15 mar 2007

Cinco años recolectando pilas

El Puntal de Río Cuarto (15/03/2007)
Alumnos de Mackenna llevan cinco años recolectando pilas

El programa de recolección de pilas de todo tipo que vienen realizando el personal docente y los alumnos del Centro Educativo “Guido Spano”, ya ingresó en el quinto año de realización.
Todos los chicos, al momento de ver pilas arrojadas en la calle o en alguna vivienda, las piden, las llevan a la escuela y las depositan en recipientes especiales.
María Julia Estrada, directora del establecimiento, y Susana Mengoni, vice, manifestaron que esta acción ya se ha constituido en algo absolutamente normal, pero recalcaron que los alumnos son totalmente conscientes de la peligrosidad de contaminación de suelos y napas freáticas que producen las baterías cuando son enterradas o arrojadas en los depósitos de basura comunes.
“Esta campaña ingresó en el quinto año, no tenemos una idea de cuántas hemos recopilado, pero podemos asegurar que son miles y miles. Las llevamos a una empresa receptora de Córdoba, donde hacen un correcto tratamiento para su eliminación”, dijo María Estrada.

El pueblo colabora
Lo que a primera vista aparece como una acción simple de juntar pilas usadas, motivó a que en varios sectores de la comunidad los vecinos se sumen para colaborar.
“Hay algunos sectores e incluso comercios donde dejamos los recipientes para guardar las pilas, cuando están llenos o tienen una buena cantidad nos avisan o las traen personalmente. Es más, hay personas que se interesaron muchísimo en la campaña y colaboran estrechamente con nosotros”, indicaron las docentes.
Si se toma como punto de partida que Vicuña Mackenna tiene en la actualidad una población que supera las 15 mil personas, la utilización de electrodomésticos es muy grande y seguramente que la utilización de las pilas también.
Los chicos todos los años acentúan en el estudio de los componentes químicos que contienen estas baterías y qué daño pueden hacer a la ecología y el medio ambiente si no son tratadas como corresponde al momento de su eliminación.
Las pilas que utilizan los relojes son más peligrosas porque los componentes químicos son de mayor peligrosidad.
A todo esto y a medida que las docentes iban explicando pormenores de esta campaña, un grupo de niños llegó precisamente con un buen número que depositaron en un envase demarcado convenientemente.
“Habrá visto que a esta acción los chicos la realizan con naturalidad”, acotó Susana Mengoni, por lo que la idea de preservar los suelos se puede concretar siempre y cuando exista concientización de parte de una comunidad interesada en colaborar como en este caso se viene realizando con los alumnos del Centro Educativo Guido Spano.

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