17 nov 2006

Alta Gracia, con el aire viciado

La Voz del Interior (17/11/2006)
Alta Gracia, con el aire viciado

Mientras se investiga el origen de los olores desagradables que impregnan el ambiente en la región central del Departamento Santa María, vecinos y autoridades de Alta Gracia y Anisacate arremeten contra un criadero de animales bajo la modalidad de feed lot propiedad de la familia Becerra.
La estancia Santa Mónica, ubicada sobre la ruta provincial 5, sería -según los mandatarios comunales- la fuente de emanación de las pestilencias que invaden la zona.
"Estamos cansados de aguantar el olor y nadie hace nada" es la frase que sintetiza el repetido reclamo de los habitantes de Alta Gracia y Anisacate. En el día a día, la dirección del viento y la humedad resultan variables determinantes para definir las características del aire que se respira.
Si bien para algunos vecinos este emprendimiento agropecuario es responsable por los aromas nauseabundos, otros especulan con la posibilidad de que provengan de la laguna sanitaria de Alta Gracia ubicada en la misma zona, en tanto hay quienes creen en la versión de múltiples criaderos de cerdos.
Mientras se definen las responsabilidades y aguardan una solución, los vecinos ruegan que las condiciones climáticas no acentúen la problemática.

Acusaciones oficiales
El intendente de Alta Gracia, Mario Bonfigli, responsabilizó a la Cooperativa de Trabajadores de Aguas Sanitarias de Alta Gracia (Cosag) por las condiciones en que se encuentran las lagunas sanitarias.
Alertado por estas versiones, Enrique Garay, titular de la prestataria del servicio, inspeccionó junto a funcionarios municipales las lagunas. Luego de la recorrida, Oscar Tissot, secretario de Gobierno, reconoció que "no son las mismas emanaciones que invadieron la ciudad", haciendo gala del avezado olfato que los continuos olores agudizaron entre los lugareños. Poco después, Bonfigli rectificaba sus afirmaciones y arremetía contra el feed lot con la misma severidad que días atrás lo hizo con Cosag.
El jefe comunal de Anisacate, Ramón Salazar, recogió las quejas de los habitantes y gestionó ante los organismos provinciales en busca de una respuesta que lleva años de espera. Mientras, los vecinos de esa comuna se organizan para recolectar firmas y movilizarse si el mal olor no cesa.
La lluvia de reclamos y denuncias a la Agencia Córdoba Ambiente derivó en una auditoría al campo indicado como generador de la indignación regional.
El miércoles 8 los auditores acudieron al lugar donde según se supo no objetaron las condiciones de cría, aunque habrían sugerido la plantación de árboles que actúen como barrera natural entre el campo y las localidades cercanas. No fue posible obtener una respuesta de la Agencia Córdoba Ambiente al respecto.
En el campo de Becerra hay 800 cabezas de ganado vacuno que proveen a la cadena de supermercados de la familia. "Cumplimos con los requisitos que nos exigió Córdoba Ambiente. Ahora esperamos las respuestas de la Comunidad regional", detalló Martín Becerra, uno de los propietarios.
Técnicos consultados por este diario consideraron inevitable que se generen olores, tanto en este feed lot de Becerra como el que pertenece a la familia Ternasky y se encuentra al norte de la ciudad. Ese establecimiento también es cuestionado por los vecinos, debido a que posee árboles en los corrales, que evitan que el sol seque los excrementos y la humedad potenciaría las emanaciones.

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