del Estado claramente definida en nuestra Carta Orgánica Municipal”.
Como se conoce, la iniciativa que nació a instancias de un proyecto de Acovim tiene tratamiento legislativo. Apunta a la contratación del proyecto y construcción de un complejo edilicio cívico-comercial (auditorio, locales comerciales, viviendas, oficinas), salón de usos múltiples (reciclado y recuperación del galpón existente), playa de estacionamiento, puentes peatonales, armonización e integración del sector. Tiene el apoyo del oficialismo, mientras que la Democracia Cristiana oportunamente planteó disidencias y dudas.
“No sabemos cuántos van a ser los metros cubiertos, qué espacio se va a dejar para paseo, arbolado o algún tipo de espacio verde. No podemos poner la firma sin ver”, sostuvo Zandrino.
Ante la pregunta sobre qué debería tener la propuesta para que el FCS la avale, respondió: “Un proyecto de este tipo, que significa pagar el costo de sacrificar un espacio que podría ser un espacio verde, debiera ser un lugar donde la gente pudiera tener un paseo y un lugar de fácil acceso para todo el mundo. Y hay un cargo específico de centro de convenciones que debiera ser de amplio acceso para las instituciones de la ciudad, evitando otro tipo de cuestiones de tipo inmobiliaria”. Y aclaró que eso es un no a cualquier intención de construir un hotel o un edificio de departamentos en el predio.
Por otra parte, y consultado sobre si le corresponde al Estado entregar tierras públicas para que privados hagan sus locales, manifestó que “no es obligación, lo que pasa es que justamente el Ejecutivo debe ser el que planifique el desarrollo de la ciudad, y como en la ley nacional por la cual se dan en concesión estos terrenos se incluye que pueden ser para desarrollo urbano, de manera que si estuviera dentro de ese marco estaría bien”.
Finalmente indicó que “el olfato” les dice que “puede haber también un negocio inmobiliario” y se preguntó “¿qué va a hacer el que gane la licitación esta que será un empresario que va a manejar esto?, ¿de qué manera?”. Y concluyó: “No podemos dejar eso librado al libre mercado”.
La palabra
Volviendo al escrito presentado por la bancada, en el mismo, Zandrino y Andrada admitieron que desde un principio compartieron la idea de “ceder el espacio público para favorecer el desarrollo económico de la ciudad”. Pero aclararon que el proyecto debe tener un objetivo “específico, cerrado e invariable y no un destino vago, dejando abierto el camino para realizar cambios, construcciones u obras que desnaturalicen el fin de permitir el acceso de los comerciantes locales a su local propio”.
Párrafos más adelante puntualizaron: “Sin dudas, cuando se consulta con los ciudadanos acerca de la idea de que desde el Estado se facilite el acceso a los comerciantes locales para tener su propio local casi todos la comparten...pero cuando se comenta las condiciones que plantea el anteproyecto presentado, la mayoría lo rechaza”.
Por eso propusieron que se llame a un concurso de ideas, y que si el obstáculo es que comerciantes no disponen de recursos para financiar un anteproyecto que incluya planimetría (implicaría una erogación de aproximadamente 16 mil pesos), para disminuir los costos se convoque al Consejo Asesor Municipal, que integran todos los colegios profesionales, “como así también entidades intermedias de relevancia en el tema en cuestión, como AERCA, institución que nuclea a comerciantes”.
Así, una vez definido el proyecto concreto a ejecutar se estaría en condiciones de evaluar “el mecanismo más apropiado para desarrollarlo”.
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"Meter cemento por todos lados no es sinónimo de progreso”
El concejal de la Democracia Cristiana, Alejandro Balanza, salió ayer al cruce de las críticas que le propinó a su bloque el titular de Acovim y el oficialismo accastellista.
En declaraciones a EL DIARIO, Balanza aclaró en primer término que ninguno de los tres componentes del sector democristiano concurrió a la reunión del lunes por el nuevo centro comercial, "porque se convocó a último momento y los tres miembros del bloque estábamos trabajando en asuntos específicos de nuestra tarea de concejales. Yo por ejemplo, estaba entrevistándome con la CTA". Como se recordará, el titular de Acovim, Roberto Salomón dijo públicamente que "la ausencia de los democristianos significa que no tienen interés por el desarrollo de la ciudad".
Balanza, en nombre de su bloque, le respondió que "el 25 de setiembre hemos dado a conocer por escrito nuestro parecer sobre la idea de nuevo centro comercial a Acovim, y desde ese momento no hemos recibido ninguna respuesta. Habría que analizar quién es el que se está borrando y quién no".
