24 may 2008
Demandas por la contaminación con plomo
5:34 p.m. | 
Publicado por
Eco Sitio |
La Voz del Interior (24/05/2008)
Cinco demandas más por la contaminación con plomo
Ex empleados responsabilizan a la Metalúrgica Bouwer y a la Provincia por tener este metal en la sangre. Ya hay una demanda de vecinos. No se remedió el sitio.
Cinco ex empleados de la fundición de plomo de la localidad de Bouwer (18 kilómetros al sur de la ciudad de Córdoba), sospechada de contaminar por 21 años, iniciaron una demanda civil por daños y perjuicios a la metalúrgica y a la ex Agencia Córdoba Ambiente debido a los altos niveles de plomo detectados en su organismo.
La demanda civil es similar a la encarada por la familia de María Rosa Pavani, que vive a 50 metros de la fundición. La hija de 6 años de María Rosa, L., registró niveles severos de plomo en sangre y huesos, por lo que realiza un tratamiento de curación desde hace dos años.
Este caso lo dio a conocer La Voz del Interior en diciembre de 2005. La investigación del diario también reveló que, en 2003, un estudio detectó varias irregularidades en la metalúrgica, pero la ex Agencia Córdoba Ambiente, que conocía los datos, no ejerció su poder de policía para emplazarla a que adecuara las instalaciones.
Toda esta información consta en el expediente administrativo de la ex Agencia Córdoba Ambiente –hoy Secretaría de Ambiente provincial– que fue incorporado como prueba en el juicio iniciado por María Rosa.
“Del expediente administrativo de la ex Agencia Córdoba Ambiente, surgiría que este organismo conocía las irregularidades de la metalúrgica y no habría tomado medidas”, comentó Alberto Misino, abogado que patrocina a la familia de María Rosa y a los ex empleados.
La ex Agencia Córdoba Ambiente era una sociedad del Estado. Ahora está en liquidación, al ser transformada en Secretaría de Ambiente provincial en el actual gobierno de Juan Schiaretti. Según Misino, el responsable de la liquidación todavía no ha tomado participación en el juicio que tiene el organismo en su contra.
A su vez, los ex empleados también le realizaron una demanda laboral a la fundición porque no les pagó la indemnización cuando cerró, en agosto de 2005.
Varios estudios determinaron que al menos 16 habitantes de Bouwer, entre ex empleados y vecinos de la fundición, presentaron niveles de plomo en sangre por encima de lo que prevé la Organización Mundial de la Salud (OMS). En 2003, un análisis estableció que la chimenea de la fundición emitía humo con 35 veces más de plomo que los niveles normales.
La casa de María Rosa todavía está contaminada, pero la familia se niega a irse, a pesar de que los especialistas lo creen necesario para la recuperación de la niña. Ahora L. tiene 35 microgramos por decilitro de sangre, 25 microgramos por encima de lo normal.
“No quiero irme de mi casa. Quiero que remedien el lugar o que me den los materiales y los hacemos nosotros”, dijo María Rosa. Su esposo y otro hijo también están en tratamiento para eliminar el plomo en sangre.
La Secretaría de Ambiente emplazó dos veces a los dueños de la fundición para que presenten el proyecto de remediación. Vencidos esos plazos, se iniciarán las acciones legales correspondientes, informaron desde el organismo provincial.
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Lo publicado
En diciembre de 2005, La Voz del Interior publicó que 12 vecinos de la fundición tenían valores de plomo en sangre por encima de lo normal. Entre ellos, la familia de María Rosa Pavani.
Sin autorización. La metalúrgica trabajó 21 años sin autorización. En 2003, un análisis determinó que la chimenea emitía humo con 35 veces más de plomo que lo permitido. La ex Agencia Córdoba Ambiente lo sabía, pero nunca tomó medidas.
Juicio. María Rosa inició una demanda por daños y perjuicios. Su hija menor llegó a tener cuatro veces más de plomo en sangre que lo normal.
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Ex empleados responsabilizan a la Metalúrgica Bouwer y a la Provincia por tener este metal en la sangre. Ya hay una demanda de vecinos. No se remedió el sitio.
Cinco ex empleados de la fundición de plomo de la localidad de Bouwer (18 kilómetros al sur de la ciudad de Córdoba), sospechada de contaminar por 21 años, iniciaron una demanda civil por daños y perjuicios a la metalúrgica y a la ex Agencia Córdoba Ambiente debido a los altos niveles de plomo detectados en su organismo.
La demanda civil es similar a la encarada por la familia de María Rosa Pavani, que vive a 50 metros de la fundición. La hija de 6 años de María Rosa, L., registró niveles severos de plomo en sangre y huesos, por lo que realiza un tratamiento de curación desde hace dos años.
Este caso lo dio a conocer La Voz del Interior en diciembre de 2005. La investigación del diario también reveló que, en 2003, un estudio detectó varias irregularidades en la metalúrgica, pero la ex Agencia Córdoba Ambiente, que conocía los datos, no ejerció su poder de policía para emplazarla a que adecuara las instalaciones.
Toda esta información consta en el expediente administrativo de la ex Agencia Córdoba Ambiente –hoy Secretaría de Ambiente provincial– que fue incorporado como prueba en el juicio iniciado por María Rosa.
“Del expediente administrativo de la ex Agencia Córdoba Ambiente, surgiría que este organismo conocía las irregularidades de la metalúrgica y no habría tomado medidas”, comentó Alberto Misino, abogado que patrocina a la familia de María Rosa y a los ex empleados.
La ex Agencia Córdoba Ambiente era una sociedad del Estado. Ahora está en liquidación, al ser transformada en Secretaría de Ambiente provincial en el actual gobierno de Juan Schiaretti. Según Misino, el responsable de la liquidación todavía no ha tomado participación en el juicio que tiene el organismo en su contra.
A su vez, los ex empleados también le realizaron una demanda laboral a la fundición porque no les pagó la indemnización cuando cerró, en agosto de 2005.
Varios estudios determinaron que al menos 16 habitantes de Bouwer, entre ex empleados y vecinos de la fundición, presentaron niveles de plomo en sangre por encima de lo que prevé la Organización Mundial de la Salud (OMS). En 2003, un análisis estableció que la chimenea de la fundición emitía humo con 35 veces más de plomo que los niveles normales.
La casa de María Rosa todavía está contaminada, pero la familia se niega a irse, a pesar de que los especialistas lo creen necesario para la recuperación de la niña. Ahora L. tiene 35 microgramos por decilitro de sangre, 25 microgramos por encima de lo normal.
“No quiero irme de mi casa. Quiero que remedien el lugar o que me den los materiales y los hacemos nosotros”, dijo María Rosa. Su esposo y otro hijo también están en tratamiento para eliminar el plomo en sangre.
La Secretaría de Ambiente emplazó dos veces a los dueños de la fundición para que presenten el proyecto de remediación. Vencidos esos plazos, se iniciarán las acciones legales correspondientes, informaron desde el organismo provincial.
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Lo publicado
En diciembre de 2005, La Voz del Interior publicó que 12 vecinos de la fundición tenían valores de plomo en sangre por encima de lo normal. Entre ellos, la familia de María Rosa Pavani.
Sin autorización. La metalúrgica trabajó 21 años sin autorización. En 2003, un análisis determinó que la chimenea emitía humo con 35 veces más de plomo que lo permitido. La ex Agencia Córdoba Ambiente lo sabía, pero nunca tomó medidas.
Juicio. María Rosa inició una demanda por daños y perjuicios. Su hija menor llegó a tener cuatro veces más de plomo en sangre que lo normal.
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