Al respecto, el edil opositor ratificó que la posición de su núcleo cuestiona la urgencia con la que se está tratando de imponer el proyecto, y consideró que "por tratarse de un espacio público, la comuna debería llamar a un concurso público de ideas para ver qué es lo que beneficia a más habitantes de la ciudad".
"Se estima que en Villa María hay entre 5 mil y 7 mil comercios, y con la iniciativa de Acovim sólo se beneficiarían 80 empresarios. Entendemos que habría que estudiar con más detenimiento la idea, que por otra parte no parte de un estudio exhaustivo de las cuestiones urbanísticas, ni provee detalles de lo que se pretende edificar", expresó Balanza.
"Nosotros hemos aprobado que ese grupo se pusiera a elaborar un proyecto, y ahora como ponemos objeciones nos acusan de poner trabas. No hemos cambiado de idea, pero sí vemos que Acovim cambia su propuesta permanentemente: primero se hablaba de playa subterránea, de torres, de apart hotel, ahora no se habla nada de eso", prosiguió.
Asimismo, Balanza observó que el proyecto que está en el Concejo Deliberante, "en ningún momento precisa que para ocupar un local en el centro comercial sea un requisito ser comerciante villamariense, por el contrario se está anticipando que se radicarán grandes tiendas foráneas".
"Todos los concejales, no sólo nosotros -enfatizó el concejal de la DC- tenemos el deber de pensar que se trata de un enorme predio que el ex intendente Veglia consiguió para la ciudad con el cargo de hacer un salón de convenciones. En cambio, los promotores del centro comercial acceden a hacer el salón de convenciones pero con un usufructo por 50 años para el que construya el salón. Eso no es velar por el interés público."
Cambiar de ideas puede ser positivo
"Cambiar de ideas puede ser positivo", continuó Balanza, "y ahí está el ejemplo de los terrenos del Aeroclub. Algunos concejales opositores y oficialistas, consideran entusiasmados que el proyecto presentado por el Frente Cívico y Social da un giro de 180 grados a la cuestión. Pero ese proyecto no hubiera existido si firmábamos ciegamente la primera propuesta que nos llegó. En conclusión, parar para reflexionar no es obstruir, es buscar el interés general por encima de los particulares".
El vocero del bloque afín al ex candidato a intendente Raúl Costa afirmó que "para nosotros, las prioridades para el uso del terreno de San Juan y Sabattini son, en primer término un enorme respeto a la cuestión ambiental, y en segundo lugar procurar que toda la población se beneficie con el destino que se le dé al predio".
"Meter cemento por todos lados no es sinónimo de progreso, porque de esa manera se van perdiendo espacios verdes", agregó.
Compromisos políticos
Al preguntársele a qué obedece el fuerte apoyo del oficialismo al proyecto de Acovim, Balanza respondió que "puede haber un compromiso político por la afinidad que tiene esa entidad con el municipio".
También dijo que en el Gobierno de Eduardo Accastello "prima la ideología de las oportunidades de negocio, cuando un gobierno popular debe tener en cuenta las oportunidades de servicio, ya que el Estado debe hacer efectivo los derechos de los ciudadanos, como por ejemplo el de la vivienda".
"Esa ideología de las oportunidades de negocio se emparenta con la teoría del derrame, según la cual, los nuevos negocios indirectamente favorecen a los más desprotegidos, pero es un concepto que está muy cuestionado por la realidad mundial", opinó.
Finalmente, Balanza se declaró extrañado de que "no se pueda hacer un centro comercial sin usar terrenos públicos. Hace poco estaba a la venta un gran terreno frente al Banco de Córdoba, pero no se juntaron los comerciantes para adquirirlo".
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El Puntal de Villa María (22/10/2008)
Concejales del Frente Cívico y Social: “no pondrán la firma sin ver”
En relación con la iniciativa para la construcción de un centro comercial en terrenos férreos, el bloque presentó un escrito en el cual destacó que “la metodología propuesta no es la adecuada”
“Lo estamos estudiando. Ya presentamos algunas objeciones y cuestiones a resolver previamente. Una de ellas es el cargo que tienen las tierras (para la construcción de un centro de convenciones), y si bien se nos dice que no habría ningún inconveniente queremos verlo escrito y tener el asesoramiento jurídico de que estamos obrando dentro de las leyes. Otro tema es los criterios de adjudicación, no sé si la licitación es el mejor sistema, ya que cuando se nos presentó la idea en principio dijimos que sí, pero en ese momento lo que se decía era que la adjudicación iba a ser para los comerciantes de Villa María de todos los barrios no sólo del centro, pero de eso el proyecto no establece absolutamente nada. Hay cosas que no están claras”, afirmó ayer el edil del Frente Cívico y Social, Miguel Zandrino, al ser consultado por este matutino en relación con el proyecto que impulsa Acovim para la concreción de un centro comercial en terrenos férreos (que la Nación cedió al Municipio).
Precisamente, el bloque que el médico integra junto a Carlos Andrada presentó días atrás una nota ante el presidente del Concejo Deliberante, Javier Suppo. Entre otras precisiones, en la misma apuntaron: “Sin entrar en detalle acerca de la letra del proyecto entendemos que la metodología propuesta no es la adecuada y que el anteproyecto llama a licitación para la contratación de un proyecto, y esto implica que el pliego nada define respecto de la ubicación de los locales, las dimensiones de los mismos, las construcciones anexas, la parquización. En definitiva, queda en manos de privados la planificación del espacio público, facultad indelegable del Estado claramente definida en nuestra Carta Orgánica Municipal”.
Como se conoce, la iniciativa que nació a instancias de un proyecto de Acovim tiene tratamiento legislativo. Apunta a la contratación del proyecto y construcción de un complejo edilicio cívico-comercial (auditorio, locales comerciales, viviendas, oficinas), salón de usos múltiples (reciclado y recuperación del galpón existente), playa de estacionamiento, puentes peatonales, armonización e integración del sector. Tiene el apoyo del oficialismo, mientras que la Democracia Cristiana oportunamente planteó disidencias y dudas.
“No sabemos cuántos van a ser los metros cubiertos, qué espacio se va a dejar para paseo, arbolado o algún tipo de espacio verde. No podemos poner la firma sin ver”, sostuvo Zandrino.
Ante la pregunta sobre qué debería tener la propuesta para que el FCS la avale, respondió: “Un proyecto de este tipo, que significa pagar el costo de sacrificar un espacio que podría ser un espacio verde, debiera ser un lugar donde la gente pudiera tener un paseo y un lugar de fácil acceso para todo el mundo. Y hay un cargo específico de centro de convenciones que debiera ser de amplio acceso para las instituciones de la ciudad, evitando otro tipo de cuestiones de tipo inmobiliaria”. Y aclaró que eso es un no a cualquier intención de construir un hotel o un edificio de departamentos en el predio.
Por otra parte, y consultado sobre si le corresponde al Estado entregar tierras públicas para que privados hagan sus locales, manifestó que “no es obligación, lo que pasa es que justamente el Ejecutivo debe ser el que planifique el desarrollo de la ciudad, y como en la ley nacional por la cual se dan en concesión estos terrenos se incluye que pueden ser para desarrollo urbano, de manera que si estuviera dentro de ese marco estaría bien”.
Finalmente indicó que “el olfato” les dice que “puede haber también un negocio inmobiliario” y se preguntó “¿qué va a hacer el que gane la licitación esta que será un empresario que va a manejar esto?, ¿de qué manera?”. Y concluyó: “No podemos dejar eso librado al libre mercado”.
La palabra
Volviendo al escrito presentado por la bancada, en el mismo, Zandrino y Andrada admitieron que desde un principio compartieron la idea de “ceder el espacio público para favorecer el desarrollo económico de la ciudad”. Pero aclararon que el proyecto debe tener un objetivo “específico, cerrado e invariable y no un destino vago, dejando abierto el camino para realizar cambios, construcciones u obras que desnaturalicen el fin de permitir el acceso de los comerciantes locales a su local propio”.
Párrafos más adelante puntualizaron: “Sin dudas, cuando se consulta con los ciudadanos acerca de la idea de que desde el Estado se facilite el acceso a los comerciantes locales para tener su propio local casi todos la comparten...pero cuando se comenta las condiciones que plantea el anteproyecto presentado, la mayoría lo rechaza”.
Por eso propusieron que se llame a un concurso de ideas, y que si el obstáculo es que comerciantes no disponen de recursos para financiar un anteproyecto que incluya planimetría (implicaría una erogación de aproximadamente 16 mil pesos), para disminuir los costos se convoque al Consejo Asesor Municipal, que integran todos los colegios profesionales, “como así también entidades intermedias de relevancia en el tema en cuestión, como AERCA, institución que nuclea a comerciantes”.
Así, una vez definido el proyecto concreto a ejecutar se estaría en condiciones de evaluar “el mecanismo más apropiado para desarrollarlo”.
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